Las cooperadoras escolares santafesinas ante el reto de seguir brindando una copa de leche con $90 y un plato de comida con $170
Las entidades le piden al Ministerio de Educación volver a tener el control de los recursos destinados a brindar esos servicios. Además, señalan que el gobierno todavía adeuda las partidas de julio.
18/08/2023 MUNICIPIOSLas entidades le piden al Ministerio de Educación volver a tener el control de los recursos destinados a brindar esos servicios. Además, señalan que el gobierno todavía adeuda las partidas de julio.
La economía sigue golpeando los bolsillos de los santafesinos. La devaluación impacta de lleno en los precios de los alimentos y profundiza los problemas. En este contexto de extrema dificultad, las cooperadoras escolares agudizan el ingenio para seguir garantizándoles a los chicos un vaso de leche y un plato de comida.
María Alejandra Pérez, secretaría de Prensa de la Federación de Cooperadoras Escolares del departamento La Capital, señaló que el gobierno provincial otorga «$89.90 por copa de leche y $169,90 por comedor».
«En este momento se deben los recursos de comedor y copa de leche de julio, ya estamos en agosto» resaltó, postuló que «que el dinero debería estar depositado en los primeros cinco días hábiles del mes».
Reveló cuánto saldría entregarles a los niños un menú nutritivo: «Si nosotros miramos las tablas que propone el Ministerio, el comedor costaría entre $450 y $650; y la copa de leche debería valer entre $130 a $200». Cabe aclarar que son valores que no contemplan el impacto de la última devaluación y que se verá reflajada en lo que resta de agosto.
Pérez contó que el objetivo es no dejar de brindar el servicio. «Algo hay que darles, somos todos conscientes de que quizás sea la única comida diaria de ese niño, niña y adolescente», subrayó.
En otro orden, describió las dificultades que encuentran al no contar más con el dinero destinado a tal fin. «En pandemia se dejó de transferir el dinero a las cooperadoras. Hemos solicitado varias veces, cuando volvimos a las escuelas, pero no se nos ha devuelto el control del dinero. Impide que nosotros podamos controlar o hacer nuestro trabajo de estirar el dinero lo más posible. En un contexto inflacionario significaría que cuando accedemos al dinero poder realizar compras necesarias para la posteridad», explicó en declaraciones al programa «De10» que se emite por «LT10».
También contó que «como el dinero sale de la cuenta del «directivo», una cuenta común y corriente, a los proveedores les descuentan el 10% por transferencia, cosa que no ocurriría si las cooperadoras manejara los fondos desde la cuenta de cooperadora, que es una cuenta especial en pesos».
Describió que los directores, para evitar dichos descuentos en proveedores, retiran el dinero de la cuenta para poder pagarles en efectivo: «Es una tarea más que tiene el directivo. Nosotros le agradecemos, porque hacen un montón por las escuelas, sostienen un proyecto educativo. Pero los directores y vicedirectores de cada escuela están para otra cosa, están para ocuparse de la cuestión educativa».
Recordó que «la escuela que no tiene cooperadora no puede tener comedor y copa de leche, tiene que tener cooperadora; lo dice el decreto». E asistió: «Estamos en condiciones que toda la estructura funcione y asumir las responsabilidades desde las cooperadoras». Aclaró que estos planteos fueron presentados en «reiteradas oportunidades» y que «todavía no han obtenido respuesta».