La caravana de migrantes llega a Ciudad de México
Una vanguardia ya está en la capital, mientras el resto se aproxima. Dos columnas más se encuentran aún en Chiapas, en el sur del país.
Una vanguardia ya está en la capital, mientras el resto se aproxima. Dos columnas más se encuentran aún en Chiapas, en el sur del país.
Un grupo adelantado de la primera caravana de migrantes centroamericanos que recorre México para llegar a Estados Unidos está ya en Ciudad de México, mientras que el resto del contingente avanzaba por Veracruz y Puebla, en el este del país.
Varios cientos de migrantes lograron subirse a camiones y camionetas y llegaron de manera anticipada a la capital. Unos 350, según medios locales, se instalaron en un albergue preparado para recibirlos en el estadio Jesús Martínez «Palillo» de la Ciudad Deportiva Magdalena Mixhuca.
Mientras, el grueso del grupo, entre ellos mujeres y niños, avanzaba desde Isla a la ciudad de Córdoba, que está todavía a unos 290 kilómetros de Ciudad de México, en el estado de Veracruz.
Otros más de mil ya están en Puebla, unos 125 kilómetros al sureste de la capital, esperando al resto o en una escala para seguir hacia Ciudad de México.
Los migrantes de esta primera caravana de las tres que ingresaron a México en los últimos días avanzan a ritmos dispares. La intención de los coordinadores es reunir al mayor número posible en Puebla para entrar juntos a la capital.
La caravana empezó su recorrido con unas miles personas hace tres semanas en San Pedro Sula, Honduras, y fue sumando gente en el camino.
Ahora tiene unos 5.000 integrantes, hondureños, salvadoreños, guatemaltecos y nicaragüenses, entre ellos mujeres y niños, que podrían llegar a la capital a partir del martes, día de las elecciones de medio mandato en Estados Unidos.
Durante la campaña electoral, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que se aproximaba una «invasión» de inmigrantes. Trump utilizó el tema para agitar el debate y ordenó la militarización de la frontera. No obstante, las caravanas están todavía lejos de Estados Unidos y pretenden reunirse en Ciudad de México con autoridades y organizaciones civiles. Algunos podrían terminar su viaje en la capital mexicana.
Desde Ciudad de México hasta la frontera estadounidense son unos 1.000 kilómetros por carretera hasta Reynosa, si deciden ir hacia Texas, una ruta peligrosa por la presencia de grupos delictivos que secuestran y extorsionan a migrantes. Si optan por la ruta larga hacia Tijuana, en Baja California, para llegar por San Diego, como suelen hacer los grupos de migrantes, el camino sería de 2.800 kilómetros desde la capital. Han estado avanzado de 40 a 70 kilómetros por día, algunos montados en vehículos.
En Puebla un albergue ya está lleno y los migrantes se distribuyen en otros dos. La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción fue designada por la caravana como punto principal de reunión.
«La Policía Estatal informa que el albergue de San Juan de los Lagos se encuentra lleno, la iglesia de La Asunción está aproximadamente a un 30 por ciento y se ha habilitado un albergue en el Polideportivo Xonaca», informó la Secretaría de Seguridad Pública.
Gina Garibo, que acompaña la caravana en nombre de la asociación Pueblo sin Fronteras, pidió no dispersarse. «Antes de entrar a Ciudad de México es importante reagruparnos, reforzarnos en Puebla», dijo. «No podemos entrar a Ciudad de México todos desorganizados».
Las otras dos caravanas están todavía en el estado de Chiapas, en el sur de México. En conjunto, los tres grupos están integrados por unas 9.000 personas, la mayoría hondureños, salvadoreños y guatemaltecos, que dicen huir de la pobreza y la inseguridad en sus países. La segunda caravana inició su recorrido en Honduras el 17 de octubre y está compuesta por unas 1.500 personas. Se encuentra en Chiapas, unos 180 kilómetros al norte de la frontera con Guatemala.
La tercera, compuesta por al menos 2.000 salvadoreños que ingresaron el viernes a México, avanzó desde Metapa de Domínguez a Tapachula, a 40 kilómetros de la frontera mexicano-guatemalteca.Unas 2.800 personas han pedido refugio en México en la frontera con Guatemala.
