La integración con Paraguay, clave para el desarrollo salteño
Una comitiva paraguaya se reunió con autoridades tartagalenses.
La cercanía geográfica con el departamento paraguayo de Boquerón, las buenas condiciones en que se encuentra la ruta de 385 kilómetros que une la ciudad de Filadelfia con Pozo Hondo -en el límite con Argentina- y la posibilidad de que el norte de Salta pueda contar con la ruta pavimentada que unirá los departamentos San Martín y Rivadavia abren nuevas posibilidades de generar una alternativa de integración de la subregión que conforman los chacos argentino, boliviano y paraguayo.
Edwin Pauls, gobernador del departamento Paraguayo de Boquerón, Cornelius Sawatzky, diputado nacional por Paraguay oriundo de Loma Plata, la otra comunidad menonita vecina a Filadelfia; y un grupo de empresarios paraguayos del mismo departamento llegaron el fin de semana pasado a Tartagal con el objeto de mantener reuniones con productores agrícolaganaderos, funcionarios departamentales, empresas de transportes y empresarios de diferentes rubros del norte provincial.
La intención de la comitiva paraguaya es insistir en sus propuestas de integración con el norte de Salta para que el intercambio comercial comience a dar sus primeros pasos.
La comitiva integrada por 25 personas entre funcionarios y ganaderos fue recibida en Tartagal por el intendente Sergio Leavy y por Gustavo Rauch Coll, principal impulsor desde hace más de dos décadas de la integración subregional entre el chaco salteño y paraguayo.
«La comitiva demoró cuatro horas en hacer el trayecto Filadelfia-Pozo Hondo por la buena condición en que se encuentra la ruta paraguaya y es por eso que creemos que cuando finalice la pavimentación de la provincial 54, que une Santa Victoria con Tartagal, podremos comenzar a mirar más la posibilidad de integrarnos comercialmente con una región que tiene las mismas características del Chaco salteño, pero que produce el 60 % de los lácteos que se consumen en el Paraguay. Dicha región cuenta con cuatro frigoríficos que exportan a diferentes partes del mundo, pero que a la vez necesita comprar las verduras y hortalizas frescas que los departamentos de Orán y San Martín pueden venderles», explicó el intendente Leavy.
Anualmente Boquerón necesita 10.000 toneladas de maíz para las cooperativas locales. Para los productores del norte es una alternativa viable y les permitirá superar esa visión de que la única opción para sacar sus producciones son los puertos de Rosario o Buenos Aires. «La integración comercial puede ser una realidad», consideró Leavy.
Comunidades menonitas
La localidad paraguaya de Boquerón, que limita con el Chaco salteño, es un ejemplo de desarrollo y visión. Comunidades menonitas se radicaron allí hace unos 85 años y han hecho de ese inhóspito lugar un polo de desarrollo sin precedentes en la región más árida del vecino país y con condiciones extremas.
