Trufas: Será “significativo” el impacto en la economía de Los Antiguos
Así lo indicó el ministro de la Producción, Harold Bark, sobre el desarrollo de truferas en la zona del Valle. El mismo comenzó en enero de 2013 en cuatro parcelas familiares y ahora se avanzará en la segunda etapa para afianzar la producción y comercialización de este producto, conocido como “el oro negro del mercado gourmet”.
El Ministerio de la Producción con el apoyo del Consejo Federal de Inversiones puso en marcha un proyecto de desarrollo de truferas en la localidad de Los Antiguos.
Considerando el impacto económico que puede generar esta actividad en la región, el ministro Harold Bark solicitó apoyo técnico y financiero al CFI para comenzar con los ensayos pertinentes.
Las trufas son el fruto de un hongo subterráneo que se desarrolla en asociación con las raíces de ciertos árboles o arbustos a los que se denominan especies truferas, por ejemplo: el roble, la coscoja, el avellano y la encina. Se encuentran debajo de la superficie del suelo aproximadamente a unos 20 centímetros de profundidad.
Se trata de un producto gourmet altamente demandado en la cocina internacional por su profundo aroma y delicado sabor.
Para el ministro Bark “va a ser significativo el impacto en la economía regional, ya que esta actividad alcanza rentabilidades muy altas debido a su limitada producción” indicó el funcionario, y recalcó que la trufa es considerada “el oro negro del mercado gourmet”.
En virtud de un convenio de cooperación técnica entre el Centro de Investigaciones y Extensión Forestal Andino Patagónico (CIEFAP) y la Facultad Agraria de la Universidad de Perugia, Italia, se capacitó a profesionales argentinos, en inoculación, certificación, evaluación de inoculación, producción de plantas y cosecha de trufa.
En dicha capacitación los profesionales identificaron a Los Antiguos como una localidad que reúne a priori las condiciones de suelo y clima para el desarrollo de truferas.
En la última semana de octubre, los técnicos del CFI estuvieron en Los Antiguos y confirmaron el avance hacia la segunda etapa de este proyecto.
El cultivo de trufas en Argentina es una realidad y una gran alternativa de agronegocio con gran potencial de expansión en el país. Debido a la estacionalidad de la producción, el suministro de trufa fresca desde Argentina es considerado como complementario para los mercados de Europa, EEUU y Japón, ya que mejora el abastecimiento mundial durante todo el año. Es también una ventaja en cuanto a precios debido a la contra temporada para el producto en fresco. Hay meses en que las trufas no están disponibles en los centros tradicionales de consumo, por lo tanto, la oferta desde Argentina debería lograr precios iguales o superiores a los que se transan en el mercado europeo tradicional.
Así en enero de 2013, un grupo de técnicos desarrolló un proyecto bajo el ala de la Secretaría de la Producción del Municipio de Los Antiguos, convencido de que este hongo era factible de ser producido, competitivamente, en la zona, debido a sus condiciones climáticas y edáficas.
Es que en Los Antiguos existen condiciones de suelo y clima cercanas al óptimo para las especies seleccionadas en los ensayos. Sólo la cantidad de precipitaciones se encuentra por debajo, pero la existencia de un sistema de riego normalizado permite tener en cuenta el proceso.
En el proyecto que se puso en marcha, a modo de ensayo en la primera etapa, los objetivos eran: evaluar a escala campo la micorrización de distintas especies arbóreas inoculadas en laboratorio con esporas de distintas especies de rutas comestibles, comparar el comportamiento de dichas plantas en distintos tipos de sitios y transferir esta tecnología productiva y de manejo a agricultores de la región, especialmente pymes rurales.
Para poder llevar a cabo el proyecto, desde la Secretaría de la Producción dependiente de la Municipalidad de Los Antiguos se gestionó para conseguir el apoyo financiero y técnico por medio del CFI (Consejo Federal de Inversiones). Así, se determinaron cuatro unidades demostrativas de producción de trufas en la localidad, quedando estas para beneficio de los productores, que son en su mayoría unidades familiares.
El financiamiento del CFI alcanzó el año pasado los $ 316.360 realizándose la compra de plantines, análisis de tierra y se realizaron los cercos perimetrales de tejido. Al igual que se estimó la colocación de sistemas de riego correspondiente.
