Las posibles alianzas centraron el cierre de campaña en España

1219_em3401--ap.jpg_88717827
Los comicios son los más abiertos en casi cuarenta años de democracia. Rajoy descartó una gran coalición con los socialistas. El Partido Popular mantiene el liderazgo en las encuestas de opinión.

Ante los comicios generales de mañana en España, los más abiertos en casi 40 años de democracia, las posibles alianzas postelectorales centraron ayer el último día de campaña. Una nueva era comenzó ya en el país: por primera vez son cuatro y no dos los partidos con capacidad de llegar al gobierno. Al inicio de la campaña había hasta un 40 por ciento de indecisos y las dos fuerzas tradicionales, el Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy y el Partido Socialista (PSOE) de Pedro Sánchez, han luchado durante 15 días cuerpo a cuerpo con las dos emergentes, Ciudadanos y Podemos, por hacerse con los votos. Los españoles tienen hoy una jornada de reflexión por delante para perfilar el sufragio.

El combate ha sido cruzado: de los viejos partidos que se alternaron en el poder desde los años 80 (PP y PSOE) con los nuevos que llegan aupados por los jóvenes y la indignación (Ciudadanos y Podemos); de los partidos de la derecha (PP y Ciudadanos) con los de la izquierda (PSOE y Podemos); de los tradicionales entre sí y de los nuevos uno contra otro. Sin posibilidad de mayorías absolutas, ninguno podrá gobernar por sí mismo. Todo está abierto el domingo y solo hay una certeza: el próximo gobierno de España tendrá que nacer fruto del pacto.

Las opciones son varias. Puede ser un gobierno de coalición con dos o más partidos, puede ser un gobierno en minoría apoyado por pactos puntuales en el Parlamento o puede ser un gobierno en minoría al que la abstención de otros facilite el gobierno. El PP «intentará ganar las elecciones y luego conformar un gobierno estable», dijo ayer Mariano Rajoy, que tras cuatro años en La Moncloa apuesta su reelección a la recuperación económica que hay en marcha en España tras la peor crisis de su historia. Su partido mantiene el liderazgo en las encuestas que maneja, pero el temor a que una coalición de izquierdas con PSOE, Podemos y pequeños partidos nacionalistas de izquierda arrebate a Rajoy el Ejecutivo ha crecido al final de la campaña. De ahí el globo de ensayo que lanzaron el jueves fuentes de su partido sobre una posible gran coalición a la alemana con los socialistas, siempre y cuando su actual líder, Pedro Sánchez, quede fuera.

Rajoy jugó ayer al desmentido que no desmiente. «Un pacto con el PSOE cambiando a su secretario general no está encima de la mesa», dijo. «Yo no lo he propuesto y soy el presidente del partido. Nadie ha propuesto en el PP esa coalición y esa noticia la doy por no leída», señaló a los micrófonos de la radio pública española.

Rechazo expreso no hubo. De pactos no se hablará hasta el lunes. Ya lo había dicho el jueves en Barcelona: «Con absoluta franqueza, mi intención es empezar a hablar de ese asunto el día 21». A las elucubraciones del PP respondió directamente Pedro Sánchez: «Lo que queremos es echarle el 20 de diciembre. Vamos a ganar las elecciones los socialistas», aseguró. Expertos en demoscopia apuntaron ayer una remontada de Podemos, el partido heredero de los indignados, en la recta final y una caída de Ciudadanos, que se mueve en el mismo lado del espectro ideológico que el PP y que había arrancado con fuerza la campaña. «La remontada se produjo», dijo ayer el líder de Podemos, Pablo Iglesias. «Si ya lo reconoce hasta el propio Rajoy es obvio que la posibilidad está muy cerca».

El partido ha sufrido fuertes oscilaciones el último año. Subió como la espuma en sus inicios, hasta colocarse en enero en las encuestas como segunda fuerza tras el PP. Luego empezó a caer y acabó iniciando la campaña electoral en cuarta posición. Ahora no se descarta que acabe superando al PSOE y se coloque segundo. Rajoy ha agitado de hecho en el final de la campaña el temor a un pacto entre socialistas y Podemos.

Ciudadanos, entre tanto, dejó abierta la puerta a permitir un gobierno de Rajoy o de Sánchez, tras una campaña asegurando que no apoyaría a ninguno. «Si ganamos el 20D pido que PP y PSOE se abstengan y nos dejen gobernar. Si gana uno de ellos, nosotros lo haremos y estaremos en la oposición», manifestó su líder, Albert Rivera. En el cierre de campaña, el enemigo al que atizó fue el otro partido emergente. Si se trata de votar a un gobierno con Podemos en el Parlamento, no habrá abstención, sino voto en contra, aseguró.

Los consulados estarán abiertos

El gobierno de España decidió la apertura hoy y mañana de sus representaciones consulares para que los ciudadanos españoles que residen en el extranjero puedan emitir su voto en las elecciones generales del 20 de diciembre también esos dos días. La Junta Electoral Central de Madrid tomó esa decisión después de que se produjeran inconvenientes en los envíos de sobres para sufragar, debidos en su mayor parte al retraso en la entrega de los servicios de correos de los países extranjeros. El plazo inicialmente para que los españoles emitieran el voto desde el exterior se cumplía ayer.

Fuente: La capital, Rosario