Salta: Según el Gobierno, es imposible frenar las obras de las peatonales
Con un porcentaje pequeño de avance, así se ve la peatonal Florida.
Por Facebook se organizan peticiones colectivas para que el juez Longarte ordene la paralización de los trabajos.
A pesar de la disconformidad que muchos salteños están manifestando por distintas vías, al ver el aspecto que van adquiriendo las peatonales de la ciudad, funcionarios de la Municipalidad y del Gobierno de la Provincia continúan respaldando el proyecto.
Ayer fue el ministro de Finanzas, Carlos Parodi, quien en diálogo con una emisora local señaló: «Es imposible que la obra se frene, porque ya hubo una inversión». Además, opinó que «no tiene que ser analizada por partes porque se somete a una crítica algo que no está terminado». En igual sentido se expresó el secretario de Obras Públicas de la Provincia, Sergio Zorpudes: «Nosotros vamos a continuar con el proyecto consensuado, acabado, porque tenemos una licitación y porque todos los pasos llevaron un año para que sea aprobado. Lo otro de la gente ‘si me gusta o no’ es una cuestión de gustos, pero los pasos fueron hechos desde junio de 2013». Mientras tanto, avanza en la Justicia el amparo que promueve el abogado Santiago Pedroza cuya primera audiencia se cumplió el miércoles pasado en la sala II de Audiencias de Tribunal de Juicio. El juez Angel Longarte, luego de escuchar al procurador general de la Municipalidad, Aníbal Anaquín, quien representó al Ejecutivo municipal, y Pedroza, llamó a la Unidad Coordinadora de Obras de Infraestructura (Ucodi); al presidente de la Copaups, Marcelo Cil; a todos los jurados que eligieron el proyecto ganador y a la empresa que lleva adelante la construcción. Ellos el próximo miércoles deberán exponer sus argumentos y exhibir la documentación probatoria. Para la refuncionalización de las peatonales se fijó un presupuesto de $21.543.499 y un plazo de ejecución de 210 días, y los trabajos presentan un avance del 15%. Al salir de la audiencia, Anaquín había minimizado el desánimo y la bronca de los ciudadanos con la concreción de las obras. «No es que hubo una oleada de amparos judiciales. Sabemos bien cuál es la pretensión del señor Pedroza: no le gusta la obra porque tiene otro estilo arquitectónico», había manifestado.
Apoyo al amparo
En la página change.org, destinada a peticiones colectivas, el abogado José Armando Caro Figueroa solicita al juez Angel Longarte que haga lugar al recurso de amparo presentado por el abogado Santiago Pedroza y ordene paralizar las obras que lleva adelante la Municipalidad de Salta en las peatonales de la ciudad. «El proyecto de remodelar las peatonales salteñas fue modificado irregularmente. Además, las obras en ejecución contradicen una cierta estética que caracteriza el centro de la ciudad de Salta, consagrando una nueva agresión al estilo predominante. Los nuevos bancos, luminarias, baldosas y plantas desmejoran lo existente, a un costo exorbitante», argumenta.
Recibió en un día la adhesión de 275 personas. En diálogo con El Tribuno, Caro Figueroa dijo: «Fui a ver las peatonales y me parecieron un desastre, un retroceso frente a lo que había, que tenía un cierto encanto. Había plantas, una senda para ciegos y una iluminación decente.
Entonces me convencí de que no era un debate político ni ideológico. Como los funcionarios dicen que una sola persona reclamó, les vamos a mostrar que hay más gente que apoya el amparo», concluyó.
Un momento para la ironía
«Quería decir que con esos bancos probablemente tengamos beneficios insospechados que no estamos teniendo en cuenta. Por ejemplo, evitamos ampliar el cementerio de la Santa Cruz. Podremos atraer el turismo alternativo de los amantes de los zombis… Los que venden remedios para las hemorroides verán incrementadas sus ventas en verano con las personas que se sienten en los bancos», comentaba Gabriel Moreno en la nota «Para el Gobierno las aguas danzantes ‘eran peligrosas'», publicada por El Tribuno en su edición de ayer. Del lado contrario, el usuario de Facebook Guille Estrada hizo un montaje de personajes coloniales paseando por una imagen del proyecto de remodelación de una de las peatonales. «Ayer le propuse esto a una señora y me dijo que soy un pelot…, ¿pero que no querían algo colonial?», ironiza.
Justamente desde la Copaups defienden que para el proyecto se tuvo en consideración que el equipamiento urbano fuera durable, de fácil mantenimiento y antivandálico. Por ello se desestimaron los bancos de madera, por ejemplo. Sin embargo, ya hubo cambios que la empresa contratista debió hacer obligadamente. «Los bancos de forma trapezoidal no son los del diseño original del proyecto. Tienen que hacerlos con las formas geométricas puras de cubos perfectos y cambiar los de aspecto de urnas», precisó la Copaups.
