Neuquén: treinta y dos banderas y la tierra indígena avasallada

En 1979 se inauguró la plaza ubicada en avenida Argentina, en homenaje a los 100 años de la Campaña del Desierto. Un mástil por el país y los otros por cada uno de los ejércitos.

En 1979 se inauguró la plaza ubicada en avenida Argentina, en homenaje a los 100 años de la Campaña del Desierto. Un mástil por el país y los otros por cada uno de los ejércitos.

La Campaña del Desierto, encabezada por el general Julio Argentino Roca, dejó huellas en cada kilómetro de territorio que fue arrebatado a los pueblos originarios.

Durante décadas y siglos esas huellas se inmortalizaron en fortines, monumentos, estatuas y denominaciones de calles, que buscaban homenajear esa “gesta” que sumó tierras al Estado argentino.

Y durante muchos años, la sociedad poco o nada cuestionó la existencia de esas construcciones que ocultan la historia de los que perdieron, de los que fueron avasallados; “la verdadera historia”, como canta Lito Nebbia.
De estos ejemplos la ciudad de Neuquén tuvo muchos y conserva aún algunos.

El que se eligió para esta página es la plaza de las Banderas. En 1979 se inauguró al final de la Avenida Argentina, en la meseta, una plazoleta con 32 mástiles altísimos con 32 banderas argentinas que se veían flamear todos los días desde distintos puntos de la ciudad.

Varias generaciones de neuquinos conservan en sus retinas esa imagen como una de las más lindas de aquella capital de edificios bajos o de “pueblo chico”, como dijo alguien alguna vez.

Esa plaza fue también un símbolo urbano de los tantos que dejó la dictadura militar en Neuquén. Otro fue el monumento a Manuel Olascoaga, el militar que gobernó el Territorio del Neuquén, pero que nunca quiso que la capital se trasladara desde Chos Malal hasta estas tierras.

El museo Paraje Confluencia rescató la historia de esa plazoleta. Se construyó como “regalo” por los cien años de la Campaña del Desierto.
“El monumento contaba con 32 mástiles, uno para el pabellón nacional y los 31 restantes para cada una de las fuerzas que participaron de la Campaña del Desierto. Además, se descubrieron placas recordatorias correspondientes” a varias provincias, un territorio nacional, Gendarmería, Club de Leones y centros de residentes.

En 2004 el lugar fue remodelado.

En 2004 llegaba un nuevo centenario, esa vez de la capitalidad de la ciudad. Hubo también un regalo en el mismo lugar. El municipio remodeló la plaza de las Banderas, solo dejó tres mástiles para las banderas nacional, provincial y de la ciudad. Construyó nuevas veredas y una fuente iluminada.

Pero no fue para reparar las omisiones de la historia que sino para acompañar el ritmo de un proyecto de modernidad. A veces las deudas sociales se pagan a medias.

Fuente: Río Negro