El intendente de Neuquén, el superávit y la «nueva ciudad»
El intendente de la ciudad festeja su mes número 54 de gestión con superávit, ininterrumpido. Recaudación récord, menor índice de empleados y contrataciones, la “tablita” del mandatario para que las cuentas cierren ordenadas
El intendente de la ciudad festeja su mes número 54 de gestión con superávit, ininterrumpido. Recaudación récord, menor índice de empleados y contrataciones, la “tablita” del mandatario para que las cuentas cierren ordenadas
La administración de la comuna capitalina ha logrado su mes número 6 con superávit. Si tomamos los cuatro años de ejercicio del primer mandato del intendente Mariano Gaido, se puede concluir que el mandatario comunal cuando finalice este mes de junio llevará 54 meses de gestión con superávit fiscal. Toda una rareza para los tiempos que corren en el país.
El intendente junto a su secretario de Finanzas, Fernando Schpoliansky, mantienen en alto la bandera de eficiencia en el cobro de las tasas municipales. Actualmente entre el 70 y 85 por ciento de los contribuyentes capitalinos cumplen religiosamente con el pago de sus tributos. Otra rareza, si se toman en cuenta los tiempos que corren y las críticas que se alzan sobre distintos aspectos de la gestión comunal.
Los índices de cobrabilidad marcan un alto grado de satisfacción de los vecinos capitalinos, motivo por el cual cumplen religiosamente con sus obligaciones ante la administración comunal.
La mano férrea de Mariano
Gaido está dispuesto a no abandonar la senda del cumplimiento fiscal. Por ello es que solicito a su mano derecha en Economía, Juan Dutto, para que no se autorice el nuevo ingreso de personal a la planta de empleados y que se mantenga la suspensión de nuevas contrataciones.
Sobre un presupuesto anual de 140 mil millones de pesos, la gestión municipal destina al pago de salarios y personal contratado el 28,8 por ciento; ubicando a la comuna por sobre los estándares de cumplimiento presupuestario a nivel nacional. Al menos así lo indicó el Secretario de Finanzas del municipio, Fernando Schpoliansky.
“El superávit alcanzado permite a nuestro gobierno mantener su política de compromiso social con todos los sectores de nuestra ciudad. Donde existe un problema allí están los funcionarios del gobierno trabajando alguna solución”, indicó Schpoliansky.
“Sin superávit, hubiera sido imposible pensar en el desarrollo que se está haciendo a lo largo y ancho de Neuquén. Millones de dólares invertidos en infraestructura y servicios, son la muestra del perfil de gestión que le imprimió el intendente a nuestra ciudad”, señaló.
El superávit y la nueva ciudad
En los últimos cuatro años, el gobierno de la ciudad entregó más de 3.200 lotes. Esta semana el intendente, Mariano Gaido, anunció el inicio de una segunda fase del plan de urbanización del nuevo casco de la ciudad ubicado en la zona de la meseta. Serán 4 mil lotes y estarán ubicados en la zona de la ruta del petróleo.
Un conglomerado urbano, comercial, industrial y de servicios que ocupará menos del 10 por ciento del nuevo ejido municipal. Según las estimaciones realizadas por operadores inmobiliarios, hasta el momento, teniendo en cuenta los 3.200 lotes entregados y la construcción de las viviendas que cada familia realizó; la “nueva ciudad” ha generado un movimiento promedio de 176 millones de dólares.
La cifra sólo contempla lo invertido por cada una de las familias que se beneficiaron con el lote, pagado en cuotas, y el dinero que utilizaron o en vías de utilización para construir sus viviendas.
Soluciones que alimentan a la microeconomía
Estos 178 millones de dólares forman parte del circuito de la microeconomía de la ciudad.
Es el goteo permanente de las familias de trabajadores y profesionales que han invertido en la Meseta y hoy muestran el camino sobre el futuro de la nueva ciudad que poco a poco se erige sobre la meseta neuquina. El viento, los yuyos y cardos que hasta hace cinco años atrás dominaban la zona, hoy dieron lugar al progreso y prosperidad de miles de neuquinos que encontraron su lugar en el mundo.
En su convicción de avanzar hacia el noroeste de la ciudad, el “lord mayor” imprime ritmo a su gestión. Acaba de anunciar el loteo de un nuevo barrio en el casco nuevo. Serán 400 lotes y se trata de la primera etapa de un plan que contempla la entrega de 4.000 terrenos, en los próximos 4 años. Levanta aún más la vara de la gestión municipal y la administración de los recursos para llegar con soluciones a los sectores más carenciados, pero también a los segmentos medios de la sociedad capitalina.
Lotes y un nuevo concepto de urbanización
La idea del gobierno de la ciudad es mutar la operatoria de los loteos hacia un concepto más moderno que le permita eficientizar los recursos. Poner en valor la tierra fiscal para que a través de operadores asociados se financie la infraestructura y los servicios de los futuros barrios.
La medida no solo irá en beneficio de miles de familias que hoy no encuentran solución a su necesidad habitacional, sino que también terminará con la especulación y los sobreprecios que hoy dominan el segmento de los loteos, en toda la región Confluencia.
Ha dado el puntapié Gaido a un nuevo desafío. No se conforma con lo realizado hasta el momento. Le restan tres años y medio de su segundo mandato y quiere ir por la urbanización de la nueva ciudad. Un conglomerado en el que abundan matrimonios jóvenes, trabajadores y profesionales nacidos y criados, pero también “auto percibidos” neuquinos. La síntesis misma de la época que transita la provincia junto a la esperanza de desarrollo y progreso que inspira Vaca Muerta. Una etapa que Gaido no quiere dejar pasar.
