Las Heras pasó a planta permanente a más de 800 empleados

El intendente homologó con un decreto el acuerdo paritario con un gremio municipal. Sus allegados argumentaron que había personal contratado hacía 10 años y había que regularizarlos.

El intendente homologó con un decreto el acuerdo paritario con un gremio municipal. Sus allegados argumentaron que había personal contratado hacía 10 años y había que regularizarlos. Aparecen nombres vinculados a funcionarios radicales de la actual gestión.

A través de un decreto firmado el 21 de junio, el intendente de Las Heras Daniel Orozco dispuso la incorporación de más de 800 empleados a la planta permanente de la municipalidad. Este pase masivo de personal se conoce después de las PASO y se reglamenta como parte de un acuerdo paritario con el sindicato de empleados de esa comuna. Entre los que logran el beneficio, hay familiares vinculados a funcionarios políticos, militantes radicales, figuras del deporte e incluso una ex reina nacional de la Vendimia.

En rigor, se trata del decreto 1.134 que sirvió para homologar el acta paritaria no salarial acordada con el Sindicato Unido de Trabajadores Municipales concretada el pasado 9 de abril, es decir, dos meses antes de las elecciones primarias, el primer paso de Orozco para lograr su reelección.

Este decreto se firmó casi sobre el plazo que impone la ley de Responsabilidad Fiscal de la provincia: el 30 de junio -a sólo 9 días de expirar ese tiempo-. Dicha norma establece límites a la incorporación de personal en años electorales al prohibir hacerlo en los últimos 6 meses finales a un mandato.

De acuerdo con la documentación obtenida por El Sol, el 21 de junio se reunieron funcionarios de la municipalidad con el Sutram para conformar una comisión de selección de personal. Desde la intendencia explicaron que ya se venía trabajando en el último año en este tema y en abril se realizó la convocatoria para que los empleados contratados presentaran la documentación correspondiente.

El Sutram -conducido por Sergio Ruel- es el gremio que parita frente el Ejecutivo municipal ante la intervención del otro sindicato, el Soem, luego de que en las últimas elecciones se robaron una urna. Para la oposición, el Sutram es afín a la gestión radical y también ganó con la medida, ya que supone el crecimiento de las afiliaciones. Por su parte, Orozco evitó protestas gremiales frente al edificio municipal en un año electoral como ocurrió en enero de 2016, cuando dejó cesantes a más de 600 agentes contratados.

Esa comisión tenía que realizar “un análisis pormenorizado de cada solicitud”. De esta manera, se elaboró un listado que se aprobó por unanimidad. Esa nómina, a la que tuvo acceso El Sol, se guarda con recelo en la intendencia y la oposición no ha podido acceder a la misma.

Según las planillas anexadas, los agentes municipales realizan labores administrativas, deportivas, técnicas, de mantenimiento y sociales.

Entre los requisitos, los contratados debían contar con los dos años de antigüedad. Es decir, al menos debían estar contratados desde 2016.

Los funcionarios justificaron la medida

Ante la consulta de El Sol, Orozco no dio respuesta y el encargado de justificar el movimiento masivo fue su mano derecha, el secretario de la intendencia Fabián Tello, quien calificó la medida de “histórica, lo más amplia y transparente posible”.

En 2015, Orozco llegó a una municipalidad que tenía en planta de personal a unos 2.700 empleados. Actualmente, la misma es de 2.900.

Tello argumentó que, al asumir la gestión en 2015, se encontraron con un problema de larga data en el escalafón municipal que las anteriores gestiones justicialistas no habían resuelto. Concretamente, que personal contratado desde hacía 10 años estaba subrogando en una clase alta más alta que la suya, un problema que es común en las comunas mendocinas. En ese punto, Tello graficó que “la pirámide estaba al revés” y que el criterio de Orozco fue regularizar todas estas situaciones.

Con todo, la medida contrasta con los esfuerzos de reducción de personal que el Gobierno provincial ha encarado y que el propio Alfredo Cornejo ha tomado como un logro de su gestión. Por ello, la decisión de Orozco causó sorpresa y molestia en Casa de Gobierno.

Para contrastar, en Maipú pasaron a planta este año a unos 40 empleados, en Luján de Cuyo otros 50 a planta efectiva en marzo, en tanto que Capital aseguraron que durante la actual gestión incorporaron a 50 agentes por concurso -de las cuales, 22 todavía no se suman a la planta permanente- y en Godoy Cruz aseguraron que el ingreso más alto se dio hace unos años con 18 empleados.

En todos los casos consultados, llamativamente los funcionarios de los otros departamentos y del Ejecutivo respondieron del mismo modo ante el dato de los más de 800 pases a planta: «Uffff».

E indicaron que la tendencia es a disminuir el número de la planta y a incorporar los concursos, algo que ha instrumentado el Ejecutivo provincial.

