Chile: La oposición pide incluir a los estudiantes en el proceso constituyente
Diputados opositores presentaron un proyecto de ley que, de ser aprobado, obligaría a más de 11.000 escuelas chilenas a replicar en sus aulas el proceso constituyente antes de que se instale la convención, para que estudiantes puedan aportar ideas y propuestas.
15/01/2021 EL MUNDODiputados opositores presentaron un proyecto de ley que, de ser aprobado, obligaría a más de 11.000 escuelas chilenas a replicar en sus aulas el proceso constituyente antes de que se instale la convención, para que estudiantes puedan aportar ideas y propuestas.
Un grupo de parlamentarios opositores impulsan en Chile un proyecto de ley para que los estudiantes secundarios, que iniciaron las protestas en octubre de 2019 que desencadenaron en el actual proceso constituyente, sean parte del debate que marcará la historia contemporánea del país para cambiar la actual Constitución, creada durante la dictadura cívico militar de Augusto Pinochet.
Para sumar a los estudiantes en el debate constituyente, un grupo de diputados opositores presentaron un proyecto de ley que, de ser aprobado, obligaría a más de 11.000 escuelas en todo Chile a replicar en sus aulas el proceso constituyente antes de que se instale la convención, para que puedan aportar ideas y propuestas.
La iniciativa tiene nueve objetivos en concreto, entre ellos, está el “fomentar en los estudiantes el ejercicio de una ciudadanía crítica, responsable, respetuosa, abierta y creativa”.
Busca además el “compromiso de los estudiantes con los derechos humanos reconocidos en la Constitución Política de la República” con especial énfasis en “los derechos del niños”.
La diputada Camila Rojas, del partido izquierdista “Comunes”, exdirigente estudiantil y principal promotora del proyecto, explicó en conferencia de prensa en la sede del Congreso que la iniciativa nació porque el proceso constituyente “fue posibilitado por la movilización de los y las estudiantes secundarios”.
“En especial, por la (movilización) que se desarrolló el 18 de octubre (2019)”, argumentó.
Las multitudinarias manifestaciones sociales en Chile comenzaron el 18 de octubre, luego que los estudiantes secundarios llamaron a evadir el pago del subte en Santiago, la capital, en rechazo al aumento de 30 pesos del costo del pasaje.
Ante la represión de Carabineros a los estudiantes, una parte importante de la sociedad salió a las calles indignada para apoyar a los secundarios, lo que generó grandes movilizaciones que exigían, entre otras cosas, una nueva constitución para lograr cambios estructurales en el sistema social y económico del país.
Las fuertes manifestaciones de octubre, noviembre y diciembre de 2019 llegaron a poner en jaque al Gobierno de Sebastián Piñera, quien obligado a bajar la tensión que se vivía en las calles, selló un acuerdo con la oposición para firmar un Acuerdo por la Paz y una Nueva Constitución, que reemplace a la pinochetista de 1980.
Ante la represión de Carabineros a los estudiantes, una parte importante de la sociedad salió a las calles indignada.
La diputadas Rojas explicó esta semana que el proyecto de ley busca que los niños, niñas y adolescentes “no queden ausentes de este importante proceso que vivirá” todo el país.
El texto obligaría al Ministerio de Educación a poner “a disposición del sistema escolar, orientaciones, instructivos, lineamientos concretos y recursos educativos que tengan como fin fomentar la participación, reflexión, debate e información sobre el proceso constituyente en curso”.
Además, propone “la realización de talleres y actividades extracurriculares, en los que haya una integración y retroalimentación de la comunidad educativa”.
Juan Santana, diputado del Partido Socialista (PS) y presidente de la comisión de Educación de la Cámara de Diputados, afirmó que el proyecto busca “instaurar oficialmente la participación de las niñas, niños y adolescentes en el proceso constituyentedel cual fueron protagonistas».
«Es el reconocimiento que hacemos a la protesta estudiantil como fuerza canalizadora del descontento”, explicó.
El parlamentario socialista incluso propuso invitar a los padres y organismos vinculados con los menores de edad y derechos humanos a ser parte de este proceso que intenta dar protagonismo a los estudiantes en el debate constituyente.
Según el diario La Tercera, el proyecto sería respaldado por diputados oficialistas y opositores, en caso de avanzar en la Comisión de Educación y pasar a votarse en el pleno de la cámara en las próximas semanas.
Javiera Toro, abogada y una de las redactoras del Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, participó en la elaboración del proyecto, que a su juicio, busca “garantizar el derecho de niños, niñas y adolescentes a ser tomados en cuenta en asuntos que les afectan, derecho que el Estado chileno tiene la obligación de garantizar”.
“No habría proceso constituyente sin la rebeldía de los adolescentes, por eso su voz debe ser tomada en cuenta en la convención constitucional”, argumentó Toro, según consigna La Tercera.
Del lago gremial, el nuevo presidente del Colegio de Profesores, Carlos Díaz, valoró positivamente la iniciativa e incluso anunció la creación de una “escuela de verano constituyente” para “entregar a las profesoras y profesores que serán constituyentes” planteos para plasmar en el debate constituyente.
Finalmente, el proyecto de ley mandata a las escuelas a entregar “actas y resultados de las acciones concretas establecidas” al Ministerio de Educación para que éste “pueda poner a disposición pública dicho material” y sus propuestas pueden ser tenidas en cuenta por los constituyentes y el resto de la sociedad.
El próximo 11 de abril, los chilenos deberán elegir a los 155 convencionales constituyentes que tendrán entre 9 a 12 meses para debatir y redactar una nueva Carta Magna, que deberá ser sometida a un plebiscito de salida, programado para 2022.