El sistema de colectivos suma otro problema: Rosario Bus inició un procedimiento preventivo de crisis

El único prestador privado del transporte de pasajeros de la ciudad afronta serias dificultades económicas. El intendente Javkin advirtió que “las empresas privadas del interior se están cayendo".

El único prestador privado del transporte de pasajeros de la ciudad afronta serias dificultades económicas. El intendente Javkin advirtió que “las empresas privadas del interior se están cayendo».

La crisis del sistema público de transporte de pasajeros somatiza desde diferentes flancos. En una historia atravesada por las denuncias de poca frecuencia y el boleto cada vez más caro, el intendente Pablo Javkin reveló que «la empresa Rosario Bus está trabajando con un procedimiento preventivo de crisis». Seamos claros: quién puede trabajar eternamente por debajo de los costos.

¿Qué es un procedimiento preventivo de crisis? El Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) es un recurso contemplado por la Ley de Empleo 24.013 que permite a las empresas suspender o despedir personal ante una disminución del trabajo por fuerza mayor o por causas no imputables al empleador.

El titular de Palacio de los Leones confirmó este lunes a la mañana que el único prestador privado de servicio de colectivos de la ciudad, la empresa Rosario Bus, se encuentra en problemas. En este sentido, el intendente afirmó que “las empresas privadas del interior se están cayendo” debido a la quita total de los subsidios por parte del gobierno de Javier Milei.

“El transporte tiene tres componentes: el valor de los coches, el del combustible que impacta diariamente en el costo del servicio y la paritaria” de los choferes, explicó Javkin. “La paritaria en el caso del Amba (Área Metropolitana de Buenos Aires) fue cubierta por el gobierno nacional con una ampliación de subsidios que fue negada al interior”, recalcó.

El intendente planteó que hay un problema estructural en lo que respecta al sistema de movilidad en todo el país: “Las empresas del transporte del interior del país se están cayendo. Si hoy hiciese una licitación, seguramente no habría oferente” y agregó que esto tiene que ver con la forma de distribución de los recursos públicos en materia de subsidios al interior.

La semana pasada, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, reafirmó la decisión del Ejecutivo nacional de no enviar mayores recursos para el transporte del interior, tema que según el alto funcionario corresponde a las provincias. “Es una injusticia absurda e inexplicable y que se fue consolidando en Argentina”, aseveró Javkin.

Crónica de una crisis anunciada
El sistema de colectivos de la ciudad se encuentra en la mira desde hace rato por varios motivos. El costo del boleto aumentó repetidas ocasiones debido a las subas de los combustibles, entre otros insumos, y la quita del Fondo Compensador (subsidios) por parte del gobierno nacional.

No obstante, además del encarecimiento del boleto, la empresa Rosario Bus fue señalada por la mala frecuencia del servicio: dejan fuera de circulación unidades en las puntas de línea con los motores apagados para ahorrar combustible y no desgastar la unidad. Así lo confirmaron choferes de la empresa en estricto off con La Capital.

En un principio, autoridades municipales negaron que esto fuera para ahorrar combustible. Señalaron, en cambio, que la decisión de Rosario Bus de quitar cerca de 50 unidades del servicio durante horarios puntuales de la jornada es por motivo del «ausentismo» de choferes y «rotura de unidades». Así lo afirmó Nerina Manganelli, secretaria municipal de Movilidad.

«Podríamos estar mejor, no voy a decir que los servicios se cumplen en un 100%, pero estamos monitoreando porque hay rotura de unidades y ausentismo”, dijo la funcionaria.

No obstante, queda latente la pregunta sobre si realmente se trata de fallas de este tenor. Trabajadores consultados por La Capital confirmaron a este diario que la empresa está en un deterioro de sus balances contables: “Lo sabemos hace mucho tiempo”.

Los choferes pidieron permanecer en el anonimato debido a posibles represalias por parte de la empresa, pero apuntaron que los problemas de la prestadora de servicio público de transporte comenzó hace más de un lustro atrás, con la muerte del dueño de Rosario Bus, Agustín Bermudez. ¿El motivo?: sus herederos no son afines al rubro del transporte.

El intendente apuntó a la pata financiera del conflicto: “El costo del boleto hoy está en el orden de los 1.300 pesos en cualquier ciudad del país. Vamos a tener un servicio que estará un 30 o 40 por ciento por debajo de ese costo” y se preguntó: “Seamos claros: ¿quién puede trabajar eternamente por debajo de los costos?”, se preguntó Javkin cambiando el enfoque de la explicación de Manganelli.

“El costo del boleto hoy está en 1.300 pesos, pero cumpliremos con los monitoreos, multando a la empresa, pero hay un problema estructural”, sostuvo Javkin.

El temor de la Intendencia radica justamente en la posibilidad de que el sistema de transporte de Rosario termine totalmente en manos del Estado municipal, lo cual está muy lejos de los objetivos del Ejecutivo local: “El problema no es solo el costo del boleto. Si se queda sin operadores privados, el sistema de transporte se terminará estatizando. Y eso no es lo que se quiere. Y si el transporte no funciona impacta en el comercio, en la educación y en un montón de servicios. Esa idea de que funcione el transporte público solo en el Amba, liquidaría la economía del interior de la Argentina. Ese es un tema muy serio y crucial. Es la vida económica de las ciudades de todo el país”, advirtió el jefe municipal.

Fuente: La Capital