Ampliación del ejido urbano en Río Gallegos aportó más de 11 mil nuevos contribuyentes
Son más de 11 mil los nuevos contribuyentes que la Municipalidad de Río Gallegos agregó a su sistema de recaudación en el primer trimestre de esta año, a partir de la incorporación a los límites de la ciudad de los barrios San Benito, Bicentenario, Presidente Néstor Kirchner (ex Los Lolos) y Padre Walter Olivieri, este último correspondiente a la primera fracción de loteos de APAP.
De acuerdo a las estimaciones, de unos aproximadamente 20 mil residentes de esos barrios incorporados al ejido urbano, restan poco más de 8 mil por subir al sistema municipal, en virtud de que aún está sin resolver el litigio de expropiación que la provincia mantiene con el particular Juan Luis Ercolano desde diciembre de 2006, y que impide a los vecinos obtener la propiedad de su lote.
Al adherir a la Ley Provincial 3303, por la que la Legislatura amplió los límites de la ciudad, por Decreto 3141 de fecha 20 de agosto de 2013, el municipio creó una comisión mixta integrada por la Secretaría de Obras Públicas y Urbanismo de la Municipalidad de Río Gallegos, las direcciones de Planeamiento y Desarrollo Urbano y de Tierras y Catastro, dependientes del municipio, y la Subsecretaría de Planeamiento de la Provincia.
En tanto, el 27 de agosto pasado se concretó el traspaso formal de la documentación correspondiente a los nuevos barrios incorporados al ejido municipal, por parte de la Subsecretaría de Planeamiento al municipio, que además había establecido en el artículo 3º del Decreto Municipal 3141, que la obligación tributaria de los contribuyentes a incorporar en la nueva zonificación regiría a partir del calendario impositivo 2014.
Es así que comenzaron a regir este año, para los nuevos contribuyentes, los vencimientos correspondientes a las tasas de barrido, limpieza, recolección y conservación de la vía pública; impuesto al baldío; e inmobiliario urbano para los que acreditan propiedad de la tierra, que en muchos casos sigue siendo una complicación a resolver por parte de la provincia.
Primera etapa. La Ley Provincial 3303 sancionada el 22 de noviembre de 2012 en sala de sesiones de la Legislatura, que amplió en aproximadamente 950 hectáreas los límites legales de Río Gallegos, fue parcialmente vetada por el Ejecutivo, que presentó un texto alternativo sobre especificaciones técnicas de la Dirección Provincial de Catastro, que dejó para una nueva etapa la incorporación de los barrios Los Alamos y Virgen del Valle, otras dos fracciones de loteos de APAP.
De los barrios hasta ahora legalmente incorporados al ejido urbano de Río Gallegos, en un trabajo de la Dirección Municipal de Catastro, en el primer trimestre de este año fueron incorporados como nuevos contribuyentes al sistema de recaudación comunal los vecinos comprendidos en unas 447 manzanas.
En promedio, la incorporación de esa documentación hace a una cifra superior a los 11 mil nuevos contribuyentes, sin contar aún a los vecinos de Bicentenario, que no cuentan con la propiedad legal de su lote en virtud del litigio provincial aún sin resolución.
Otra etapa. Para darle a Río Gallegos los límites definitivos en orden al crecimiento exponencial que ha tenido y con previsión, resta que la Legislatura avance con una nueva etapa de ampliación del ejido urbano, sobre la que insistió en septiembre pasado el entonces diputado por Pueblo Mauricio Gómez Bull, antes de acceder a una banca en el Congreso de la Nación, y dejar su banca provincial a su sucesor en la lista, Carlos Albrieu.
El proyecto, que el ahora Legislador nacional consensuó con el municipio y el Consejo Profesional de Arquitectura, Ingeniería y Agrimensura (CPAIA), prevé una ampliación del ejido urbano en unas 7.800 hectáreas, extendiéndose la ciudad hasta el predio donde se instalará la Zona Franca, camino a Punta Loyola hacia el sur.
Hacia el norte en tanto, prevé evaluar la posibilidad de solicitar al Gobierno provincial la transferencia de los lotes disponibles de su propiedad, como por ejemplo la Escuela de Policía ubicada sobre la Ruta Nacional Nº 3 que limita con el estuario de Río Gallegos o las fracciones del Establecimiento 3, linderas al barrio San Benito y comprendidas entre estancias Killik Aike Sur, Don Braulio y la Ruta Nacional Nº 3 sector sur. También se deben transferir todas las manzanas o parcelas destinadas a uso público o espacios verdes según proyectos de urbanización aprobados.
Este proyecto contiene la ubicación del nuevo ejido, con la delimitación relativa, especificando además las zonas que resultan inundables y no aptas para su urbanización.
Una vez ampliados nuevamente los límites de la ciudad, el municipio deberá decidir qué zona será residencial, cuáles serán los nuevos parques industriales de la ciudad, los sectores de servicios, los comerciales y los nuevos espacios recreativos, proyectando escuelas, gimnasios, espacios verdes, evitando de esa manera que los usos de suelo puedan ser con otros fines.
Gómez Bull fundamentó la ampliación del ejido urbano no sólo como una oportunidad importante de brindar servicios a los vecinos, sino de aumentar los ingresos genuinos del tesoro municipal extendiendo las facultades de contralor de todas las actividades, ya sea comerciales, bromatológicas, sanitarias y de competencia municipal.
