Gastronómicos santafesinos en rojo: las ventas por delivery no superan el 10% de la recaudación mensual

Los datos surgen de una encuesta realizada a 90 establecimientos de la ciudad, como bares y restaurantes. Desde la Asociación Hotelera y Gastronómica, aseguraron que la situación es "muy complicada, con ingresos cero"

Los datos surgen de una encuesta realizada a 90 establecimientos de la ciudad, como bares y restaurantes. Desde la Asociación Hotelera y Gastronómica, aseguraron que la situación es «muy complicada, con ingresos cero». Buscan crear un «comité de crisis» para el sector.

Sobre finales del mes de abril, la situación comienza a volverse insostenible y desesperante para muchos sectores económicos de la ciudad, en relación a la falta de ingresos que se registran producto de las medidas sociales y de sanidad respecto a la pandemia por el Covid-19. ¿Cuándo se activará el sector?, ¿cómo se pagarán los sueldos de abril?, ¿cómo continuará la economía después del aislamiento?, ¿llegarán ayudas del gobierno?, ¿serán suficientes?; son algunas de las preguntas que se hacen desde la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Santa Fe, al tiempo que definieron la situación como «complicadísima».

En este contexto, los bares y restaurantes de Santa Fe, en contraposición con lo que ocurre con la hotelería, tienen al menos una pequeña ventana de ventas desde el inicio de la cuarentena y aislamiento social, aunque la misma no alcance a cubrir ni el 10 por ciento de las ventas totales de un mes «normal». El ingenio y la «espalda» comercial de cada empresario de la gastronomía local es el único sostenimiento, mientras que desde el sector esperan una ayuda urgente por parte del gobierno.

Los resultados que se desprenden de una encuesta realizada por la Asociación Hotelera y Gastronómica de la ciudad a 90 establecimientos gastronómicos como bares y restaurantes, surge que de los 75 comercios que contestaron, el 50 por ciento «está trabajando con delivery», pero que dichas ventas, «en ningún caso supera al 10 por ciento de la recaudación total mensual».

«Pese al impulso por los empresarios gastronómicos de empezar a funcionar bajo la modalidad de pedidos, todavía están muy lejos de conseguir una facturación acorde al pago de un sueldo o boletas de servicio. Estamos hablando de ventas para mover la mercadería y para no cerrar las puertas de forma definitiva, o solventar algún gasto menor», subrayó a UNO Santa Fe, Joaquín Echagüe, vice presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Santa Fe (AEHG).

En relación a la situación del sector, Echagüe afirmó que «desde antes del comienzo de la pandemia ya veníamos muy golpeado, con fuertes signos de recesión. La llegada del aislamiento social y obligatorio nos significó un golpe de nocaut, con facturación cero y con cuentas que siguen corriendo, como sueldos, alquileres e impuestos. Al día de hoy, todavía no tuvimos respuestas o soluciones en materia salarial e impositiva».

En los últimos días, desde la Asociación junto a otras cámaras y a instituciones relacionadas al turismo en general de la provincia, presentaron una nota al gobernador de Santa Fe con el firme objetivo de decretar medidas urgentes para el rubro.

El cronograma de eventos sociales del 2020 para el sector gastronómico, desde antes de la pandemia, estaba definido y con fechas reservadas. Tanto casamientos, cumpleaños de 15 y festejos de diversas índole, tuvieron que reprogramarse y en muchos casos sin días establecidos. «La intención del cliente es mantenerlo y posdatarlo, siempre a la expectativa de reprogramarlos. Hoy se habla que una fecha estimativa, aproximada para realizar algún tipo de evento que oscilaría entre finales de agosto y septiembre, siempre trabajando y apostando al uso de protocolos de sanidad para determinadas cantidades de personas», manifestó el vice presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Santa Fe (AEHG), Joaquín Echagüe.

Si bien la reactivación del sector, claro está, no depende de las voluntades de los empresarios del rubro, toda se va ir dando en un marco muy dinámico marcado por la manifestación de la situación de contagios. «Estamos transitando un año perdido, no hay forma de hacerle frente a las obligaciones mensuales y cada empresario se la está rebuscando como puede. No hay un ámbito para debatir y discutir estos temas de cara a la reactivación, ni mucho menos para elaborar un plan de acción para la concientización de la ciudadanía para cuando todo esto pase», finalizó Echagüe.

Fuente: Uno