El plan postpandemia para el AMBA: fomentar la economía popular y urbanizar los barrios
La crisis hizo triplicar la asistencia de los comedores de la Ciudad como los de las escuelas bonaerenses entre abril y junio. Además, el 40% de los beneficiarios del bono IFE -3,5 millones- vive entre el Gran Buenos Aires y la Capital Federal.
20/07/2020 MUNICIPIOSLa crisis hizo triplicar la asistencia de los comedores de la Ciudad como los de las escuelas bonaerenses entre abril y junio. Además, el 40% de los beneficiarios del bono IFE -3,5 millones- vive entre el Gran Buenos Aires y la Capital Federal.
La pandemia pulverizó la economía argentina, y otra vez los sectores más vulnerables son los más afectados y los que menos posibilidades de salir rápido tienen si no se apuntala, con la ayuda del Estado, el potencial productivo de estos grupos que, a la vez, son el motor de muchos otros sectores de la economía. Con esta premisa, y mientras todavía atienden la urgencia, Nación, Ciudad y Provincia ya trabajan en el diseño de medidas para superar la crisis cuando el covid-19 comience a retraerse.
Por separado, aunque no tanto, cada juridiscción (CABA y provincia de Buenos Aires) diagramó una serie de ayudas mientras que a nivel nacional también se avanza en un paquete amplio de asistencia, financiamiento y promoción del trabajo y de la industria nacional. minutouno.com habló esta semana con los tres gobiernos para conocer las ideas que están en escritorio. En esta nota, todos los detalles.
NACIÓN
El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, prevé instrumentar un bono, por un monto que aún resta definir, y que también resta establecer si será «universal» o «de base». Es decir, aún se estudia si será otorgado a toda la población económicamente activa (ya sea aquel que tiene un empleo registrado como los que están en la informalidad o hacen changas y los desocupados) o si sólo irá destinado a un grupo poblacional, el que esté más afectado por la crisis.
La característica del bono y la población que alcanzará aún se está discutiendo. Sí se sabe que será complementario de la AUH, que la cobran unos 2,5 millones de jefas y jefes de hogar de todo el país. Se sabe que el IFE, que llega a 9 millones de personas, es temporal y que sirve para morigerar el impacto de la cuarentena.
La idea del ministro es que este ayuda económica obtenga el consenso de todos los actores: empresarios, funcionarios, oposición, legisladores y la sociedad; y que se mantenga durante varios años. «La gente que comenzó a recibir asistencia en el marco de la pandemia tendrá muchas dificultades, por eso es importante tener un ingreso de base para el camino de salida. El objetivo es reconstruir la movilidad social ascendente», explicaron a minutouno.com voceros de Arroyo.
A la par, se ampliará el plan «Potenciar el Trabajo», que en la actualidad tiene 580 mil beneficiarios, que trabajan 4 horas en comedores o centros comunitarios por $8.500, pero ahora se buscará incorporar trabajadores para apuntalar los sectores de la construcción, alimentos, indumentaria, calzado y reciclado. En esta ocasión, el objetivo es que trabajen 8 horas y se contrate a asalariados de los sectores más postergados y se les pague al menos un salario mínimo vital y móvil, que asciende en la actualidad a los $16.850.
El Gobierno nacional se propone generar 300 mil nuevos puestos de trabajo con el objetivo de reactivar la economía y la producción, creando mano de obra intensiva, y que apunta a esos cinco sectores productivos que impactan positivamente en el desarrollo local y la economía social. Este programa ya se puso en marcha en las provincias donde está mas abierta la cuarentena.
“El universo de asistencia del Estado es 9 millones de personas que cobran el IFE, 580.000 personas que cobran planes sociales (que significa la mitad del salario mínimo) y 4 millones de chicos cuyos padres cobran AUH. Sobre ese universo hay que pensar el mecanismo de la renta básica, que deberá tener etapas que están ligadas a las posibilidades fiscales”, sostiene el ministro de Desarrollo Social de la Nación.
«COMPRE ARGENTINO»
A nivel nacional, pero desde el Ministerio de Desarrollo Productivo se está trabajando en nuevas medidas para promover la industria argentina. El programa que será anunciado en breve fue bautizado como Plan Federal de Reactivación.
Por un lado, se modificará la ley de parques industriales y la puesta en funcionamiento de un centro de producción de soluciones tecnológicas, informó el diario Ámbito Financiero. Pero otra de las acciones que contempla la cartera que conduce Matías Kulfas es el del programa de desarrollo de proveedores locales. Una enmienda a lo que hoy se conoce como el “compre argentino”. Constará de incentivos fiscales, aportes no reembolsables, créditos blandos y el apoyo del Instituto Nacional de Tecnología Industrial para la consulta permanente de las empresas. La condición clave para acceder a los beneficios será la sustitución de importaciones.
En un comienzo, estará destinado a los sectores más perjudicados por la pandemia: energía, transporte, movilidad, minería, aeroespacial, naval, nuclear y servicios, pero luego se irá ampliando hacia el resto.
CIUDAD
Potenciar la economía popular de los barrios vulnerables. Éste es el eje central de la propuesta que tiene en mente, y está por ponerse en marcha, el gobierno porteño bajo la órbita de los ministerios de Producción, y Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad.
