Nación pagó el anticipo y llegó el alivio a la obra del Monumento a la Bandera

La empresa Dyscon SA ratificó la continuidad de los trabajos y recordó que "nunca se pararon". Ahora se avanza en un informe del relevamiento de los bajorrelieves iniciado semanas atrás

La empresa Dyscon SA ratificó la continuidad de los trabajos y recordó que «nunca se pararon». Ahora se avanza en un informe del relevamiento de los bajorrelieves iniciado semanas atrás

La demora en el pago de un anticipo por parte del Ministerio de Obras Públicas de la Nación tuvo en vilo en las últimas dos semanas a las esperadas obras en el Monumento Nacional a la Bandera, que comenzaron en abril pasado. La confirmación este miércoles del desembolso por parte del gobierno central del dinero reclamado por la empresa Dyscon SA para que los trabajos tomen buen ritmo y se sostengan, sin riesgo de ralentizarse, trajo finalmente alivio a una situación que era de tensión. «Nosotros nos comprometimos a esperar sin frenar los trabajos y Nación a pagar y así fue, se cumplieron los compromisos», dijeron a La Capital desde la empresa adjudicataria.

Desde el arranque de los trabajos a finales de abril y tras el derrotero que el proyecto había tenido durante la gestión nacional de Mauricio Macri, la restauración del Monumento no dejó de estar nunca en la mira. La semana pasada, circuló información periodística que dio cuenta de que Dyscon tenía la decisión tomada y comunicada al gobierno nacional de paralizar la obra ante la falta de pago.

Si bien desde la empresa indicaron que «nunca se decidió frenar la obra», sí admitieron que desde el inicio de los trabajos Nación aún no había concretado ningún pago, ni siquiera un anticipo que había prometido. Es más, la obra ya había sido inspeccionada por la Dirección Nacional de Arquitectura, pero el dinero no había llegado.

Así y todo, la Dyscon reconoció en todo momento «la buena voluntad y predisposición» de las partes e incluso señaló un compromiso de pago previsto para la previa del feriado extra largo del 25 de mayo. Aunque eso no se concretó, la firma decidió esperar incluso una semana más y el desembolso se concretó durante la tarde del miércoles.

Aunque el compromiso previo del Ministerio de Obras Públicas de la Nación existía y había sido señalado en varias oportunidades, no dejaron de apuntar las gestiones de dos rosarinos con responsabilidades en el órbita nacional: los ministros de Transporte de la Nación, Diego Giuliano, y el jefe de Gabinete y precandidato a presidente de la Nación, Agustín Rossi.

La primera inspección
A poco de iniciados los trabajos, en la segunda semana de mayo, la directora de Servicios de Ejecución de Proyectos del Ministerio de Obras Públicas de la Nación, Mariana Quiroga, realizó la primera inspección de la obra.

En ese momento, la funcionaria recalcó que de las «más de 150 obras en todo el país vinculadas a la infraestructura patrimonial” que lleva adelante el ministerio, “una de las más importantes es la que se está realizando en Rosario”.

Junto a Quiroga, inspeccionaron los trabajos la coordinadora de obras de Conservación y Patrimonio, Flavia Rinaldi; la asesora técnica en obras de conservación y restauración, Laura Basterrechea, e inspectores.

En los días subsiguientes, los trabajos avanzaron en el desarme de una ánfora ubicada el Propileo, para evaluar su estructura y determinar las acciones de restauración necesarias. Según detallaron los especialistas de la constructora, se desarmaron las piezas «para realizar una evaluación exhaustiva de cada una y precisar cuál es su estado». Con eso, el siguiente paso es la determinación de cuáles serán las tareas de restauración pertinentes.

Un relevamiento exhaustivo
Pasados mediados de mayo, además, se comenzó a llevar adelante un relevamiento y registro fotográfico de dos de lo puntos más importantes puntos del Monumento, que son los altorrelieves y bajorrelieves en los laterales del atrio: Océano Atlántico y Río Paraná.

Por esos días, la arquitecta Carolina de Luise, integrante de los equipos, explicó «a partir de una serie de fotografías que se van tomando, a través de un proceso que se hace usando un programa específico, se unen esas imágenes y se pueden generar imágenes en t3D, áreas, para después poder hacer un análisis más preciso de las patologías”.

Ahora esas imágenes están siendo procesadas en un informe que permitirá establecer cuáles serán los criterios de intervención, a partir de lo hecho: registro fotográfico del estado previo, un plano de las patologías reveladas, una ficha con propuestas de intervención y un plano de intervención.

Fuente: La Capital