Sindicatos uruguayos en el primer paro contra Tabaré Vazquez
Los sindicatos uruguayos realizaron ayer un paro general de 24 horas en reclamo de mejoras salariales y en rechazo a un plan de ajuste fiscal y del presupuesto elevado por el Ejecutivo al Parlamento.
15/07/2016 EL MUNDOLos sindicatos uruguayos realizaron ayer un paro general de 24 horas en reclamo de mejoras salariales y en rechazo a un plan de ajuste fiscal y del presupuesto elevado por el Ejecutivo al Parlamento.
«Si no se resuelven estos aspectos este año va a haber una conflictividad gigantesca», dijo Fernando Pereira, presidente de la central obrera en una rueda de prensa donde celebró el alto acatamiento de los trabajadores a la jornada de protesta.
El gobierno no hizo comentarios.
Esta es la segunda huelga general de un día que enfrenta el presidente Tabaré Vázquez desde que asumió el poder el 1 de marzo de 2015. Los sindicatos realizaron además seis paros generales de cuatro horas.
La única central sindical del país exige un aumento del salario real que acompañe la inflación, con ajustes de sueldos cada 12 meses. El gobierno, en cambio, mantiene que los ajustes no deben sobrepasar la inflación anual proyectada por sus técnicos y que deben realizarse cada 18 o 24 meses.
Según datos oficiales en mayo la inflación interanual fue de 11%.
«Reclamamos que se cambien los criterios a fin de poder defender el poder de compra del salario real de los trabajadores», dijo el secretario general de la central única de trabajadores, Marcelo Abdala, según declaraciones que reprodujo el portal oficial de la central.
La central sindical considera inadmisible que los bajos salarios que ganan muchos trabajadores pierdan poder adquisitivo, algo que sostienen ya ha comenzado a ocurrir. Pereira, el presidente de la central, declaró recientemente que «hay 350.000 trabajadores que ganan salarios de 15.000 pesos (unos 485 dólares). Con ese salario en Uruguay yo aseguro que no se puede vivir». La población total del país es de 3,2 millones de habitantes.
Los sindicatos también rechazan que se posterguen gastos en diversos organismos del Estado, tal como pretende el gobierno, para combatir un déficit fiscal de 3,6% del producto bruto interno.
El gobierno remitió una rendición de cuentas al Congreso en la que propuso postergaciones en gastos en diversas áreas del Estado y un aumento en la carga impositiva que pagan 20% de los salarios y jubilaciones más privilegiados mayores a 50.000 pesos brutos mensuales (unos 1.600 dólares).
Los sindicatos también reclaman que no se pierdan puestos de trabajo. El índice de desempleo ha venido experimentando pequeñas subas en los últimos meses y se situó en 8,06% en abril, según la última medición oficial disponible.