Por su parte, la oposición en el Concejo Deliberante cuestiona que el oficialismo se ha manejado con absoluta reserva y discreción. Tanto desde el P J como desde el FIT quieren poner la lupa en los casos dudosos de funcionarios que no tendrían por qué pasar a planta.

«En principio, se hablaba de 240 empleados que pasarían», señaló el justicialista Martín Gómez. «Pero en el medio, el Ejecutivo aprovechó y metió un montón», agregó el edil.

Ulises Jiménez -FIT- indicó que si bien está de acuerdo con los pases a planta, quiere contar con la nómina para controlar posibles situaciones fuera de la legalidad.

Con la convocatoria pública realizada desde abril, los empleados tuvieron que tomar una decisión, según explicaron los funcionarios municipales. Si seguían bajo contrato subrogando una clase más alta con un mejor sueldo o si bajaban a la categoría inicial pero lograban estabilidad, aunque representaba perder parte de sus haberes. Hubo algunos que no aceptaron. Para tener en cuenta, la clase inicial (3 o A) tiene un salario aproximado de 10 mil pesos y en la misma se ubican empleados de las áreas de servicios públicos, de ordenanza y también administrativos que recién ingresan. En el caso de los profesionales, se les respeta la clase 8.

En principio, esta rebaja de categorías implica un ahorro presupuestario para la comuna. Sin embargo, la oposición también sospecha que esta situación apenas durará un mes y que con los primeros días de agosto comenzará la tarea de reasignación de clases que será absolutamente arbitraria: a aquellos afines a la gestión que volvieron a clase 3 se les otorgaría una subrogancia en clase 12 con algún adicional para mejorar el sueldo. Ese sería el botín político, entonces, de este movimiento masivo.

Los nombres llamativos

Entre los beneficiados por el pase a planta, hay nombres vinculados a la gestión política de Orozco.

El mismo Tello tuvo que defender la incorporación de un familiar, Renzo Muñoz, sobrino de su cuñada, María Rosa Muñoz, y que también es empleada municipal en planta desde hace años. En el caso de Renzo, Tello justificó su incorporación ya que cumplía con los requisitos de antigüedad -ingresó en 2015, es decir, con la actual gestión-.

No son los únicos familiares que tiene el secretario de la intendencia. La hermana de Tello, Elina, está a cargo de la Dirección de Educación de Las Heras y otros sobrinos, Pamela y Lucas Muñoz, también cumplen funciones con anterioridad.

El radicalismo también sumó militantes. Romina Ibañez, a cargo de la Unidad Ejecutora de Políticas Recaudatorias de la Secretaría de Hacienda, logró incorporar a su madre, Nancy Elizabeth Moyano, a secretario privado Federico Carrascosa, y a otros allegados, entre ellos, a Elizabeth Ruscelli -ordenanza- y a Diego Ozán -prestador socio comunitario-.

No es la primera vez que Las Heras tiene cuestionamientos por las designaciones en la gestión radical. Sin embargo, para Tello “si cumple, si es buen trabajador, si tiene los requisitos, cómo le digo que no puede trabajar. El problema es si no cumple. Hay gente valiosa que trabaja muy bien”.

El funcionario radical se animó a señalar que “el 70% no coincide con nuestras ideas porque vienen de la gestión anterior, ha sido muy transparente, ha sido trabajado con el sindicato, los anteriores gobiernos no han querido regularizar y se produce esto”.

En la nómina también aparecen aliados políticos. Entre ellos, la ex concejal Karina Ferraris, que hasta hace un tiempo formaba parte de Libres del Sur. Si bien está incluida en dicha lista, desde intendencia aseguraron que no pasó a planta. Contactada por El Sol, Ferraris aseguró no saber de su supuesto pase. Idéntica situación ocurrió con la directora de Género, Natalia Ochoa, que aparece en la nómina pero aseguran que no estará en planta.

En la lista de 17 hojas, también aparecen figuras vinculadas al deporte. Entre ellos, el ex boxeador Pablo Chacón -un nombre popular en la organización de festivales de box, trabaja desde el 2004 en el municipio- y los ex futbolistas Pedro José Fóppoli -también trabaja desde hace años realizando actividades sociales y deportivas en el área de discapacidad- y Carlos Azcurra -recordado por haber sido baleado por un policía cuando jugaba en San Martín, en las recientes elecciones apareció como candidato suplente para el Concejo en la lista de Orozco-.

Y una ex reina de la Vendimia por ese departamento: Wanda Kaliciñski, que llegó al cetro nacional y que después fue incorporada por anteriores gestiones para trabajar en la comuna, por lo que cuenta con la antigüedad requerida. Actualmente, se desempeña en el área de Legales, ya que es abogada. Otra es reina que aparece en la nómina es Sol Mengali, que compitió por la corona vendimial en 2017.

Fuente: El Sol