Protesta de productores por la importación de carne de cerdo
Productores porcinos de toda la región manifestaron su malestar por la importación de carne de cerdo, que junto al aumento del maíz y las subas tarifarias está obligando al cierre de establecimientos de pequeños "lechoneros".
23/06/2016 El PaísProductores porcinos de toda la región manifestaron su malestar por la importación de carne de cerdo, que junto al aumento del maíz y las subas tarifarias está obligando al cierre de establecimientos de pequeños «lechoneros».
Productores porcinos de toda la región manifestaron su malestar por la importación de carne de cerdo, que junto al aumento del maíz y las subas tarifarias está obligando al cierre de establecimientos de pequeños «lechoneros». Representados por la Federación Agraria Argentina, se manifestaron en la cabecera el miércoles pasado en el acceso al enlace vial Rosario-Victoria y reclamaron al gobierno nacional una serie de medidas.
Pablo Paillole, director del distrito seis de Federación Agraria Argentina (FAA), advirtió que los pequeños y medianos productores de porcinos que aseguran que desde hace seis meses se vienen «comiendo» el capital al punto que «entre un 20 por ciento y un 30 por ciento ya cerraron sus establecimientos».
Los reclamos incluyen el cese de las importaciones de cerdos desde Brasil y Dinamarca; una compensación de 3 pesos por kilo de capón vendido y cinco pesos por kilo de lechón vendido. También una campaña estatal de promoción del consumo de cerdo y un plan nacional porcino con créditos, capacitaciones entre otras acciones tendientes a dar previsibilidad y rentabilidad a la actividad productiva.
Mientras cortaban parcialmente el acceso al enlace vial con Rosario, la Comisión Porcina de la Federación Agraria repartían volantes con la leyenda «Productores porcinos sin segundo semestre». Los productores presentes calificaron la situación del sector porcino como un «exterminio».
«La estamos pasando mal desde los últimos seis meses, ya los frigoríficos no están comprando la cantidad que compraban antes y el precio está muy bajo», dijo el productor Sebastián Calori, dueño de un criadero con 350 cerdas en Oliveros.