Proponen que concejales de Sastre trabajen ad honorem y que la dieta se destine a obras
La nueva Unión Vecinal que debutó en las Paso en la cabecera departamental es quien lleva la iniciativa como uno de sus estandartes.
12/09/2017 POLÍTICALa nueva Unión Vecinal que debutó en las Paso en la cabecera departamental es quien lleva la iniciativa como uno de sus estandartes. También plantean la idea de sumar más horas visibles a los ediles. Los demás frentes “bochan” la movida y coinciden en la negativa. Billetera mata grieta.
El nuevo Frente que debutó en los últimos comicios en la ciudad de Sastre vino recargado. La Junta Vecinal encabezada por Mario Broda ya tiene entre ceja y ceja las propuestas que impulsarán en caso de llegar al Concejo. “Tenemos la idea de que los concejales trabajen ad honorem. Este año el presupuesto del recinto será superior a los 2 millones de pesos. Pensamos que ese dinero debe volcarse a obras”, explicó quien comenzó a hacer sus primeras armas en política y aspira a llegar a ocupar una banca en el recinto de la cabecera del departamento San Martín.
También pidió sumar horas visibles a los ediles. “Serían seis horas más donde el cuerpo legislativo se reuniría con vecinos para escuchar reclamos en diferentes barrios y agilizar las soluciones vía Municipio”. Sin embargo, la idea no cayó demasiado bien en candidatos y funcionarios actuales quienes rápidamente mostraron su negativa a la potencial iniciativa.
El grupo no viene del palo de la política. Está formado, en su mayoría, por jóvenes que comienzan a hacer sus armas en este ambiente.
La nueva Unión Vecinal está palanqueada por Luciano Caturelli, subsecretario de Coordinación del Ministerio de Gobierno y Reforma del Estado del gobierno provincial. Y a pesar que el funcionario forma parte de Frente Progresista, la tensa relación con la intendencia local lo llevó a armar una lista para competir con el propio oficialismo sastrense que tiene el mismo color político, aunque no hubo internas el pasado 13 de agosto.
El nuevo bloque lleva como uno de sus estandartes desestimar su contribución a la comunidad a cambio de una retribución económica. “Queremos que los concejales trabajen ad honorem. Tenemos esa intención, pero para que esto prospere debemos contar con el consenso de los demás candidatos y actuales ediles. El presupuesto de este año para el recinto supera los 2 millones de pesos. Proyectamos que esos montos lleguen al pueblo. Podría ser mediante obras, por ejemplo”, precisó Broda.
El candidato número uno de la Vecinal aclaró que todo trabajo debe tener una remuneración, pero “la política pasa por una vocación por la gente”. En tanto, señaló que en la provincia de Santa Fe no existe un Concejo en el cual sus funcionarios no cobren. “Sería un orgullo que Sastre sea el único de ese estilo. Eso demostraría que los políticos trabajan por los vecinos. Considero que acá lo podemos hacer, cubriendo los gastos lógicos del cuerpo legislativo, pero volcando en el pueblo el remanente. Hay satisfacciones mejores que el dinero, cosas que te da la vida y la plata no te brinda”.
Pero a quienes aspiran a ocupar una banca a partir de diciembre próximo no le cayó nada bien la propuesta. A pesar de las diferencias, todos “bocharon” la propuesta de cortar la dieta de los concejales. Broda, al respecto, no se mostró sorprendido por la negativa sobre la movida que generó. Explicó que no se pueden quemar recursos en salarios mientras haya necesidades del pueblo sin resolver. “La clase dirigencial debe dar su gesto de grandeza. No podemos seguir despilfarrando dinero en sueldos jerárquicos con las necesidades que existe en la comunidad. Sastre, con todos los inconvenientes climáticos que tuvo, tiene falencias de años con el pavimento de las calles. Hay concejales que trabajaron mucho, y hay gran parte que calentaron la silla. En 28 años de Concejo, en el cual se cobró una dieta, se dilapidó dinero”, sentenció.
Más horas visibles
Pero no todo pasa por trabajar ad honorem para la Unión Vecinal. El primer candidato de la fuerza abrió el abanico y fue un poco más a fondo. Es que de acuerdo a lo que indicó, en el Frente se empezó a cocinar una idea para llevar a la Sala “Raúl Cragnolino” mediante la cual se intentará sumarle horas de trabajo a los ediles. ¿Cómo sería? De acuerdo al primer bosquejo, todos los lunes se realizarían encuentros con vecinos de diferentes sectores de la localidad para escuchar los reclamos. Los martes se tratarían en Comisión y luego continuaría su camino a las sesiones ordinarias. “Agregaríamos algunas horas más al cuerpo legislativo”, sostuvo.
Según detalló Broda, la idea es dividir la localidad en cuatro cuadrantes y, de esa forma, realizar reuniones semanales con todos los integrantes del recinto para recoger reclamos. “Habría que hacer una ordenanza. Los seis ediles tendrían que ir todos los lunes a escuchar las necesidades de los vecinos. Si las reuniones con la comunidad son partidarias no terminan dando resultado. Serían, aproximadamente, seis horas más de trabajo”, detalló.
