El municipio de Mar del Plata volverá a contraer una deuda millonaria para pagar los sueldos
El gobierno de Arroyo apelará una vez más a un giro al descubierto para pagar los sueldos. El Tribunal de Cuentas advirtió sobre el impacto de los intereses y el uso en exceso de esa herramienta
El gobierno de Arroyo apelará una vez más a un giro al descubierto para pagar los sueldos. El Tribunal de Cuentas advirtió sobre el impacto de los intereses y el uso en exceso de esa herramienta, que en más de una ocasión, no contó con ordenanzas o decretos de respaldo.
Tal como viene ocurriendo al comienzo de cada meses, durante esta semana la gestión del intendente Carlos Arroyo deberá contraer una millonaria deuda bancaria para poder pagar los sueldos de más de 8 mil empleados municipales.
El plazo legal para que la comuna realice el depósito de los fondos concluirá este viernes, una vez que transcurran los 5 primeros días hábiles de octubre.
A apenas una semana de haber asumido, el flamante secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle, ya constató que el dinero disponible en caja está lejos de cubrir el costo de la masa salarial de la administración central y de los entes.
Por eso, además de echar mano a todos los recursos existentes en diferentes cuentas, el funcionario se verá obligado a utilizar el descubierto bancario tal como lo hicieron quienes lo antecedieron en el cargo.
De este modo la comuna volverá a solicitar el auxilio del Banco Provincia requiriendo un millonario préstamo transitorio por el cual deberá pagar elevadas tasas de interés.
Según algunas estimaciones el pago de los sueldos de septiembre obligará a desembolsar alrededor de 260 millones de pesos.
El mes pasado, ante la necesidad de afrontar el pago de una cifra similar, la Municipalidad se vio obligada a pedirle al banco casi la totalidad de esos fondos.
Aun así los recursos no alcanzaron para pagar en término los sueldos de los funcionarios políticos ni las horas extras realizadas por el personal de diferentes dependencias.
La situación expone la magnitud de los problemas económicos que continúa afrontando el gobierno de Arroyo, que desde que asumió, nunca logró pagar la totalidad de los salarios con recursos propios.
Según un reciente informe del Tribunal de Cuentas de la Provincia, en 2016 la comuna local se caracterizó por haber utilizado los giros en descubierto durante todos los meses. Si bien la gestión del ex intendente Gustavo Pulti ya había apelado a esta herramienta, con la llegada de Arroyo a gobierno, su uso se transformó en algo “crónico”.
Según el Tribunal de Cuentas, entre enero y diciembre del año pasado, la Municipalidad solicitó préstamos transitorios por cifras equivalentes o superiores al monto de la nómina salarial bruta.
Por cada uno de esos descubiertos debió afrontar el pago de elevadas tasas de interés, que según el período del año, fueron de entre el 25% y el 37% anual. Esos porcentajes se aplicaron siempre y cuando la comuna pudo cumplir con la condición de devolver el capital dentro de los plazos acordados, de no más de 30 días.
Pero cada vez que el dinero fue restituido por fuera de ese periodo, el banco le exigió a la comuna el pago de intereses todavía más elevados, de entre el 50% y casi el 60% anual.
Según los cálculos del organismo, la permanente utilización del descubierto para pagar sueldos provocó que durante todo 2016 la Municipalidad acumulara una deuda, sólo de intereses, levemente superior a los 49 millones de pesos.
De acuerdo a algunos trascendidos, en lo que va de 2017, esa concepto ya acumula unos $30 millones.
El descubierto no sólo provocó un perjuicio económico millonario para el erario público. También generó conflictos administrativos y eventualmente legales, que fueron advertidos por el Tribunal.
El organismo señaló que todos los préstamos utilizados para pagar sueldos fueron obtenidos con el amparo de una ordenanza a través de la cual el Concejo Deliberante autorizó al Ejecutivo a endeudarse por una cifra que nunca podría superar el monto “de la nómina salarial de la Administración Central y Entes Descentralizado”.
Sin embargo, en más de una oportunidad el gobierno de Arroyo realizó giros en descubierto muy superiores a la cifra aprobada por el Concejo.
Por ejemplo, en su informe el Tribunal de Cuentas señaló que mientras que en el mes de mayo de 2016 la nómina salarial ascendía a los 191 millones de pesos, el Ejecutivo se “excedió” en varios millones en el monto del préstamo solicitado al Banco.
Según el organismo, en algunos casos esos “excesos” fueron justificados por la emisión de decretos firmados por el intendente Carlos Arroyo “ad referendum” del Concejo. Pero otros excesos se habrían producido sin tener ni siquiera ese aval, lo que impulsó al Tribunal a realizar observaciones y a marcar infracciones contra el intendente Carlos Arroyo y sus dos ex secretarios de Economía y Hacienda: el ya fallecido José Cano y Gustavo Schroeder.
