Rosario: Crece la tensión entre el oficialismo y Cambiemos por los fondos al transporte

Roy López Molina calificó a Fein de "irresponsable" por decir que el boleto se irá a $ 30. Y Javkin tildó de "poco transparente" al futuro reparto de subsidios.

Roy López Molina calificó a Fein de «irresponsable» por decir que el boleto se irá a $ 30. Y Javkin tildó de «poco transparente» al futuro reparto de subsidios.

Los subsidios nacionales para el transporte urbano de pasajeros volvieron a encender una ardua polémica en el Concejo Municipal. El edil de Cambiemos Roy López Molina consideró «irresponsable» decir que el boleto subiría en enero a 30 pesos, como lo hizo la intendenta Mónica Fein en una reunión con intendentes del área metropolitana de Rosario, y recordó que el aporte provincial al transporte «es ínfimo». Desde el Frente Progresista, la respuesta no tardó en llegar. «El nuevo fondo para subsidios no sólo es escaso, sino que su mecanismo de distribución es poco transparente», advirtió Pablo Javkin.

Mientras en la Cámara de Diputados de la Nación comenzaba el debate sobre el proyecto de presupuesto para el año próximo (ver sección Política), los concejales del oficialismo y la oposición se sacaban ayer chispas sobre el futuro de los subsidios al servicio de colectivos. Un tema más que sensible, ya que los fondos nacionales representan alrededor del 40 por ciento del precio del boleto.

El retiro de estas partidas a partir del 1º de enero pondría en riesgo al sistema. Según lo advirtió el martes pasado la intendenta Mónica Fein, el pasaje se iría a unos 30 pesos. Un precio «impagable» para la mayoría de los usuarios, trabajadores y estudiantes.

El presidente del bloque de Cambiemos salió ayer al cruce de las palabras de la intendenta. No sólo negó la magnitud del aumento sino que consideró «temerario» el cálculo. «Es importante llevar tranquilidad a los usuarios del transporte. La intendenta vuelve a caer en una irresponsabilidad al llevar temor a la gente, diciendo que en Rosario vamos a tener un boleto a 30 pesos», expresó en diálogo con La Ocho.

López Molina explicó que los subsidios seguirán vigentes. «Lo que cambia es el mecanismo por el cual las ciudades acceden» a los fondos para el sistema de transporte.

«A partir de este nuevo mecanismo, cada provincia y ciudad tendrá mayor autonomía en el manejo de recursos. Las provincias que tienen superávit contarán directamente con esos fondos que Nación va a transferir para que cada jurisdicción pueda definir de qué manera entregará esos subsidios. Esta medida garantiza un mayor federalismo en la política de transporte», sostuvo.

De paso, recordó que los fondos que actualmente aporta la provincia al sistema resultan «ínfimos» y pidió que la Casa Gris incorpore más dinero con su presupuesto.

Los números

«A la posverdad, nosotros la contrastamos con números», le contestó el presidente de la comisión de Servicios Públicos del Concejo, el arista y aliado de Fein, Pablo Javkin.

El edil apuntó que es el proyecto de presupuesto que se discutía esta madrugada en el Congreso Nacional el que habla de «derogación de subsidios» al transporte. Y recordó que el año pasado este sistema aportó 57 mil millones de pesos, de los cuales 34 mil millones fueron para el interior del país.

«En cambio —sostuvo— se crea un fondo de 6.500 millones, de los cuales 5 mil millones irán a las provincias y otros 1.500 quedarán a discreción del Ministerio de Transporte de la Nación».

La poda

Según consideró, a partir del 1º de enero, de los 57 mil millones que destinaba el gobierno nacional para sostener los servicios de transporte de pasajeros, apenas se mantendrán 6.500 millones. «De cada diez pesos que teníamos de subsidios, apenas se puede asegurar uno», cuestionó el edil del Frente Progresista.

Pero además advirtió que anteriormente (a través del sistema conocido como Sistau) los fondos llegaban a cada empresa, en función de la cantidad de coches, los kilómetros recorridos y los pasajeros transportados. «Ahora vamos a un esquema que no plantea ninguna fórmula de distribución, lo que por lo menos resulta poco transparente», concluyó.

Fuente: la Capital