Neuquén: La Meseta deja atrás el desierto y se convierte en ciudad
Hay tres nuevos barrios en marcha para 2 mil familias y proyectan ampliar del ejido para otras 8 mil. Los primeros lotes se entregan este mes.
Hay tres nuevos barrios en marcha para 2 mil familias y proyectan ampliar del ejido para otras 8 mil. Los primeros lotes se entregan este mes.
La Meseta con mayúsculas fue sinónimo de lejanía hasta hace unos años. Para las nuevas generaciones que se abren paso, el significado es otro. La ciudad avanza sin pausa sobre la silueta arcillosa de las bardas, que se transformó en un balcón que mira al valle. Allí están en marcha tres barrios nuevos para dos mil familias y se proyecta ampliar el ejido para que otras 8 mil cumplan el sueño del techo propio.
En la franja reservada hace una década como Foro de la Meseta, el municipio tiene hoy tres loteos en ejecución. El más avanzado queda en el llamado «distrito 7», al oeste del cruce de la Autovía con Casimiro Gómez. Ese predio será el hogar de 869 familias neuquinas, gracias a una urbanización en conjunto con la cooperativa Mercantiles y otras 36 organizaciones intermedias.
El segundo barrio está en un terreno identificado como «Manzana 34», al norte de Colonia Nueva Esperanza, donde se preparan 884 lotes más. En este caso, la tierra es municipal y el mayor desafío es llevar los servicios para que quede integrada a la ciudad.
Por último, en paralelo con los dos anteriores, el municipio lleva adelante un tercer loteo para 247 familias en el denominado «distrito 3» del Foro de la Meseta, de dominio público. El predio queda al norte del barrio Z1, casi pegado a la Autovía.
Los tres barrios que florecen en el desierto están bajo la coordinación de Marco Zapata, el presidente del Instituto Municipal de Urbanismo y Hábitat. El funcionario indicó que el distrito 7 tiene las obras en un 80 por ciento de avance y, este mismo mes, empezarán a entregar por etapas los boletos de compra-venta de los 869 lotes.
«Están completas las obras de agua y cloaca y se hizo una cuba elevada, un tanque de 300 mil litros para poder garantizar la presión y cantidad de agua, que tiene también todas las conexiones domiciliarias», puntualizó. De los trabajos pendientes, el más importante es el tendido eléctrico, acotó, «y estamos trabajando con Calf para que nos autorice a comenzar».
Aclaró que las familias que se mudarán allí podrán tomar posesión de su terreno apenas completen la obra eléctrica y así empezar a levantar sus viviendas.
A fin de año, completarán además la primera etapa de los 884 lotes de la Manzana 34. Esa urbanización se realiza sobre un terreno asignado como espacio verde que se desafectó. Como es tierra pública, el Municipio puede avanzar rápido con las obras; ya inició el movimiento de suelos y prevé entregar una tanda de 320 lotes de manera gradual durante el próximo verano.
En el distrito 3, en tanto, también empezaron el movimiento de suelos del futuro barrio. Zapata explicó que esas tierras «iban a ser destinadas para el Polo Tecnológico, que requería de otro lugar por la cercanía y la conectividad y se decidió cambiarlo al distrito 2, al norte de Huilén, y así cambiamos los indicadores del sector para que pase a ser habitacional».
Como no era un predio pensado para viviendas, debieron hacer nuevos estudios de suelos que demoraron varios meses. Tras ese análisis, determinaron que la urbanización tendrá 247 lotes y estará lista para el año que viene.
Del resto de lo que se reservó como Foro de la Meseta, quedan por urbanizar para más adelante los distritos 4, 5 y 6, que van desde la avenida Huilén hasta Casimiro Gómez. Esas tierras están dentro del fideicomiso que administra Mercantiles junto a otras organizaciones y no pertenecen al municipio. Zapata remarcó que, en ese caso, la idea «es llegar a acuerdos para desarrollar algunos sectores de forma conjunta» tal como se logró en el distrito 7.
Para el largo plazo, además, la comuna empezó a trabajar en otro sector de la Meseta, una franja de tierra casi tan grande como toda la ciudad de Neuquén, que llega cerca de la costa del Mari Menuco. Ese terreno le pertenece al Municipio pero está fuera del ejido, de modo que se necesita una ley para urbanizar allí.
Zapata recordó que lograron el aval del Concejo Deliberante y este mes van a llevar la propuesta para que se vote en la Legislatura. Son 8 mil hectáreas en una franja en diagonal que parte desde la zona de Parque Industrial y se interna en medio del desierto en dirección noroeste.
Las tierras fuera del ejido forman parte de un proyecto ambicioso, que requerirá llevar redes de servicios, escuelas, calles y todo lo que tiene hoy la ciudad a un sector en el que no hay ni señal de celular. El funcionario comentó que no actuarán de manera improvisada y por eso contrataron a la Universidad del Comahue para diseñar un «masterplan», que también tendrá la participación de los colegios de Ingenieros, Arquitectos, Agrimensores y Medio Ambiente.
Por ahora, lo que tienen en claro es que las tierras más cercanas a la zona urbana servirán para sumar otros 8 mil lotes para viviendas y también harán un parque industrial de servicios y un parque solar, que impulse las energías renovables.
Mientras las máquinas avanzan, las bardas ya no parecen tan distantes. Cada vez más familias disfrutan de la ciudad desde el balcón que les regala la naturaleza y Neuquén crece, no sólo en años, sino como el hogar de nuevas generaciones dispuestas a pintar de verde la lejanía, ese horizonte donde sus abuelos sólo veían un desierto.
