Fuerte caída del poder adquisitivo registra la economía santafesina
La actividad disminuye a un ritmo interanual del 3,1% y las remuneraciones reales se desplomaron 9,1% en los últimos 12 meses.
La actividad disminuye a un ritmo interanual del 3,1% y las remuneraciones reales se desplomaron 9,1% en los últimos 12 meses.
El Indicador Compuesto de la Actividad Económica de Santa Fe se ubicó en 161,1 puntos, presentando una variación mensual de -0,8% respecto al mes de julio de 2018. La tasa interanual de la actividad económica provincial (agosto de 2018 / agosto de 2017) fue de -3,1%.
La variación parcial acumulada en 2018 se calcula en -3,7%. En agosto de 2018 continúa la baja en la actividad económica provincial. El Icasfe presentó una tasa del -0,8% respecto a julio, lo que implica un acumulado del -3,7% durante los primeros ocho meses del año.
Los resultados del mes señalan una balanza que continúa sesgada hacia las variaciones negativas. Únicamente cuatro de los catorce indicadores considerados en el índice coincidente presentaron cifras mensuales favorables. En la comparación interanual se observan seis variaciones positivas que no superan el 3,0%; el resto de las series obtuvieron tasas negativas que en algunos casos superan los dos dígitos.
La molienda de oleaginosas presentó un incremento del 2,4% en agosto pero mantiene una contracción interanual del -16,5%. Por su parte, el consumo de hidrocarburos insumidos por la agroindustria y el trasporte también mejoró respecto a julio (3,4%) y se ubica 1,9% por encima del registro de agosto de 2017.
La producción láctea se redujo 0,6% mensual y la faena de ganado bovino y porcino 1,7%. En términos interanuales los lácteos se mantuvieron estables, mientras que la faena se incrementó un 2,9%.
El despacho de gas industrial mostró la segunda tasa mensual consecutiva de caída (-4,0%), y la energía eléctrica la sexta (en este caso -1,5%). Sus variaciones interanuales alcanzaron 2,1 y -6,4%, respectivamente.
Los puestos de trabajo registrados (altas netas) presentaron una tasa mensual del 0,2% y continúan levemente en alza a pesar de la recesión: con una mejora de 0,3% interanual. Por el contrario, las remuneraciones reales de los asalariados formales cayó otro 2,4% en agosto, y marca una baja en términos interanuales del 9,1%. Esto implica una disminución significativa del poder adquisitivo de las familias que impacta tanto en el consumo minorista como la adquisición de bienes durables.
La situación es aún más aguda si consideramos el valor de los ingresos en términos internacionales. Las ventas en supermercados de las grandes superficies instaladas en la provincia agudizaron su caída de corto plazo con una variación mensual del -1,4%, recortando la comparación interanual al 2,2%.
El patentamiento de vehículos nuevos, con una tasa mensual del -8,1%, y una variación interanual del -28,2%, se mantiene al final de las tablas del Gráfico 2. En relación al consumo de cemento los resultados obtenidos fueron de -1,6 y -1,3%, respectivamente.
Por último, los recursos tributarios de la provincia marcaron una disminución mensual del 0,6%, aunque en términos interanuales todavía se mantienen en terreno positivo (2,0%).
En la web
El estudio completo y las series históricas pueden ser consultadas en http://ces.bcsf.com.ar. El Icasfe es elaborado por el Centro de Estudios y Servicios que dirige la licenciada María Lucrecia D’Jorge, coordina el licenciado Pedro Cohan e integran los investigadores Lautaro Zanini, María Florencia Camusso, Ignacio Francisco Falco, Ramiro Jorge y Ailén Bianchi. El CES funciona en el ámbito de la Fundación Bolsa de Comercio de Santa Fe que preside Ulises Mendoza y que tiene por director ejecutivo al doctor Gustavo Vittori.
Las ventas en supermercados de las grandes superficies instaladas en la provincia agudizaron su caída de corto plazo con una variación mensual del -1,4%, recortando la comparación interanual al 2,2%.
Síntesis y perspectivas
En agosto la actividad económica santafesina registró una disminución de 3,1% en términos interanuales. Como referencia se observa que esta tasa es similar a los puntos de mayor caída datados durante las tres últimas fases recesivas en 2012, 2014 y 2016.
Como característica particular, la situación económica actual presenta un grado de difusión sectorial profundo, afectando en mayor o menor medida a todas las actividades productivas más representativas de la región. De hecho, el indicador que mide el porcentaje de series que contribuyen positivamente al Icasfe en el plano de los últimos 6 meses, se encuentra en 18,0%.
Un porcentaje tan bajo no se había alcanzado siquiera durante la recesión acontecida entre 2008 y 2009, la más significativa de la década. Por el momento es difícil detectar sectores que puedan impulsar una recuperación de corto plazo.
Las expectativas están volcadas al sector agropecuario, comenzando por la cosecha de trigo, y de las actividades sesgadas al sector externo que logren internalizar los beneficios de un mayor tipo de cambio a pesar de que los precios internacionales no acompañen.
