Tres de cada diez niños viven en zonas de basurales en Salta
Según un estudio del Ielde, un porcentaje igual reside en áreas inundables. El ambiente que rodea a la infancia fue incluido en el informe sobre pobreza de Unicef
30/05/2016 PROVINCIASSegún un estudio del Ielde, un porcentaje igual reside en áreas inundables. El ambiente que rodea a la infancia fue incluido en el informe sobre pobreza de Unicef.
Tres de cada diez niños, niñas y adolescentes en Salta viven en casas cercanas a basurales o en zonas inundables, lo que afecta sus derechos a crecer en ambientes que les garanticen salubridad. Un 20 por ciento de los chicos de hasta 17 años de la ciudad y las localidades metropolitanas, en tanto, residen en viviendas inadecuadas y sin acceso a los servicios de saneamiento básico.
Los datos de privaciones infantiles los dio a conocer el Instituto de Estudios Laborales y del Desarrollo Económico (Ielde), perteneciente a la Universidad Nacional de Salta, y corresponden al segundo trimestre de 2015 de la Encuesta Permanente de Hogares del Indec. Con esos indicadores, además, Unicef elaboró un informe sobre la pobreza multidimensional en el país, que arrojó como resultado unos cuatro millones de pobres.
En el norte del país, las privaciones de la infancia alcanzan hasta el cincuenta por ciento de la población.
Con el 30,6%, Salta es el aglomerado con mayor porcentaje de niños, niñas y adolescentes que habita un terreno inundable. En esos lotes, muchos de ellos surgidos como asentamientos, no se reúne las condiciones de habitabilidad.
Al analizar la población infantil en el país que está expuesta a enfermedades que generan basurales, Salta tiene el segundo porcentaje más alto, 32,9%, y solo es superada por Corrientes, con 41%.
Uno de los casos
Las casi 300 familias que tiene el barrio Justicia, en el sureste de la capital salteña, pueden dar cuenta sobre cómo influye el ambiente donde residen en los indicadores de pobreza multidimensional que elaboró Unicef junto al Ielde.
Fueron mudadas a fines del 2012 a esa zona desde los asentamientos San Juan de Dios y Gauchito Gil, donde sufrían inundaciones y riesgos por desbordes del río Arenales (el 31 de enero de 2011, una crecida arrasó sus pocas pertenencias). Y ahora esas familias viven a unas cuantas cuadras del vertedero San Javier y de la planta depuradora de líquidos cloacales de la zona sur.
En el lugar, el Gobierno les construyó módulos de 15 metros cuadrados, con baño y un dormitorio. Muchos fueron ampliados con edificaciones precarias.
«Cuando hace calor, hay olores nauseabundos y en verano es común ver a los niños con sarpullidos en la piel», contó Cristina Mamaní a El Tribuno, a cargo del comedor del barrio Primera Junta Por una Sonrisa, que de lunes a sábado asiste a 120 chicos de esa barriada, Justicia y Santa Mónica.
La dimensión del ambiente aporta más del 8% en los índices de pobreza multidimensional realizados por Unicef. Las carencias y sus consecuencias sobre las personas que habitan en cercanías de basurales o con peligro de inundación están marcadas en la Convención sobre los Derechos del Niño y son uno de los puntos a solucionar en los Objetivos de Desarrollo Sostenible que la ONU se fijó hasta 2030.
Alrededor del 28% de los niños, niñas y adolescentes en la Argentina están privados en esa dimensión, según Unicef.
Las brechas socioeconómicas y geográficas juegan un rol preponderante en ese aspecto de la pobreza: un 41% de los niños que pertenecen al 20% más pobre de la población vive en zonas inadecuadas.
Vivienda
Al lado del barrio Justicia, en Fraternidad, 12 familias residen a metros del río Arenales. Se asentaron en el lugar a principios del año pasado y ya construyeron sus casas con bloques de hormigón.
