Jaqueados por los tarifazos y la caída de clientes, bares de Santa Fe se ven obligados a reducir personal

Desde la Cámara de Bares reflejaron una caída de hasta 60% del consumo respecto a diciembre en algunos locales, con una situación "crítica" para el sector

Desde la Cámara de Bares reflejaron una caída de hasta 60% del consumo respecto a diciembre en algunos locales, con una situación «crítica» para el sector

El presente de los bares de Santa Fe se encuentra en estado «crítico» según lo expusieron  empresarios gastronómicos locales. A la merma de clientes en un promedio de 40% respecto a diciembre (llega hasta el 60% en algunos bares) se le suman tarifazos de hasta el 300% en las boletas de luz y gas que llegan a los locales.

Ante esto y teniendo en cuenta la temporada baja que suponen los meses de invierno, desde la Cámara de Bares de Santa Fe afirmaron que los locales se ven obligados a reducir personal ante la escasez de clientes, a la vez de que otros se encuentran en situación apremiante a nivel económico.

UNO Santa Fe dialogó con Maximiliano Chiarelli, presidente de la Cámara de Bares de Santa Fe, quien graficó el pésimo momento que pasa el sector gastronómico a nivel local: «Los datos que tenemos hablan de una caída promedio de 40% del consumo respecto a diciembre, pero hay bares en la zona de Bulevar que llegan a 60% en la caída registrada».

Tarifazos en luz y gas
Uno de los puntos más críticos del que se subraya es la caída en la rentabilidad del empresario gastronómico santafesino, motivado en gran medida por la suba exponencial de los servicios traducido en las últimas boletas de luz y gas.

Sobre esto, Chiarelli sostuvo: «Se nos hizo directamente imposible poder trasladar estos aumentos a precios, no podemos subir el precio de algo 1.000% porque directamente no lo vendemos nunca más. Si bien la reducción de 40% de los clientes es un dato muy grave, más grave aún para nosotros es el impedimento de poder poner los precios reales a los productos porque el gas y la luz se fueron muy arriba».

Poniendo este problema aquejado por los bares en números concretos, hay locales que estaban pagando una factura de luz en el orden de los 2 millones de pesos que en la última boleta de la EPE debieron afrontar un número que oscila los 6 millones de pesos.

Sumado a esto, se le agrega el hecho de tener que afrontar un alquiler para varios locales. «Está muy complicada la situación y creo que en los próximos relevamientos que hagamos y el impacto de los números de las nuevas facturas de energía la crisis se va a profundizar con una espiral descendente en todo el rubro», afirmó el referente de los bares.

Reducción de personal
Por si lo antes mencionado fuera poco, el bajo nivel de actividad se ve afectado además por la temporada baja que supone tradicionalmente la llegada del invierno para el sector gastronómico. Todo este combo hace que los bares deban incurrir en la reducción del personal debido a no poder afrontar el pago de salarios ante la merma de clientes. Tal es la gravedad de este presente que algunos locales mantienen la intención de ofrecer las llaves de los comercios en venta.

Así lo describió el presidente de la Cámara de Bares: «En invierno la capacidad de afuera uno no la puede ocupar, por lo que se sigue manteniendo el mismo personal pero a la vez el invierno es la época de menor demanda para nosotros, a lo que se le suman las tarifas y alquileres. Esto obliga a los bares a tener que despedir gente. Hay muchos bares que tienen una estructura de horarios desde las 8 de la mañana a 2 de la mañana del día siguiente y desde las 8 hasta las 12 del mediodía va poca gente, al mediodía en lugar de 100 cubiertos vendidos se venden unos 40 y ya queda mucha gente de sobra para la poca clientela que hay, así de triste es la situación».

Proveedores afectados
Para concluir, el referente gastronómico admitió: «En esta situación no es que solamente cae la gastronomía y lo único que pasa es perder algunos puestos de trabajo, porque indirectamente la gastronomía mueve muchísimo el mercado interno y las economías regionales. Como ejemplo se puede citar lo que es frutas, verduras, lácteos, carne, embutidos, etc. Todas estas cosas nosotros lo llamamos industrias sin humo porque nadie las ve y la gente piensa que significa que solo algunas personas quedarán en la calle, es muchísimo más grande el problema».

Fuente: Uno