Milei amenazó con abandonar el Mercosur y Lula prometió proteger al bloque
Fue durante el traspaso de la presidencia pro tempore de Argentina a Brasil. "Emprenderemos el camino de la libertad, y lo haremos acompañados o solos", dijo el mandatario libertario.
03/07/2025 Sin categoríaFue durante el traspaso de la presidencia pro tempore de Argentina a Brasil. «Emprenderemos el camino de la libertad, y lo haremos acompañados o solos», dijo el mandatario libertario.
Después de una foto protocolar tensa, Javier Milei le entregó la presidencia pro tempore del Mercosur a su par de Brasil, Luis Inácio «Lula» da Silva. Durante su discurso, el argentino dijo en tono amenazante que el bloque deberá hacer las cosas como su gobierno quiere, o se irá. «Esperamos que la próxima presidencia acompañe las medidas que hemos tomado en este semestre (…) Pero si esto no fuera posible, y los socios del bloque prefirieran persistir en un camino que no nos ha resultado, entonces tendremos que insistir en flexibilizar las condiciones de sociedad que nos unen. Emprenderemos el camino de la libertad, y lo haremos acompañados o solos», disparó. Con otro tono, a su turno Lula marcó los ejes que impulsará durante su gestión, entre los que enumeró: la lucha contra el cambio climático y el fomento a la transición energética; el desarrollo tecnológico para que esas herramientas «no se concentren en manos de un pequeño número de personas y empresas», y la promoción de derechos ciudadanos, con cumbres sociales y sindicales. La mayoría de los temas que Milei desprecia y contra los que despotrica.
Tras la cumbre, no hubo bilateral entre ambos mandatarios y Lula fue a visitar a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El mandatario argentino solo tuvo una reunión bilateral con el presidente de Uruguay, Yamandú Orsi, que desde el país vecino calificaron como «positiva», pero no dieron detalles del temario; y con el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, que es uno de los estados asociados del bloque.
Milei, tal como hizo el año pasado cuando asumió la presidencia pro tempore en Montevideo, volvió a utilizar su intervención para cuestionar al bloque regional. En otras ocasiones, el presidente Argentino admitió ser el «topo dentro del Estado», porque venía a «destruirlo desde adentro», y la misma tarea se propuso hacia el interior del Mercosur. «El MERCOSUR incumplió su objetivo original, cercenó libertades económicas y privó de oportunidades a los privados de la región. De mercado y de común, le quedó cada vez menos», disparó. Luego lo llamó «cortina de hierro», y propuso «ir hacia un esquema comercial y regulatorio mucho más libre».
Repasó que, durante estos meses en los que nuestro país estuvo al frente del bloque, su gobierno intentó «traducir» su visión «en medidas tangibles y realizables» como, por ejemplo, «ampliar la lista de excepciones al arancel externo común». También se adjudicó el cierre del acuerdo entre el MERCOSUR y la Asociación Europea de Libre Comercio, y dijo que avanzaron con las negociaciones para celebrar un acuerdo comercial con los Emiratos Árabes Unidos, profundizar el acuerdo preferencial de comercio con la India y de profundizar el Tratado de Libre Comercio entre el MERCOSUR e Israel.
Sentado al lado de su hermana Karina, del vocero presidencial Manuel Adorni, y de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, el Presidente expresó que en materia de seguridad, «enfrentamos el enorme desafío de extirpar de la región el cáncer del crimen organizado», y propuso la creación de una» Agencia del MERCOSUR contra el delito organizado transnacional». También estuvo sentado en la mesa el ministro de Economía Luis «Toto» Caputo.