«Sufrimos inundaciones cuando llueve, pero por lo menos tenemos un lugar donde vivir. Ahora esperamos que desde el Gobierno nos entreguen los títulos de los terrenos», contó a este diario Selena González, quien vive sola con sus tres hijas, de 4, 2 y 1 año, en una de las viviendas precarias de Fraternidad, sin acceso a la red cloacal. Una de las niñas padece dermatitis desde que vive en ese barrio.
De acuerdo al estudio del Ielde, el 23,2% de los niños y adolescentes de la capital salteña y municipios colindantes reside en viviendas inadecuadas. En la medición de la pobreza multidimensional, Unicef considera los materiales con los que están construidas las casas, y entiende que debe estar edificada en un área sin riesgo y con una estructura durable que proteja de las inclemencias del tiempo para no entrar en las categorías de la pobreza.
Otra de las privaciones que llevan a un niño ser pobre son las condiciones de saneamiento del lugar donde vive. El 17,7% de los menores de Salta reside en condiciones deficitarias sobre ese aspecto.
En las encuestas de Unicef y del Indec que se utilizaron para medir ese indicador se tuvo en cuenta si los hogares disponen de agua dentro de la vivienda, si el agua que consumen es de fuente dudosa y las condiciones de letrinas y baños.
AUMENTO DE AFECCIONES AMBIENTALES
Enfermedades respiratorias, parasitarias y diarreas, las más difundidas. Más de cuarenta patologías infecciosas, relacionadas con la basura, las deficiencias del saneamiento ambiental y la falta de acceso a suministros de agua segura afectan fundamentalmente a los niños. Enfermedades respiratorias, diarrea aguda, parasitosis intestinales, afecciones de la piel, alergias, conjuntivitis, hepatitis viral, tuberculosis, fiebre tifoidea, toxoplasmosis, abcesos y encefalitis son algunas de las más conocidas.
Los servicios de salud de Salta atienden anualmente a más de 100 mil pacientes con diarreas. Según el último Anuario Estadístico de la Provincia, con datos actualizados hasta 2014, durante ese año hospitales y centros sanitarios reportaron 109.083 casos. En 2012 se habían tratado 101.654 casos y en 2013 habían sido asistidas 101.651 personas con los mismos cuadros.
NIÑOS
En 2014 fueron atendidos por diarreas 47.195 niños menores de cinco años. En 2012 habían sido informados 38.636 casos, mientras que en 2013 se notificaron 44.707 casos.
Durante 2014, en la misma franja etárea, los servicios de la zona sanitaria Norte reportaron 16.957 casos de diarrea.
En la zona Centro fueron atendidos 14.647 niños y niñas. Desde el Sur se notificaron 8.586 intervenciones y otras 7.005 reportaron los hospitales y puestos sanitarios del Oeste.
En lo que respecta a infecciones respiratorias, en 2014 los servicios públicos de salud asistieron a 15.804 niños y niñas menores de dos años por bronquiolitis. Atendieron, asimismo, a 2.230 niños y niñas menores de cinco años afectados por neumonías.
Por otra parte, se notificaron 16.097 casos de parasitosis intestinales.
CAUSAS DE DEFUNCIÓN
En los anuarios estadísticos de la Provincia, las afecciones respiratorias (tercer lugar) y las enfermedades infecciosas y parasitarias (cuarta posición) aparecen entre las diez principales causas de defunción de niños.
Durante 2012, la incidencia de enfermedades del sistema respiratorio en la defunción de menores de un año fue del 10,9%). En 2013 bajó al 7% y en 2014 subió al 11,1%. En los decesos de mayores de un año, la incidencia de las afecciones respiratorias fue del 15,28% en 2012, del 17,1% durante 2013 y del 15,7% en el último año con registros oficiales publicados: 2014.
A su vez, la incidencia de las enfermedades infecciosas y parasitarias en las defunciones de menores de un año fue del 3,9% en 2012. En 2013 ascendió al 7,2% y durante 2014 bajó al 5,8%.
En los fallecimientos de mayores de un año, la incidencia de las mismas patologías fue del 6,25% en 2012. Al año siguiente subió al 7% y en 2014 descendió al 6,6%.