«La generación de empleo es la clave para salir adelante de esta crisis. Hay una oportunidad muy grande de pensar en la producción con el trabajo de las economías populares, pero para eso ha que ayudar a destrabar donde están los problemas mas importantes», señaló en diálogo con minutouno.com María Migliore, titular de la cartera de Desarrollo Humano y Hábitat porteña.
Esas tres trabas se encuentran en las fases de producción, comercialización, y financiamiento de las economías de los sectores populares, enumeró la ministra. «Hay un potencial productivo muy grande en los barrios, donde nosotros ya venimos trabajando hace años con buenos resultados, y esos ejemplos son los que queremos replicar dinamizando los tres componentes con la ayuda estatal», dijo.
En línea con el plan Potenciar el Trabajo de Nación, la administración de Rodríguez Larreta también identificó los sectores que pueden tener una oportunidad en la postpandemia: la industria del cuidado, construcción, reciclado, alimentos, gastrononía y textil. «Hay mucho valor en los barrios y debe tener un rol el Estado para eliminar las trabas culturales y ampliar la cadena de valor para que los productos de la economía popular se comercialicen en toda la Ciudad», insistió.
Migliore puso como ejemplo una huerta de 15 mujeres que en un trabajo articulado con una fundación y el gobierno porteño se convirtió en una importante salida laboral: «Los plantines de las mujeres se venden en toda la Capital», graficó.
En este plan de fomentar las economías populares en la postpandemia, destacó la ministra, ya mantuvieron intercambios con los ministerios de Desarrollo tanto de Nación como de Provincia para trabajar en la misma línea.
Hay otra iniciativa que instrumentaron hace algunos años y que será profundizada con el fin de lograr motorizar la economía popular. «Nosotros tenemos, así como Nación, una tarjeta alimentaria que se carga todos los meses. Llega a 38 mil familias por un monto de $5.500. Ahora estamos promoviendo que sea gastado en el comercio territorial. Que el vecino del barrio pueda usar la plata en el barrio y, así, empezar a apuntalar a esos sectores. Ya entregamos postnet en distintos comercios», detalló Migliore.
Y al igual que Nación y Provincia, la urbanización de los barrios populares es uno de los temas troncales para superar la crisis. «Es prioritario seguir trabajando en eso», señaló y recordó que la Ciudad ya invirtió en vivienda $26 mil millones.
El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación tiene como otro de sus puntos prioritarios para la postpandemia avanzar en la urbanización de los 4.000 asentamientos precarios que hay en todo el país, y donde viven más de 4 millones de personas.
PROVINCIA
Si bien por el momento están centrados en la asistencia a los que más lo necesitan en plena crisis por el coronavirus, el ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires, Andrés Larroque, trazó dos líneas de acción de cara al día después: urbanización de los barrios populares; y un programa que consolide la organización comunitaria existente en los barrios y que se potenció en el marco de la pandemia.
En todo el territorio bonaerense hay 1800 asentamientos precarios y casi 900, la mitad, están centrados en el Gran Buenos Aires. Este ambicioso plan de urbanización de todas las «villas» de la provincia, pero en especial del conurbano bonaerense será con fondos conjuntos: de las arcas del estado provincial pero también de Nación, en el marco de la propuesta de urbanizar los 4000 barrios pupulares que hay en todo el país.
En Provincia, la administración de Áxel Kicillof a su vez ya creó un fondo que se destinará a todos los municipios para asistir especialmente a dos de los sectores más afectados por la pandemia: la Cultura y el Turismo, ambos con necesidad de inversión para adecuar su infraestructura a los nuevos protocolos sanitarios, ya que serán de los últimos en poder retomar la actividad.
Cada municipio deberá seleccionar qué empresas, prestadores y emprendimientos culturales y turísticos serán los beneficiarios a través de un registro que tienen que completar los municipios, y partir de que llenen este formulario se les va a hacer llegar el dinero, que se determinará en base a las necesidades de cada solicitante, precisaron voceros del Ministerio de Producción bonaerense a este portal.
El fondo estará destinado a financiar gastos de mantenimiento y reacondicionamiento de los locales y espacios, y a la compra de insumos, materiales y equipos necesarios para el reinicio de sus actividades. El dinero que se presta no tiene que ser devuelto. A su vez, el registro que hagan los municipios a través de una página web «va a servir para registrar muchas actividades de estos sectores que mayormente se mueven en la informalidad y que hoy desconocemos cuántos son y su realidad actual. Tenemos en total 21.500 prestadores turísticos y gastronómicos formales, pero sabemos que son muchos más», subrayaron a minutouno.com los voceros de Augusto Costa.
Este viernes, al filo de la conferencia de prensa que brindó en Olivos, el presidente Alberto Fernández llamó al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; y al gobernador bonaerense, Áxel Kicillof, a trabajar juntos en «un plan postpandemia para el AMBA», una menta que se vislumbra posible porque los tres gobiernos aceitaron el diálogo en medio de la crisis, y como contó la ministra Migliore, junto con sus pares de Nación y Provincia ya mantienen intercambios pensando en el día después.