Antes de finalizar su discurso, Milei dejó plantada una amenaza: «Debemos dejar de pensar al MERCOSUR como un escudo que nos proteja del mundo y comenzar a pensarlo como una lanza que nos permita penetrar de forma efectiva en los mercados globales, mercados de los cuales hasta ahora las barreras aduaneras nos han excluido», indicó. Y volvió a insistir con la libertad de mercado. «Queremos que se considere nuestra presidencia pro tempore como un ejercicio sincero de que el MERCOSUR adopte, como bloque, las reformas pro libertad comercial que necesita. Y por eso esperamos, con la misma sinceridad, que la próxima presidencia acompañe las medidas que hemos tomado en este semestre. Sino emprenderemos el camino de la libertad y lo haremos acompañados o solos», dijo.
Con atención lo escuchaban los presidentes de Paraguay, Santiago Peña; de Bolivia, Luis Arce y de Uruguay, Yamandú Orsi. Da Silva tomó la palabra después de Milei y, con tono calmo, puntualizó: «Cuando el mundo se siente inestable y amenazante, es natural buscar refugio donde nos sintamos seguros. Para Brasil, el MERCOSUR es ese lugar».
Después de los ataques del argentino, el Presidente de Brasil defendió el bloque: «A lo largo de más de tres décadas hemos construido una casa con cimientos sólidos, capaz de soportar la fuerza de los problemas externos. Toda Sudamérica se ha convertido en una zona de libre comercio, basada en reglas claras y equilibradas», dijo y aseguró: «Estar en el MERCOSUR nos protege». Explicó, además, que la región se enfrenta «al reto de proteger nuestro espacio de autonomía en un contexto cada vez más polarizado».
En ese punto, Lula desarrolló los cinco ejes que llevará adelante durante su gestión: el primero de ellos será «el fortalecimiento del comercio entre nosotros y con los socios externos». Añadió que «la prosperidad no se construye sólo con grandes empresas», y que «es necesario reactivar el Foro Empresarial del MERCOSUR y ofrecer mayor apoyo a las pequeñas y medianas empresas». Propuso reducir costos y riesgos cambiarios al utilizar las monedas propias y subrayó: «Necesitamos un sistema de pago en moneda local moderno y revitalizado que facilite las transacciones digitales». También destacó que es importante que el MERCOSUR mire hacia Asia, al que denominó como «el centro dinámico de la economía mundial». Y prometió avanzar en las negociaciones con los BRICS, un bloque al que la Argentina no quiso ingresar.
En segundo lugar, Lula mencionó a «la lucha contra el cambio climático y al fomento de la transición energética». Un tema en el que el presidente argentino «no cree», porque lo considera parte de la agenda «Woke», contra la que despotrica cada vez que tiene oportunidad. «La realidad avanza más rápido que el Acuerdo de París, dejando al descubierto la falacia de la negación climática», disparó el mandatario de Brasil como un mensaje teledirigido a Milei.
En tercer lugar, el mandatario brasileño habló del desarrollo tecnológico. «Las nuevas tecnologías se concentran en manos de un pequeño número de personas y empresas, con sede en un número aún menor de países», opinó y contó que recientemente Brasil y Chile formalizaron una asociación para crear modelos de Inteligencia Artificial que reflejen las realidades culturales y lingüísticas de América Latina. «Iniciativas como ésta pueden expandirse al MERCOSUR y a toda América del Sur», propuso.
También anunció que iba a trabajar en la lucha contra el crimen organizado. Ese fue uno de los únicos ejes en los que hubo cierto acuerdo con Milei. Después de los discursos, Lula añadió que iba a estudiar «la posibilidad de crear una agencia contra el delito organizado transnacional como propuso la Argentina».
La quinta y última propuesta de Lula estuvo vinculada a «promover los derechos de nuestros ciudadanos», y adelantó que se reanudará la Cumbre Social del MERCOSUR y realizarán una cumbre sindical. «La fuerza de nuestras democracias depende del diálogo y del respeto a la pluralidad», reflexionó. Para cerrar, recordó al expresidente de Uruguay, Pepe Mujica, y al Papa Francisco. «Estoy orgulloso de venir del mismo cuadrante de la Tierra que estos dos seres humanos excepcionales», opinó y prometió que la presidencia brasileña del MERCOSUR «honrará su legado, trabajando por una integración solidaria y sostenible».