La Muni de Centenario decretó la emergencia económica y de servicios públicos
La gestión del intendente Esteban Cimolai informó que enfrenta una deuda heredada de más de 1.000 millones de pesos.
02/01/2024 ECONOMÍALa gestión del intendente Esteban Cimolai informó que enfrenta una deuda heredada de más de 1.000 millones de pesos.
El recientemente asumido intendente de Centenario, Esteban Cimolai, se enfrenta, según sus propias palabras, a una crisis económica nunca antes vista. Es por ello que en las últimas horas decretó la Emergencia Económica, Financiera y de Servicios Públicos ante el colapso por las deudas y la precarización institucional.
Según informaron, el gobierno municipal tiene que hacer frente a una deuda heredada de más de 1.062.892.915,98 millones de pesos. Además, indicaron que el 93% de la coparticipación está destinada al pago salarial, cuyo total es de 896.133.782,34 millones. «La recaudación propia de los últimos tres meses de 2023 asciende a 58.679.649 millones de pesos, y el saldo actual disponible del Estado Municipal es de 29.018.543,41 millones de pesos», precisaron.
En el decreto 0065/2023 refrendado el 22 de diciembre por el intendente y su equipo, en el primer artículo establece que la Emergencia Económica-Financiera y de Servicios Públicos será por un plazo de dos años, ad referéndum del Concejo Deliberante. Para ello, el intendente pedirá al Cuerpo que realice una sesión extraordinaria.
En la norma legal queda de manifiesto que “existe una imposibilidad técnica, económica y financiera de cumplir en tiempo y forma con las obligaciones ya asumidas por la gestión de gobierno que finalizó el 9 de diciembre de 2023, haciendo pasible a la Administración de multas, demandas por incumplimientos contractuales y pagos de intereses por mora”.
Apenas asumido el nuevo gobierno, fue verificando el grave estado de desfinanciamiento del tesoro municipal, a la par de una ciudad en la que no funcionan los servicios esenciales, y que en el decreto se detalla así: “La secretaría de Agua y Saneamiento informó un total y completo estado de deterioro de la infraestructura de agua potable y saneamiento, y la falta de elementos necesarios para el normal funcionamiento del servicio público”, con todo el daño que conlleva para la salud pública y el deterioro de la calidad de vida.
Esta medida faculta al Municipio a “suspender o rescindir contratos de obra, servicios de suministros, consultorías o de cualquier otro tipo que generen obligaciones que no posean el respaldo documental y de prestación para llevarlo adelante, y de contratos cuya prestación no ha sido iniciada”.
También dispone la “renegociación, suspensión o rescisión de contratos de obra pública (en los términos del artículo 74 de la ley 687), así como de disponer contrataciones directas destinadas a remediar, subsanar o recomponer servicios públicos esenciales y urgentes, bajo los alcances de normas especiales que se dicten a sus efectos”.
La Emergencia decretada da cuenta de lo observado en el relevamiento de la situación patrimonial, informática, y de transporte, tránsito y bromatología, entre otras áreas.
No hay ni para el carnet de conducir
En este último caso, se explicita la situación de la Dirección de Licencias de Conducir y Educación Vial, organismo “que no cuenta con los insumos proporcionados por la Agencia Nacional de Seguridad Vial para la emisión de licencias físicas”, por lo que actualmente quedan pendientes de emisión 298 carnets, facultando al Poder Ejecutivo Municipal a concretar “con carácter urgente” el reclamo a Nación.
En otro orden, faculta “a realizar las auditorías técnicas, legales, contables, de recursos humanos y de gestión para realizar el control y revisión integral de todas las obras, contrataciones, adjudicaciones, concesiones, otorgamientos de permisos y autorizaciones, y de todos los actos administrativos a los efectos de verificar actos, hechos o situaciones que no se correspondan con la normativa vigente; dictar las medidas administrativas sancionatorias, y promover las denuncias y acciones judiciales correspondientes”.