Neuquén: de ciudad del interior a gran urbe
En los últimos tiempos la capital neuquina se ha convertido en una de las ciudades más importantes de la Patagonia.
Un estudio reveló que la capital neuquina es receptora de grandes inversiones. El análisis, de la UNC, demostró el crecimiento demográfico.
Un análisis demográfico de la Universidad Nacional del Comahue confirmó que la ciudad está cada vez más cerca de convertirse en una gran urbe y a la vez dejando de ser una ciudad del interior. Aumento de hogares unipersonales, mujeres encabezando la economía de la casa, más familias con un hijo y menos con tres, son algunas de las características que fundamentan el estudio.
Desde hace tiempo Neuquén se viene consolidando como una de las principales ciudades de la Patagonia, tanto por la cantidad de habitantes como por una economía creciente de la mano de los hidrocarburos. El reciente descubrimiento de los no convencionales la posicionaron como una urbe receptiva de inversiones hoteleras, gastronómicas, inmobiliarias y comerciales.
A este perfil se suma un cambio en los patrones demográficos. Así lo demuestra un estudio realizado por investigadores del Departamento de Estadística de la Facultad de Economía y Administración de la UNC que compara datos estadísticos del cuarto trimestre de 2004 y el mismo período de 2013. «Lo que más nos llamó la atención es cómo se modificó el hogar, de cuatro o más personas pasamos a hogares unipersonales, las jefas de hogar son mujeres y hay pocos niños. Las familias son cada vez más pequeñas y se registra un mayor envejecimiento de la población», explicó la docente e investigadora Elda Michelli, autora del estudio junto con Mariela Figueroa y José Andrada.
En el informe se registró un aumento de las viviendas habitadas por una sola persona, del 11% en 2004 al 18% en 2013. En consecuencia disminuyeron los hogares conformados por dos y tres personas, e incrementaron en un 3% los de cuatro integrantes. En relación a esto también hubo una variación en la cantidad de hijos.
Las familias con un solo hijo pasaron del 33,5% al 42,1%, y las de tres decrecieron del 23% en 2004 al 14% en 2013.
El análisis también dio cuenta de variantes en las economías hogareñas. El porcentaje de hombres que sostienen económicamente una casa bajó del 72,4% al 61,4%. Además, se informó que las mujeres jefas de hogar con un solo hijo pasaron de representar un 34% en 2004 a un 50,4% en 2013. Michelli sostuvo que estos cambios, si bien están relacionados a distintas variables, pueden relacionarse a la emergencia de los planes sociales de «jefas de hogar», a la mayor participación femenina en el mercado laboral y a al emancipación general de la mujer.
