Insólito: el Concejo rosarino tiene 28 ediles distribuidos en 15 bloques políticos

Un sector del macrismo volvió a partirse ayer y ya hay 8 bancadas de un solo concejal. Los secretarios de cada sector cobran unos $ 91 mil

Un sector del macrismo volvió a partirse ayer y ya hay 8 bancadas de un solo concejal. Los secretarios de cada sector cobran unos $ 91 mil

Con la reciente creación del bloque unipersonal Propuesta Republicana, a cargo de Renata Ghilotti, los 28 concejales y concejalas del Palacio Vasallo quedaron divididos en 15 bloques, de los cuales 8 son unipersonales. Una atomización que se profundiza de cara a un año electoral como el 2021 donde habrá renovación de bancas. Cada secretario designado percibe el 70 por ciento de la dieta de un legislador estimada en unos 130 mil pesos.

Con la reciente creación de Propuesta Republicana, las reuniones de Labor Parlamentaria (comisión donde los bloques políticos le dan ingreso a los proyectos para ir al recinto) se transformarán en una “previa” de la sesión.
Sus encuentros serán como una suerte de ensayo de las sesiones de los jueves, ya que participarán 15 de los 28 edilas y ediles con mandato vigente. Es decir, los bloques son más de la mitad que la cantidad de bancas.

Un fenómeno en ascenso desde hace al menos un lustro y que se explica en gran medida de la siguiente manera. Los legisladores van juntos en una propuesta política al electorado, son electos por el voto popular, pero más tarde o más temprano modifican su postura y cambian de representación. Ello explica los 8 bloques unipersonales de la actualidad.

Esta atomización se da en un año donde el propio cuerpo votó un ahorro presupuestario. A tono con el contexto de crisis y el pedido de solidaridad desde el Estado, el Concejo Municipal se autoimpuso un recorte de 29.576 pesos en las dietas de unos 145 mil pesos mensuales.

Esto significaba un ahorro de 9.937.536 pesos al año. Pero los 14 bloques para 28 ediles significaban unos 13 millones de pesos al año. Sin embargo, la ecuación no licuó las expectativas del Palacio Vasallo. En abril pasado, los integrantes del legislativo local resolvieron que el monto obtenido a partir de la reducción de los salarios de los concejales durante estos meses se destinaría a asistencia alimentaria con una primera partida en el orden de los 2,5 millones de pesos.

Ahora, con la decisión de Ghilotti, la concejala macrista podrá solicitar un secretario, cuya remuneración equivale a un 70 por ciento de la dieta de un concejal.

A la hora de justificar su decisión, Ghilotti destacó: “Es el momento de tener una banca que represente los valores que el PRO que tenía como ideales. Quiero salir de la pelea Roy (López Molina) Angelini. Hay una grieta que no es política sino personal, pero nos lleva a todos puestos. Nos perdemos en peleas entre dos personas y lo único que se logra es desgastar el espacio. Rosario tiene una agenda para retomar que no está en los dirigentes”, fundamentó.

La concejala (cuyo mandato finaliza el año que viene) admitió que con López Molina “tenemos visiones políticas distintas, pero yo estoy parada en el mismo lugar de siempre y es ahí donde tenemos que volver: a nuestros orígenes. Esta disputa de dos sectores nos arrastró a todos y en vez de buscar lo mejor para la ciudad, chocamos la calesita. Ojalá retomemos el rumbo”, disparó.

En su comunicado de prensa, Ghilotti dejó al desnudo sus discrepancias con el acuerdo celebrado con su ex bloque Cambiemos que integraba junto a Roy y Agapito Blanco.

Cabe recordar que López Molina ocupa la vicepresidencia primera del cuerpo y en segundo lugar se ubica Marina Magnani, de Unidad Ciudadana.

“Algunos concejales pueden no coincidir como yo tampoco coincido con las mesas de diálogo que otros tienen con La Campora, los máximos responsables de la debacle institucional, social y económica que hoy sufrimos todos los argentinos”, declaró Ghilotti.

Escenario 2020

La fragmentación política es el rasgo más destacado de esta conformación en el Concejo Municipal.

Arrancó su composición que tendrá vigencia hasta diciembre de 2021 con 28 ediles, divididos en 14 bloques. Y ahora se agrega otro unipersonal.

En definitiva: lo que votaron los rosarinos con boleta única en junio de 2019 cambió su fisonomía legislativa. A punto tal, que los bloques mayoritarios son sólo dos; y ambos están conformados por cuatro integrantes.

Ciudad Futura con Luz Olazagoitía, Pedro Salinas, Caren Tepp y Jésica Pellegrini por un lado y Juntos por el Cambio con el ex presidente del cuerpo Alejandro Rosselló, Carlos Cardozo, Germana Figueroa Casas y Ana Martínez.

Le siguen el bloque del Frente de Todos con Eduardo Toniolli, Norma López y Alejandra Gómez Sáenz.

También con tres escaños se ubica el bloque Socialista con Verónica Irizar, Lorena Carbajal y Mónica Ferrero.

Con dos integrantes se ubica Unidad Ciudadana Marina Magnani y Andrés Giménez y Cambiemos con Roy López Molina y Agapito Blanco.

El resto son 8 bloques unipersonales de casi todo el arco político.

Como ya ocurrió en diciembre pasado las fisuras en las huestes macristas derivaron en una nueva fractura.

La emergencia en el transporte y sus derivaciones en el manejo político del proyecto dejaron a Ghilotti distanciada de Roy.

Rumores de pasillo que reeditaron la discusión de diciembre que provocó la partición del macrismo en el Palacio Vasallo.

“Roy traicionó a su bloque y eligió el Frente Progresista por sobre el candidato de Cambiemos”, señaló ayer Rosselló. “Nosotros somos Juntos por el Cambio y él no puede argumentar por qué votó a la candidata del Frente Progresista. Hizo una negociación particular con Ciudad Futura y La Campora”, había señalado Rosselló. Roy respondió: “A nosotros de Cambiemos no nos mueve nadie, en estos tiempos donde la discusión interna será fundamental para evitar que entreguen Cambiemos al socialismo”

Fuente: La Capital