La producción de pan se redujo un 40% en Jujuy

Luego del segundo aumento del año de un 20% en el precio, bajaron las ventas del producto, ocasionando perjuicios.

Luego del segundo aumento del año de un 20% en el precio, bajaron las ventas del producto, ocasionando perjuicios.

El aumento de las tarifas del servicio eléctrico y de gas, además de los insumos, encarece la producción de pan, entre otros. Si a esto se le suma una ostensible baja en la demanda, hacen un «combo» con consecuencias que pueden ser nefastas para el sector panadero.

Desde allí expresaron su malestar ante la situación critica que atraviesan, con una baja del 40% en la producción de pan.

La bolsa de harina, materia prima para la elaboración del pan, hoy cuesta 650 pesos, mientras que en diciembre/enero el costo era de 300 pesos, menos de la mitad.

A fines de abril se produjo el segundo aumento del año en el pan, de un 20%, y eso llevó a una baja en las ventas del 40%, según algunos consultados.

La boleta de gas, promedio, de panaderías ahora es de 14 mil pesos o más según el consumo, cuando en diciembre rondaba 7 mil pesos.

Mientras que las facturas de energía eléctrica en diciembre eran de 16 mil pesos promedio, pero ahora se elevan a 24 mil pesos.

Carlos López, referente del sector, destacó que las tarifas treparon por lo menos un 40%. «Eso solo en luz y gas, en los que es grilla salarial 15%, grasa y otros aditivos 10 a 15%, depende el producto que se compra».

La producción bajó un 40%, ya que el referente del sector destacó que de 20 bolsas de harina que utilizaba ahora son 13.

Julián Oller, otro referente del sector, afirmo que se redujo la producción. «Los dos aumentos de precios que tuvimos representó una merma en la demanda y producción», dijo. «Hay trabajadores que están con tiempo libre por la baja en la producción, se reducen horarios. Es toda una cadena: aumentan las tarifas, los insumos semanalmente, a la gente no le alcanza… Baja la venta y uno trata de acomodar los precios, pero acá baja la venta y suben losprecios».

Fuente: El Tribuno