Daños por una crecida en Cafayate
07/01/2015 CONTINGENCIASImpresionante desborde del río Chuscha, en el acceso norte del pueblo vallisto
Un fuerte crecida del río Chuscha, en el ingreso a Cafayate, provocó daños y anegamientos en calles y viviendas en la tarde de ayer, luego de una jornada de intenso calor.
Cerca de las 18 y tras fuertes tormentas que se advertían en los cerros del oeste del pueblo vallisto, el río Chuscha bajó en forma sorpresiva arrastrando piedras y lodo a su paso. El nivel del agua subió hasta la altura del puente de ingreso a Cafayate, desbordó y se llevó barandas.
Varios vehículos fueron afectados por el desborde.
Asumido pocas horas antes como nuevo titular de Defensa Civil de Salta, Ernesto Flores aseguró que estaban alertas al comportamiento del río, por las lluvias en los cerros.
La impresionante crecida del río generó pánico, ya que las calles del pueblo se llenaron de agua y barro. «Pese al desborde del río, no se reportaron heridos ni evacuados en Cafayate», aseguró anoche Flores a El Tribuno.
«La situación inicial fue el desborde del río Chuscha. Es por eso que el agua y el barro ingresaron al pueblo, más precisamente al barrio Profesionales. Las máquinas de Vialidad y la intendencia trabajaron en el lugar, en coordinación con los bomberos y la Policía», señaló el flamante funcionario.
Flores dijo que hubo un fuerte chaparrón en el pueblo pero que el problema fueron las fuertes precipitaciones en los cerros. «Llovió bastante y el agua bajó muy fuerte. Ahora el río está bajando y estamos monitoreando. Esperemos que no llueva en los cerros», sentenció.
Una tormenta sorpresiva
Si bien la tormenta sorprendió a todos, muchos vecinos dijeron que la inundación se debe a la falta de obras a la vera del río.
Según relataron, la lluvia comenzó en los cerros en horas de la siesta cayendo sobre la ciudad las primeras gotas cerca de las 16. La mayor intensidad de la tormenta se produjo hacia las seis de la tarde. En pocos minutos se produjo la crecida del río, que se desbordó unos diez metros más abajo de la colectora o zanjón de guardia de la zona oeste. El desborde avanzó hacia la zona del hospital Nuestra Señora del Rosario entrando por la calle 12 de Octubre. Allí se inundaron la denominada costanera, paralela al río Chuscha, y la calle General Paz. Muchos vehículos tuvieron que ser auxiliados ya que quedaron empantanados en el lodo. Por estas dos arterias, el agua tomó rumbo norte-sur, arrasando con todo lo que encontraba, hasta desembocar nuevamente en el le cho del río.