Tensión racial en Estados Unidos: Las protestas se extienden a diversas ciudades

e_1416991238 (1)Por segunda noche consecutiva, miles de personas se manifestaron para reclamar por la decisión de un gran jurado de absolver al policía blanco que mató al adolescente negro Michael Brown en agosto pasado en Ferguson.

Las protestas se realizaron en Nueva York, Los Ángeles, Washington y Seatlle, aunque, a diferencia de ayer, no se registraron incidentes. En algunas localidades manifestantes se tendieron en el suelo para simular que habían sido abatidos por la fuerzas de seguridad. En otras, se limitan a llevar pancartas alusivas a la actuación policial, en las que exigen justicia.

En Nueva York, la manifestación se desarrolló pacíficamente y enlazó la plaza Union Square con Times Square, dos de los lugares más emblemáticos de la ciudad. Sin embargo, en algunas zonas hubo algunos forcejeos con la policía

Medios locales dijeron que al menos tres personas quedaron detenidas por los agentes policiales cuando querían mantener cortada una de las principales avenidas de la isla de Manhattan.

Los manifestantes, de todas las razas y en su mayoría jóvenes, coreaban lemas como «Sin Justicia no hay paz» y «Manos arriba, no disparen», utilizados en las últimas protestas contra la brutalidad policial en esta ciudad.

En Los Ángeles, hispanos e inmigrantes salieron también a las calles para apoyar a la comunidad de Ferguson. La marcha concentró a más de 100 personas, la mayoría jóvenes negros y blancos, que porta carteles que rezaban: «Todas las vidas son importantes».

Ferguson

Cientos de efectivos de la Guardia Nacional fueron enviados a Ferguson para ayudar a las autoridades locales a mantener el orden. Horas después de caer la noche, creció la tensión luego de que un coche de la policía fuera incendiado frente a la municipalidad, y los agentes lanzaran gases lacrimógenos.

Mientras, el policía Darren Wilson rompió su largo silencio público para insistir, en la televisión nacional, en que no podía haber hecho nada diferente en su enfrenamiento con Brown.

Tras la noche de violencia del lunes, el gobernador de Missouri, Jay Nixon, movilizó un amplio contingente de fuerzas adicionales de la Guardia Nacional, al ordenar que los 700 efectivos iniciales aumentaran a 2200 con la esperanza de que su presencia pudiese ayudar a las autoridades locales a mantener el orden en el suburbio de San Luis.

Frente a la sede de la policía en Ferguson, una mujer fue detenida después de que manifestantes lanzaran lo que parecían ser bombas de humo, bengalas y botellas con agua congelada a una fila de agentes. Otros dos manifestantes con máscaras fueron detenidos tras desafiar las órdenes de la policía para salir de la calle.

Los hechos

Darren Wilson disparó contra Brown y lo mató el pasado 9 de agosto, a plena luz del día, con seis disparos, dos de ellos en la cabeza, después de un confuso incidente. La muerte del joven generó la indignación en la ciudad de Ferguson, de 20.000 habitantes, donde hubo enfrentamientos, saqueos, decenas de detenidos y múltiples destrozos. Los manifestantes reclamaban una investigación judicial amplia, mientras que el policía alegó defensa propia.

El joven, según un testigo, había levantado las manos para mostrar que estaba desarmado. La Policía luego lo confirmó, pero sostuvo que el joven atacó a los policías y trató de tomar el arma de uno de los agentes. Al día siguiente del asesinato, una vigilia para homenajear al joven desembocó en asaltos a comercios y 30 detenidos

El jurado investigador, integrado por nueve personas blancas y tres afroamericanas se reunió semanalmente desde el 20 de agosto para sopesar la evidencia. Finalmente, ayer el fiscal del condado de Saint Louis, Bob McCulloch, informó sobre la decisión de no presentar cargos.

Fuente: El Once