La brigada de mujeres que podan los bosques del norte neuquino
En la AFR de Manzano Amargo, 36 mujeres mantienen los bosques artificiales en una dura tarea diaria.
En la AFR de Manzano Amargo, 36 mujeres mantienen los bosques artificiales en una dura tarea diaria.
Este pueblo es uno de los últimos rincones del norte neuquino y en su historia se remarca que creció al ritmo de los bosques implantados de pinos ponderosa y murrayana. Es en este lugar, Manzano Amargo, donde hombres y mujeres en los primeros años de la década del ‘80 dejaron sus mejores esfuerzos en las laderas al pie de la mítica Cordillera del Viento.
Por estos días, alcanzan las 2500 hectáreas de pinares que componen una de las mayores riquezas artificiales del pueblo de Manzano Amargo y Pichi Neuquén.
Los bosques son manejados por una Asociación de Fomento Rural (AFR) que fue creada el 17 de abril de 1984. La misma cuenta hoy con más de 100 socios y es desde el último mes de junio presidida por el ex presidente de la comisión de fomento Rubén “Chicho” Aravena.
Las mujeres hacen historia en la poda de bosques del norte neuquino.
El proyecto involucra a 36 mujeres del lugar, las cuales se dividen en dos grupos (sobre todo para el traslado) y cumplen dos semanas de trabajo cada uno.
“La mayoría de las mujeres ya han trabajado, pero hay otras jóvenes que recién están aprendiendo y se las está capacitando a través de una técnica enviada por Desarrollo Territorial. Allí se les brinda capacitación para una poda correcta y efectiva”, sostuvo Aravena
“La AFR nació con el propósito de ayudar al crecimiento de los productores y a la gente del campo allá por los primeros pasos del pueblo. Más tarde, ya con su personería jurídica, comenzó a desarrollar proyectos forestales con distintas especies de pino en cientos de hectáreas. Una de las últimas que se hizo tiene 11 años aproximadamente y es la que están interviniendo 36 mujeres con trabajos de poda a serrucho”, contó el titular de la AFR.
Aravena, en diálogo con LM Neuquén informó también que la intervención por estos días se realiza en el bosque Los Chorillos.
El mismo está ubicado a unos 25 kilómetros de Manzano Amargo y tiene un total de 83 hectáreas para podar. La propuesta laboral fue originada por la AFR y desde un primer momento cuenta con el respaldo técnico y financiero del gobierno provincial a través de la Secretaría de Desarrollo Territorial.
Aravena en sus palabras quiso rescatar el trabajo de las mujeres. “Es muy importante en estos tiempos para Manzano Amargo, que es una localidad que tiene 800 habitantes, que hoy estén trabajando 36 mujeres. Es importante rescatar ese valor agregado de que este trabajo es duro, no es sencillo”, indicó.
El presidente de la AFR indicó, además que la rutina laboral que cumplen. “Ellas arrancan a las seis de la mañana, tardan una hora en llegar en combi al lugar de trabajo. Arrancan a las siete a trabajar y cumplen cinco horas de trabajo de lunes a viernes. Están divididos en dos grupos de 18 y cumplen dos semanas de trabajo cada uno y van rotando”, explicó.
Contó además que “hay mujeres mayores trabajando, que tienen experiencia y también hay mujeres jóvenes que están haciéndolo por primera vez. Hacen este trabajo de poda con serrucho, tienen también la ayuda de dos motosierristas en caso de trabajos de altura”.
Aravena comentó también que en la localidad hay mucha zona boscosa para intervenir, uno cercano a la comunidad, y que necesitan poda y raleo.
“Los crianceros del lugar piden su intervención ya que al no tener raleo eso se transforma en un lugar propicio para el hábitat del puma que ha hecho mucho daño en estos lugares”, concluyó.
En el mismo sentido explicó que están desarrollando un programa de protección de la enfermedad del sirex que siempre está muy latente entre los pinos. “La idea es intervenir estos bosques, con la ayuda del gobierno provincial, para que el día de mañana tengan un mejor futuro y que hoy generan mano de obra y va generar otros recursos como el aprovechamiento de la madera en nuestro pequeño aserradero o en los de Corfone”. Sin embargo, una de las principales apuestas de Aravena es recuperar el “Operativo Leña” que se hacía años atrás con el material de descarte y que beneficiará a todos los vecinos que aún se calefaccionan a leña.
Es clave el apoyo provincial
El secretario de Desarrollo Territorial, Jorge Lara, en contacto con LM Neuquén, contó que “Los Chorrillos es un bosque implantado, Aravena nos pidió a nosotros de que le financiemos un plan de poda y como en otras oportunidades, ya habíamos empezado a trabajar con mujeres en la poda a serrucho, le dimos la oportunidad de incluir a 36 mujeres en un programa especial de poda y que la formación estuviera a cargo de la técnica de Corfone, Marcela Neira”. Agregó que “Corfone les da el asesoramiento técnico, la asistencia permanente, les enseña cómo se poda, como se afila el serrucho, como hacer todas las actividades de campo. Este bosque es uno de los tantos. Hay muchos que son bosques públicos pero que pertenecen a esa AFR”.
“Los trabajos apuntan a el mejoramiento del bosque a futuro, hay unos sectores donde ya se puede hacer un raleo fuerte, sirven para ser procesados en el moderno aserradero que tiene Corfone en Las Ovejas. En esa zona hay muchísimas hectáreas de pinos y es muy importante lo que hay que hacer. Los pinos hay que podarlos para que cuando crezcan vayan desarrollándose y no tengan nudos, después cuando se hace el raleo (que es ir abriendo las plantas y dejar que entre la luz), se hacen más cilíndricos para cuando vaya al aserradero el pino tenga la mayor utilización de todo su fuste”, agregó el funcionario.
