La deuda de Bariloche, el secreto mejor guardado

La Secretaría de Hacienda no informa el monto de las obligaciones pendientes del gobierno municipal. Los concejales de la oposición reclaman los datos y el sindicato, los aportes.

La Secretaría de Hacienda no informa el monto de las obligaciones pendientes del gobierno municipal. Los concejales de la oposición reclaman los datos y el sindicato, los aportes.

La necesidad recurrente del municipio de apelar al descubierto bancario para pagar los sueldos, los auxilios que ha tramitado y obtenido del gobierno nacional vía ATN y el atraso millonario en el pago a proveedores revelan que las cuentas públicas arrastran un déficit crónico.

Pero la magnitud de ese desequilibrio, así como el monto de la deuda flotante, son información clasificada, de acceso vedado para los concejales y también para la prensa.

Algunos números orientadores señalan que el pasivo no baja de los 250 millones de pesos. Entre los acreedores figura incluso la AFIP, que desde hace tiempo dejó de recibir regularmente las retenciones del impuesto a las Ganancias practicadas por el municipio a sus empleados.

Ante una consulta de este diario, el secretario de Hacienda Diego Quintana dijo a comienzos de febrero que el número de la deuda estaba determinado pero que no lo podía suministrar y encomendó tramitarlo a través del área de Comunicación. La gestión no prosperó.

El secretario general del Soyem, Juan Fuentes, dijo que el último cálculo con el que cuentan es de octubre pasado, cuando “la deuda con proveedores era de 205 millones de pesos”.

El concejal Ramón Chiocconi (FpV) también aportó, como dato extraoficial, que el municipio adeuda 25 millones de pesos a la AFIP por el impuestos a las Ganancias que se descuentan en las liquidaciones de sueldos. A esa suma habría que agregar intereses.

Según el concejal, los impagos acumulados por el municipio impacta también en el pequeño y mediano comercio, “ya que muchos le venden al Estado, pero no cobran desde hace meses”.

Una fuente que conoce los manejos en Hacienda aseguró que “en el último tiempo sólo pagan en término el combustible, para mantener en la calle los camiones. Al resto les prometen pago para marzo, con lo que recauden del pago anual anticipado de tasas”.

Fuentes dijo que una de las deudas más abultadas que tiene el municipio es con el Soyem, por aportes no transferidos. Señaló que la gestión anterior acumuló incumplimientos por 30 millones de pesos “y la gestión actual lleva otros 12 millones”.

Según el dirigente gremial, “la municipalidad está paralizada. Hacen las cosas mínimas: la recolección de basura, lo que se ve. Pero no hay papel, no hay tóner, no hay ropa de trabajo para nadie”.

Un indicador claro de la situación es el descubierto bancario, que Gennuso comenzó a utilizar otra vez en julio, luego de varios meses en los que había prescindido de esa herramienta. Mes a mes las cifras no paran de crecer. En noviembre el municipio estuvo “en rojo” con el banco un total de 19 días, con un pico de 14,5 millones de pesos. En diciembre fueron 26 días, con 27,9 millones de máximo. Y en enero el déficit obligó a mantener el descubierto durante 10 días, con un pico de 48,6 millones de pesos.

Además, Gennuso pidió y obtuvo en el último año 37 millones de pesos de Aportes del Tesoro Nacional.

El concejal Daniel Natapof (FpV) recordó que a fines de noviembre, durante el debate del presupuesto, le pidió a Quintana y al jefe de Gabinete Marcos Barberis el dato preciso sobre déficit, deuda total y deuda con proveedores. “Prometieron traerlo en una semana, pero hasta el día de hoy no lo aportaron –aseguró el concejal–. Es evidente que hay un ocultamiento deliberado de las cifras”.

Aporte y descubierto
37 millones
de pesos de aportes del Tesoro nacional ATN ingresaron al Tesoro municipal en los últimos tiempos.
48 millones
fue el monto máximo del descubierto bancario con el que se financió el gobierno municipal en enero.
“La Municipalidad está paralizada. Hacen las cosas mínimas: la recolección de basura… sólo lo que se ve”.
El secretario general del sindicato municipal, Juan Fuente.

Fuente: Río Negro