Una ciudad rionegrina se sacó un 10 en decoración navideña
En General Conesa diseñaron un pino gigante y el trineo con renos de Papa Noel con botellas plásticas. La idea surgió en un taller de reciclaje.
En General Conesa diseñaron un pino gigante y el trineo con renos de Papa Noel con botellas plásticas. La idea surgió en un taller de reciclaje.
Las calles de General Conesa lucen el espíritu navideño a pleno. Armaron un pino gigante de casi 10 metros de altura, decenas de otros de menor tamaño, un trineo de Papa Noel con cinco renos a tamaño escala y paquetes que representan obsequios. Todo con mucho color y el mismo estilo, alumbrado con luces y velas.
Lo sorprendente del ornamento es que fueron construidas con más de 100 mil botellas de plástico que acopiaron en un taller de reciclaje que puso en marcha el municipio hace dos años con el objetivo de minimizar el daño ambiental y estético que provocan los envases desperdigados, pero también con un fin social.
La iniciativa estuvo a cargo de las direcciones de Cultura y de Turismo, con el acompañamiento de otras áreas de la estructura comunal.
El director de Cultura, Diego Gauna, explicó que en 2019 iniciaron una prueba piloto para la reutilización de las botellas. Las juntaron en puntos de acopio y las enviaron a Viedma, en una planta que las convirtió en bancos de plaza.
Los vecinos no tardaron en acompañar la propuesta por los beneficios que acarrea para la población, y los artículos plásticos se fueron juntando de a miles.
En marzo de este año surgió la idea de confeccionar una decoración para las fiestas de fin de año. Así se pusieron manos a la obra. Primero delinearon distintos bocetos, labor en la que fue clave Inés Gentille, Una vez que definieron los diseños comenzaron a ensayar en la confección de las figuras. Fue a prueba y error, destacó Gauna, uniendo y separando partes con un alambre maleable y pegamento.
El funcionario ponderó también como muy notable el entusiasmo que despertó cuando el proyecto se comunicó a la comunidad, mucha gente –entre vecinos y las propias autoridades- se sumó al trabajo, que se concentró en un galpón municipal. Diariamente se reunían más de 40 personas, entre grandes y chicos.
Muchos lo hicieron por solidaridad, pero en cada operación encontraron un momento de relajación. “Fue como una terapia”, agregó.
Por eso cuando el jueves 9 se anunció que encenderías las luces de las piezas instaladas en la plaza central y en la avenida principal, una multitud acudió al momento.
“Nos sorprendió el éxito que tuvo. Es que después de haber estado tanto tiempo aislados por la pandemia, fue un reencuentro”, resaltó Gauna.
Cuando cae la noche la zona céntrica conesina se ilumina, y no debe haber habitante que no se tomó una foto con alguno de los atractivos. Incluso han pasado turistas que no pudieron resistir la tentación de llevarse una imagen de recuerdo.
La obra decorativa incluso traspasó las fronteras locales gracias a las redes sociales, y recibieron consultas y sugerencias de ciudades vecinas, como San Antonio, Viedma, Patagones e incluso desde Neuquén, con la intención de reproducir algo parecido.
Una vez que pasen las celebraciones de la fecha las figuras serán guardadas en el galpón donde fueron construidas. La intención es agregarle nuevos atractivos para volver a sorprender.
