Las comunas mendocinas pretenden solucionar el caos vehicular, pero cada una por su lado

Cambios de sentidos en algunas calles, obras complementarias y desaliento del uso del auto, algunas propuestas.

Cambios de sentidos en algunas calles, obras complementarias y desaliento del uso del auto, algunas propuestas.

Circular por el Gran Mendoza es difícil. Hacerlo por la zona de la Costanera, en horas pico, es prácticamente una misión imposible. Sin embargo, no es solo ese sector del área metropolitana el complicado, ya que dentro de cada departamento hay lugares específicos donde la congestión vehicular es un problema. Sin un proyecto único por parte de Unicipio, cada comuna está tomando medidas individuales para tratar de paliar la situación.

El microcentro en Ciudad o el Corredor del Oeste en Godoy Cruz a primera hora de la mañana, San José en Guaymallén o Carrodilla en Luján de Cuyo en cualquier momento del día, son algunos de los ejemplos más claros de lo complejo que es manejar en Mendoza. Si bien es cierto que se están realizando muchas obras viales en simultáneo, también hay zonas donde el problema, únicamente, tiene que ver con la gran cantidad de vehículos que circulan por allí.

Pero, a pesar de que el problema afecta a todas las comunas, no hay actualmente un proyecto unificado que busque solucionar la problemática.

«En cuanto al tránsito de vehículos por el momento no estamos trabajando porque no damos mucho abasto. Estamos abocadas en este momento a los pliegos de licitación del máster plan de ciclovías y arbolado, que es un trabajo hermoso pero muy específico y que lleva muchos meses», explicó Graciela Marty, coordinadora del Unicipio, el área gubernamental que reúne a todas las comunas del Gran Mendoza.

Por ese motivo, cada municipio está atacando el problema de manera individual. Por ejemplo en Capital, informan en tiempo real las obras que están realizando para evitar que los automovilistas circulen por esos lugares, y con el uso de cámaras de video están empezando a multar a quienes estacionan en doble fila.

En Las Heras, que el inconveniente principal lo tienen en las calles San Miguel y Doctor Moreno, aguardan por la obra que se está realizando en calle Perú de Ciudad, para de esa manera poder dejar a las dos arterias de un solo sentido generando un ingreso y egreso más fluido del departamento.

En Godoy Cruz, el Corredor es el más complicado, ya que por allí circulan más de 150 mil vehículos por día. Para alivianar la zona están construyendo una nueva autopista hacia el Oeste, que irá desde la rotonda detrás del barrio Palmares hasta el final del bulevar San Vicente. En la zona más céntrica, la calle Sarmiento es la más compleja, por lo que están preparando un proyecto para modificar el sentido de circulación y hacerla de una sola mano desde San Martín hasta Figueroa Alcorta.

Una medida similar a la de Las Heras tomaron hace un tiempo en Luján, para la calle Italia de Chacras de Coria, que dejaron de un solo sentido, solucionando en parte el problema de esa zona. Lo mismo hicieron en algunas calles céntricas como España, a la que le dieron mejor conexión con el Acceso Sur.

Sin embargo, por las obras que se están realizando, donde están complicados ahora es en Carrodilla y La Puntilla, ya que por ahí pasará la nueva ruta que conectará la calle Juan José Paso con Panamericana.

En Guaymallén la zona más complicada es la de San José, donde se están realizando trabajos en distintas arterias y se suma a la congestión de la Costanera por su obra particular. Por el momento, la medida adoptada tiene que ver con convertir calles de un solo sentido en doble mano mientras duren las obras, para que haya mejores vías de circulación.

En lo que todos los municipios coinciden es en que la situación es compleja, por lo que seguirán intentando desalentar el uso del vehículo particular con ciclovías propias y en conjunto, pero también con las modificaciones generales en el servicio de transporte público.

Fuente: Uno Mendoza