32º Festival del Poncho en Molinos, 23 y 24 de enero
El Festival del Poncho, previsto para los días 23 y 24 de enero. También tendrá un programa de doma y jineteada.
«Este festival tiene un encanto muy particular, desde la belleza de sus paisajes hasta la presencia de los artistas más emblemáticos del folclore», sostuvo Walter Chocobar, intendente de la localidad de Molinos.
La convocatoria popular tendrá un agregado muy especial, contará con dos folcloristas que saben con claridad de los aplausos y las ovaciones: Oscar “Chaqueño” Palavecino y Jorge Rojas.
«La verdad que será una propuesta tentadora; estos dos grandes del folclore compartirán la velada del viernes 23. Además, no hay que olvidarse de la doma y la jineteada. No tengo dudas de que con el correr de las ediciones hemos ganado ampliamente en prestigio», aseguró Chocobar.
La noche del viernes se completará con: Fermín y Pancho Pereyra, Tucanychaya, Tupac 7 y artistas locales. El sábado 24 subirán al escenario: Pancho y Polo, Pitín Zalazar, Los Izkierdos de la Cueva, Las Voces de Orán, Marcela Ceballos y Los Diableros de Jujuy.
«Lo importante es que cada día más gente conoce Molinos. Este festival permitió, a través de los años, que el pueblo adquiriera reconocimiento, no solo a nivel nacional sino también internacional, muchos extranjeros llegan para disfrutar de este evento del canto popular. Además, significa una importante fuente de trabajo para nuestra comunidad. Cada día tenemos un mayor compromiso con la gente», aclaró el intendente.
Mil personas habitan en el pueblo de Molinos y llegan a 2.300 en todo el municipio. «La gente espera ansiosa cada año la llegada del festival, no solo para disfrutar con los mejores artistas del país, sino también para abrir su corazón a los visitantes», dijo Chocobar.
Según el propio intendente explicó, con sobrado sacrificio y un alto porcentaje de trabajo, los avances fueron numerosos en los últimos tiempos. «Hace un mes terminamos con la construcción del colegio secundario; también colocamos 6.500 metros cuadrados de adoquines y entregamos 30 viviendas. Todavía quedan objetivos por cumplir, pero la voluntad está intacta».
