Salta: Nuevos alquileres superan por amplio margen a la inflación
Por las nuevas regulaciones, hay menor oferta y la alta demanda provoca aumentos. Hay locaciones en la ciudad que duplican su precio con relación al 2020.
Por las nuevas regulaciones, hay menor oferta y la alta demanda provoca aumentos. Hay locaciones en la ciudad que duplican su precio con relación al 2020.
La realidad indica que mientras más esfuerzos hace el Estado para regular el mercado de los alquileres, mayor es el perjuicio para los propietarios y, en el último tiempo, para los inquilinos. Y todo se agrava en una provincia como Salta que tiene un altísimo déficit habitacional, de unas 80 mil viviendas.
La reglamentación del sistema de registro de locaciones que el miércoles pasado dispuso la AFIP no hizo más que sumar una nueva incertidumbre a quienes tienen propiedades para ofrecer, más allá de la función del organismo recaudador de velar para que se cumplan con las obligaciones fiscales. La medida se adosa a los perjuicios que denuncian los actores del sector tras la sanción de la ley de alquileres en julio del año pasado y a la obligación de congelar los precios de los alquileres que ordenó el Gobierno nacional por la pandemia de la COVID-19.
Ese combo llevó a que muchos propietarios retiren sus casas o departamentos del mercado: la oferta se redujo drásticamente y por la alta demanda existente los valores de las nuevas locaciones se fueron por las nubes. El presidente del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de Salta (Cucis), Juan Martín Biella, advirtió a El Tribuno que los contratos de alquileres que se celebraron en lo que va del año (a los que ya están vigentes desde 2020 les rige el decreto de necesidad y urgencia 320/20, de congelamiento de precios, pero que se pueden actualizar bajo un índice impuesto por el Banco Central) se les imprimió un incremento muy superior a la inflación oficial prevista para este año, que es del 29%.
En enero de 2020, el precio promedio de un departamento de alrededor 40 metros cuadrados, de un dormitorio, en la capital salteña era de $9.500, según un estudio de la Federación Inmobiliaria de la Argentina (FIRA). En la actualidad, no se ofrecen propiedades de las mismas características por menos de $18.000, de acuerdo a un relevamiento que hizo este diario en páginas web del rubro y consultas a inmobiliarias locales.
En aquel informe de la FIRA, en la categoría de departamentos de dos dormitorios y de unos 60 m2, el valor de la renta promedio era de $12.700 en Salta a principios del año pasado. Ahora, lo mismo cuesta $23.000, como oferta más económica y en la zona del macrocentro el precio se eleva a $30.000.
En lo que es alquileres de vivienda de barrio, tipificadas para clase media, de entre 80 a 100 metros cuadrados de superficie, los precios en Salta estaban en una de una media de $13.300 hace un año. Hoy se puede encontrar un departamento en Castañares a $19.000, más $300 de expensas.
Evasión
La reglamentación de la AFIP para que los propietarios registren los ingresos que perciben por alquilar a partir del 1 de marzo no tendrá demasiados escollos en la provincia entre quienes tienen contratos formales con sus inquilinos, ya que los mismos se certifican en la Dirección General de Rentas de la Provincia y esta dependencia cruza sus datos con la Administración Federal de Ingresos Públicos. Según el titular del Cucis, en Salta hay unos 15 mil alquileres en esa condición.
Las locaciones que seguramente seguirán en negro son las de los inquilinatos, que además están desprotegidos por la ley de alquileres. Quienes alquilan de esa manera informal suman alrededor de 20 mil personas, dijo Juan Martín Biella.
