Cada vez se necesitan destinar más horas de trabajo para llevar comida a la mesa

La alimentación tiene precios referenciados con el dólar y es una alcancía para recaudar impuestos. El salario mínimo cubre dos tercios de la comida básica del mes.

La alimentación tiene precios referenciados con el dólar y es una alcancía para recaudar impuestos. El salario mínimo cubre dos tercios de la comida básica del mes.

El salario mínimo, que perciben cerca de 3 millones de argentinos, apenas alcanzaba el mes pasado a cubrir el 65% del costo de la canasta alimentaria en un hogar de cuatro integrantes.

Estadísticamente, si un hogar dependiera de esa remuneración básica para servir la mesa, se quedaría con hambre o sin plata para comer durante casi un tercio del mes.

La relación entre el salario y la subsistencia vital se viene deteriorando debido a que, mientras aquellos corren de atrás a la inflación, los alimentos la forman.

Por un lado la internacionalización de los precios de los commodities (descontadas las retenciones) y de las manufacturas de origen agropecuario hacen que el dólar sea un valor de referencia, pero no el oficial sino de los que siguen las especulaciones del mercado.

El vuelco salarial

En el año previo a la pandemia, la relación entre el mínimo percibido por los trabajadores y el valor de los alimentos era de 13% a favor del sustento alimenticio. En la pospandemia se fue 6,15% bajo el nivel y al año siguiente (2023) sólo quedaba 1,4% a favor del sueldo.

El mes pasado una familia de 4 miembros, hombre y mujer de 19 a 50 años, con 2 niños de 2 a 3 años y de 4 a 5 años, tenía que destinar $730 mil mensuales a los consumos básicos.

Y el rubro alimentos subió 2,3% en el mismo período, si bien hubo bajas estacionales en verduras y lácteos.

En la última semana, se registró una caída de precios en cinco de las 10 categorías relevadas, entre ellas el azúcar, verduras y lácteos.

Medidos de punta a punta, los precios tuvieron un incremento promedio del 4,2%, variación que explican bebidas, panificados y lácteos en un 60%. Si bien permitirá mantener en un dígito la inflación, dejan al piso de los ingresos aún más relegado.

A todo esto, el Consejo del Salario aún no tiene fecha para reunirse.

Según un cálculo efectuado por Infobae que abarca desde el Plan Austral de Raúl Alfonsín hasta nuestros días, para comprar pan hay que trabajar 16 minutos más, fideos, 5 minutos extras, asado 54 minutos más y leche 7 minutos.

Fuente: Tiempo Sur