Vaqueros: Un pueblo que se afianza en sus raíces
Hubo actos en el edificio comunal, del que participaron vecinos y autoridades. Distinguieron al empleado más antiguo.
Ayer, la comunidad de Vaqueros celebró los 44 años de su municipalización (1970).
En ese marco, el intendente Daniel Moreno hizo entrega de 16 escrituras a familias del barrio San Nicolás y homenajeó al empleado más antiguo de la comuna, don Serapio Guantay, quien desde 1972 se encuentra al servicio de los vecinos.
El acto tuvo lugar en el patio del edificio comunal y fue encabezado por autoridades locales y provinciales, y contó con la participación de un gran número de vecinos y delegaciones de las diferentes instituciones del pueblo.
En la oportunidad, también se hizo entrega de una mención especial al ceramista Eduardo Valois Vera, quien fue premiado a nivel nacional en un certamen artístico llevado a cabo recientemente en Catamarca.
Las actividades cerraron con una espectáculo que fue protagonizado por una agrupación de caporales que hizo gala de sus ritmos y el colorido de sus trajes.
Sus inicios
Cabe recordar que hasta 1970 Vaqueros era un poblado famoso por sus plantaciones de mora, pero que carecía de una organización comunal y administrativa. Fue así que por decreto ley 4.365, se creó el 5 de agosto de ese año, el Municipio de Vaqueros, cuando era gobernador interino y de facto el coronel Hernán Risso Patrón.
El primer intendente fue Julio Catalán Arellano, cuya gestión se extendió desde el 15 de octubre de 1970 hasta el advenimiento de la democracia, el 25 de mayo de 1973.
Su tesorera fue doña Olimpia Flores de Tapial.
Las oficinas municipales comenzaron a funcionar en un terreno donado por la sucesión del exsenador nacional Carlos Serrey.
En ese mismo predio se erigió luego, el edificio municipal, obra que fue dirigida por Humberto Bini.
Un momento para el recuerdo
El intendente Daniel Moreno destacó:
«Fue un verdadero honor participar como intendente de esta celebración, tan sentida para nuestro pueblo puesto que la organización municipal fue el punto de partida para nuestro desarrollo como comunidad».
