Santa Rosa de Lima: los comedores populares ya alimentan de manera diaria a 12.000 vecinos
La inflación y el precio de los alimentos golpea fuerte la realidad de los vecinos de barrios populares que buscan ayuda en los comedores. Piden una mano a las autoridades para volver a comer en casa
21/04/2023 MUNICIPIOSLa inflación y el precio de los alimentos golpea fuerte la realidad de los vecinos de barrios populares que buscan ayuda en los comedores. Piden una mano a las autoridades para volver a comer en casa
La pobreza y la inflación son hoy dos de los principales problemas económicos que enfrenta el país, y uno de los efectos más visibles de estas condiciones es el creciente número de personas que recurren a los comedores populares para alimentarse.
Según un reciente informe del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), la pobreza en Argentina alcanzó el 42% de la población en el segundo semestre de 2022, lo que significa que más de 18 millones de personas viven por debajo de la línea de la pobreza. En el Gran Santa Fe trepó al 39,5%, supera a la media nacional y abarca a 214.760 personas.
Estas condiciones llevaron a muchas personas a depender de los comedores populares para obtener una comida diaria. En los últimos meses, se registró un aumento significativo en el número de personas que concurren a estos establecimientos, que en algunos casos incrementó su capacidad de atención en un 50% respecto a años anteriores.
En muchos casos, los comedores populares son la única opción para las personas que no tienen trabajo o que tienen empleos informales y precarios, y que no pueden hacer frente a los precios de los alimentos básicos debido a la inflación.
Un ejemplo al día de hoy es lo que ocurre en la ciudad de Santa Fe en barrio Santa Rosa de Lima, donde 12.000 personas asisten de manera diaria a los comedores. En diálogo con el Móvil de UNO 106.3, Rubén Sala, referente social del barrio aseveró: «Es vergonzoso ver cómo los vecinos del barrio deambulan de un comedor a otro con un tupper. En el tiempo de pandemia estaba bien, pero hoy ya es tiempo que vuelvan a comer en su casa, pero a corto plazo la situación se avizora que estará peor».
«Día a día la plata alcanza para comprar menos cosas y el que no tiene ya no sabe qué más hacer para conseguirla. La situación está desbordada y necesitamos que alguien nos dé respuestas, por eso la exigencia a la Nación de hacerse presentes y hacerse cargo de la situación, aunque sea con una respuesta», afirmó al mismo tiempo que se sinceró: «En los comedores populares del barrio se les está dando de comer a 12.000 personas de manera diaria. De ese total podemos decir que la mitad podría mantenerse de alguna manera si el comedor no existiera, pero la otra no y es lo que nos preocupa y queremos que el gobierno lo vea».
«Los comedores son un instrumento para poder darle de comer a todos durante una crisis, como fue la pandemia, pero estamos buscando que el vecino vuelva a comer a su casa», sentenció Sala.
Corte y reclamo
Frente a esta realidad, hace un mes y de manera formal, integrantes de una cooperativa barrial, de la cual Sala es integrante, enviaron una nota al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación para pedirle una respuesta sobre programas como el Potenciar Trabajo o Nexo Empleo, para saber por qué algunos vecinos no lo estaban percibiendo o la posibilidad de sumar nuevos, teniendo en cuenta la situación social que hoy les toca vivir. También en la misiva pedían alimentos y herramientas de trabajo a través de algún otro plan o beneficio que el Ministerio realice en Santa Fe.
Como el tiempo pasa y no hubo novedades, un grupo de vecinos cortó por un tiempo la intersección de Mendoza y Circunvalación. «Exigimos respuestas», manifestaron. Finalmente, una representante de la cartera a nivel provincial les aclaró que si bien no pueden darle respuesta a su reclamo formal, sí se comprometieron a realizar una reunión entre las partes.