Santa Fe: Pidieron no empezar las clases porque no pueden comprar los útiles

La triste realidad se vive entre los alumnos de menos recursos que asisten a la escuela Nº 265 de barrio Yapeyú. Los padres pidieron tiempo porque no pueden comprar los elementos básicos

La triste realidad se vive entre los alumnos de menos recursos que asisten a la escuela Nº 265 de barrio Yapeyú. Los padres pidieron tiempo porque no pueden comprar los elementos básicos

La escuela Nº 265 Yapeyú, ubicada en 12 de Octubre 9300, se encuentra ubicada en el noroeste de la capital provincial. Está a tan solo 19 minutos del centro de la ciudad. Pero en esa institución educativa se vive una realidad que les toca a muchas familias y que pocos ven.

La institución de nivel secundario cuenta con una matrícula de 800 alumnos que se dividen entre los turnos mañana y tarde. La escuela, que es pública, recibe chicos que van desde los 12 a los 19 años. Entre sus aulas se cuentan alumnos de Yapeyú, Los Troncos, La Ranita, La Tablada, Loyola Norte y Sur.

Muchas de las familias atraviesan necesidades que van desde la falta de trabajo hasta lo «básico», como falta de vivienda. Sin embargo, la educación es un bien valorado por los padres de los alumnos que acuden a la entidad y tratan de defenderlo. Y fue a poco del inicio del ciclo lectivo que muchos de estos acudieron a la escuela para pedir «tiempo» a los directivos en la compra de los útiles escolares.

«Nosotros pedimos que asistan igualmente, que ya vamos a ver cómo solucionamos el tema de los útiles», aseguraron Carina y Luciana, docentes de la institución en torno al pedido. Las docentes aclararon que si bien la problemática es real, no afecta a todos los alumnos por igual.

Las necesidades de estos chicos pasan por la imposibilidad de adquirir los elementos básicos para asistir al aula, como por ejemplo cuadernos, lápiceras y mochilas. Un segundo aspecto que se repite todos los años, pero en el inicio de este ciclo se siente aún más, es la dificultad para acceder al calzado.

«Muchas mamás comentaron la dificultad que están teniendo para los útiles, así como también con la ropa –contó Carina. No se exige un uniforme, pero los chicos tienen que venir con una remera blanca. Eso y los útiles es todo lo que un chico necesita para la escuela».

El comedor, un termómetro

Un aspecto que no pasó inadvertido para los integrantes de la comunidad educativa es la alta demanda que registró el comedor escolar durante el receso de clases.

El número de asistentes no se redujo en el período diciembre-febrero.
«Asistieron más chicos que en años anteriores –relató Luciana. Antes se les daba dieta seca pero este año se empezó a cocinar y los chicos asistieron en mayor número».

A pesar de que no pudieron dar una cifra exacta, ambas docentes coincidieron en que la cantidad se duplicó. Mientras que en la época de clases el número se incrementa.

Las docentes piden que las personas que puedan colaborar con los chicos de la institución que se acerquen a la escuela, ubicada en calle 12 de Octubre 9300. Básicamente están pidiendo desde útiles escolares hasta calzados, los cuales se destinarán a los alumnos de menos recursos.

Fuente: Uno