Otro que se opuso de manera contundente al recorte de la dieta fue Oscar Cagliero, actual edil del Frente Progresista que irá en busca de la renovación de su banca. Tildó a la idea de la Unión Vecinal como “lamentable y demagógica”, y aseguró que es desafortunado realizar un lanzamiento de ese tipo en campaña.
Pulgar abajo
La intención de la Unión Vecinal de cortar con la dieta de los ediles sastrenses produjo un rechazo generalizado entre todos los candidatos a concejal. De lado quedaron los colores políticos a la hora de emitir opinión y, unánimemente, todos coincidieron en un no rotundo como respuesta. Claro que cada camino fue diferente para llegar, en definitiva, al mismo destino.
El primero en dar el visto negativo fue Albino Moreno, candidato por el justicialismo. “Todo aquel que trabaje debe tener una remuneración, aunque hay concejales que no han trabajado. Nunca nadie hizo la propuesta formal. Hay que estar dentro del Concejo para proponer, no se puede hacer esto en campaña. Si Broda asume, debe llevar el proyecto. Si quiere donar el sueldo que lo haga. Sino tiene que presentar el proyecto en el recinto para que se vote”.
En la misma sintonía, Sergio Balbi, quien perdió la interna en el PJ local y será el número dos en la lista de Moreno, también mostró su negativa aunque se diferenció de algunos contrincantes. “Podemos reducir el salario, cubrir los costos de gastos que tiene el concejal y con el excedente ayudar a comercios. Hablamos de gestionar cursos de capacitación laboral. Se podrían gestionar capacitaciones de oficio para jóvenes que quieran formarse. Solucionaríamos la capacitación en oficios y por otro lado tendríamos más personas en diferentes rubros. Vemos que hoy hay falta de personas de oficio”, arrojó como propuesta alternativa.
Desde Cambiemos justificaron las razones por las cuales desaprueban la iniciativa de la Unión Vecinal. Leandro Baravalle que con 21 años se transformó en el candidato más joven de todo país y fue quien más votos sacó en las Paso sostuvo que si el trabajo en el Concejo se hace ad honorem se corre el riesgo de que la política sea sólo para “los que ya tienen la vida salvada”. Quien encabeza la lista del partido que conduce el país sostuvo también que si un concejal cumple con el rol para el cual fue elegido por la sociedad, debe percibir un ingreso. “Ahí está el punto de la cuestión, discutir cuál es el rol que están teniendo los representantes en Sastre durante los últimos años y pensar que tipo de concejales queremos, unos que trabajen, que le dediquen tiempo, gestionen y preparen proyectos que den respuesta a los problemas o unos que solamente vayan a calentar una silla”.
Otro que se opuso de manera contundente al recorte de la dieta fue Oscar Cagliero, actual edil del Frente Progresista que irá en busca de la renovación de su banca. Tildó a la idea de la Unión Vecinal como “lamentable y demagógica”, y aseguró que es desafortunado realizar un lanzamiento de ese tipo en campaña. “Los concejales tienen muchos gastos para gestionar. Además hay que considerar que no todos estamos en la misma situación económica. Hay quienes deben dejar de lado horas de su trabajo para estar en el Concejo. Esto estaría en contra de la representatividad del Concejo. En lo que falló Broda es que habría que trabajar ad-honorem. Debería haber dicho que él quería donar su dieta, pero no que los demás tendrían que trabajar ad honorem”.
Quien representa la lista del oficialismo local en Sastre indicó que el candidato del flamante bloque posee un “desconocimiento muy grande”. En tanto, aclaró que su partido ya impulsó esa clase de encuentros vecinales en los barrios hace tiempo atrás. “Solucionamos algunos problemas, sencillos, pero problemas en fin. Antes de entrar al Concejo presenté un proyecto similar. No me asusta trabajar más horas visibles”.
Por último, Eva Lucero actual concejal justicialista tampoco vio con buenos ojos la idea lanzada por Broda. La edil fue tajante y se mostró en contra de la iniciativa: “Si quiere donar su sueldo que lo haga. Yo trabajo, tengo gastos y para mí es un área laboral. No estoy de acuerdo”, sentenció de entrada.
Pero la funcionaria fue un poco más lejos con las críticas y pidió a quienes irán en busca de una banca en los próximos comicios que “opinen con conocimiento de causa y hablen desde adentro para entender la forma en la cual se trabaja como cuerpo legislativo”, y agregó: “Lo que recibo es porque trabajo. Yo me comprometí, tengo reuniones y viajo para asesorarme y llevar soluciones a la sociedad”.
Para finalizar, Lucero sostuvo que la discusión debe darse dentro del recinto en caso que Broda eleve un proyecto. Además se mostró a favor que en situaciones excepcionales los concejales no reciban su dieta adecuadamente. “A nadie le gusta ir a trabajar sin que se le pague. Que no se cobre porque no se trabajó como el año pasado, me parece bien. Pero no coincido con la idea que se trabaje ad honorem”.