No hubo acuerdo con los cartoneros en Bahía Blanca

Numerosos inconvenientes en el tránsito causó la protesta llevada adelantes por los cartoneros en el centro de la ciudad.

Numerosos inconvenientes en el tránsito causó la protesta llevada adelantes por los cartoneros en el centro de la ciudad.

Tras una intrincada negociación, no se llegó a buen puerto. El municipio ratificó la prohibición de la tracción a sangre dentro de 15 días.

Tras una intensa jornada, que incluyó una ruidosa protesta frente al Palacio Municipal y una extensa negociación, no se logró cerrar un acuerdo definitivo entre el municipio y los cartoneros.

No obstante, los trabajadores que habían permanecido en la Plaza Rivadavia dejaron anoche su lugar para seguir dialogando en sus barrios.

El eje de la discusión no pasó por la prohibición de la tracción a sangre, sino por saber cuál va a ser el futuro de cientos de familias que viven de la recolección informal.

Precisamente esa fue la principal demanda de las más de 30 carretas y 200 personas, entre trabajadores, niños y jóvenes militantes, que protestaron en el centro.

No faltaron los clásicos redoblantes, los cánticos como “soy cartonero y no ladrón” y la cartelería alusiva: “Sr. intendente dónde están mis derechos”, en un marcha organizada y pacífica. “Pedimos que nos dejen trabajar, para poder darle de comer a nuestros hijos”, resumió Isabel, cartonera desde hace doce años, con seis pequeños.

En el ingreso a la comuna, el cerco de policías abrió el paso sólo a ocho representantes cartoneros que se reunieron, durante dos horas y media, con una comitiva municipal, liderada por el secretario de Gobierno, Fabián Lliteras.

“Ni un paso atrás”, dijo ayer vía Twitter el dirigente Dámaso Larraburu, y esa pareció ser la impronta que tuvo en la “negociación” la comuna, según los cartoneros.

Sin acuerdo, el conflicto volvió a foja cero: en 15 días sacan los caballos de circulación.

Fuente: La Nueva