Rosario: Volvieron a aumentar los pedidos de permisos para construir edificios
11/01/2016 ECONOMÍA
Iniciativa privada. El 2015 cerró con 2.517 trámites. Este año se proyectan cincuenta mil metros cuadrados más que en 2014, el más bajo de los últimos cinco.
Pese a tratarse de un año electoral, cuando las decisiones de inversión suelen postergarse, Rosario cerró el 2015 con 2.517 permisos de edificación otorgados para levantar unos 675 mil metros cuadrados, alrededor de 50 mil más que el año anterior. Para los constructores, el dato es positivo “ya que se trata de una tendencia a tener en cuenta que muestra que la expectativa de construir es superior a la de años anteriores”, sostuvo el gerente de la delegación local de la Cámara Argentina de la Construcción, Rubén Llenas. A diferencia de otros años, la inversión empieza a preferir oficinas, locales comerciales y cocheras por sobre las viviendas.
El informe de la dirección de Obras Particulares del municipio suele considerarse como una radiografía del ritmo de crecimiento de la cuidad. Por esa oficina pasan los emprendimientos inmobiliarios privados que se materializarán en los años siguientes.
Durante el 2015, se autorizaron 2.571 nuevas construcciones, un número que supera el número de permisos tramitados en los últimos tres años. Sin embargo, los metros cuadrados a construir sólo se mostraron por encima de 2014, cuando se otorgaron permisos por 624 mil metros cuadrados, bastantes menos que el año anterior.
“Fue un año que se mostró cauto para la actividad constructiva. Se hizo lo que estaba convenido, pero no se arriesgó más”, advirtió el director de Obras Particulares, Sergio Corte, y aventuró que el año que recién comienza “será mejor todavía” ya que algunos grandes emprendimientos empezarán a tramitar sus permisos.
Cambio de uso. A diferencia de años anteriores, cuando la construcción de viviendas motorizó el llamado boom inmobiliario rosarino (por 2007 se entregaron permisos para edificar por un millón de metros cuadrados) desde 2010 vienen ganando protagonismo los proyectos que involucran a superficies comerciales: oficinas, locales, galpones o cocheras.
El año pasado se autorizaron 254.519 metros cuadrados, una superficie que supera los registros de los últimos cinco años. La cifra se explica en parte porque algunos de los emprendimientos de Puerto Norte cambiaron de uso y donde se proyectaban viviendas se definieron oficinas, pero también por los beneficios otorgados para la construcción de cocheras que hace más rentables los terrenos.
Lo que no cambia es el protagonismo del distrito centro como motor de los proyectos inmobiliarios. Más de la mitad de los metros cuadrados avalados el año pasado se desarrollan entre los bulevares.
Detrás se ubican la zona norte de la ciudad. En el distrito norte, se tramitaron 437 permisos para levantar 174 mil metros cuadrados y el distrito noroeste se autorizaron 523 nuevas construcciones que suman 74 metros cuadrados.
La diferencia radica en que hacia el oeste la mayoría de los permisos son para viviendas unifamiliares, mientras que en el norte priman los emprendimientos en altura y, en consecuencia, es mayor la superficie a construir.
Un balance. En las oficinas locales de la Cámara de la Construcción, los números se leen con algún optimismo. “Si bien no deben tomarse como lo que efectivamente se va a ejecutar porque algunos pueden no concretarse, se trata de una tendencia a tener en cuenta que muestra que la expectativa de construir es superior a la de años anteriores”, sostuvo el gerente de la entidad, Rubén Llenas.
Para el ejecutivo, el balance del comportamiento del sector durante el año pasado es positivo. “La actividad tuvo un crecimiento interanual de entre 6 y 7 por ciento. Si comparamos ese indicador con los indicadores de otras actividades productivas, pocas mostraron un crecimiento similar, con lo cual el saldo es positivo”, destacó.
Según describió, en el 2015 no sólo se mantuvo el nivel de actividad privada sino también la obra pública tuvo “un ritmo bastante bueno”.
Y hay otros dos datos que el gerente de la cámara consideró importantes. El crecimiento de los puestos de trabajo del sector, entre un 3 y un 4 por ciento en la provincia y un 7 por ciento a nivel país y la percepción de que, a diferencia del 2014, “no hubo construcciones que se paralizaron, algunas quizás pueden haber bajado un poco su ritmo, pero todos los proyectos siguieron en marcha”, destacó.
Desde la Asociación de Empresarios de la Vivienda, pintaron un 2015 más complicado. “Notamos muchísimos edificios menos que los que normalmente se empiezan. La actividad fue menor que en los años anteriores”, sostuvo el presidente de la entidad, Marcelo Passardi.
El dirigente advirtió que la obra pública tampoco tuvo un ritmo suficiente para dinamizar el sector. “La cantidad de obras en ejecución fue sensiblemente menor al año anterior”, insistió.
Con menos inspectores que hace diez años
La Dirección de Obras Particulares cuenta con una plantilla de 65 inspectores, un 30 por ciento menos de los que había entre el 2006 y el 2009, años llamados del boom de la construcción privada. “Para los parámetros actuales de la actividad estamos trabajando casi al límite”, advirtió el director del área, Sergio Corte, y confió en que este año se incorpore más personal.
El funcionario advirtió que a la par que fue decreciendo el plantel de personal, se complejizaron los trámites para otorgar los permisos, lo que hace necesario más tiempo de escritorio.
“Actualmente de las activiades de control participan también los agentes de la GUM, Defensa Civil y Control Urbano”, aclaró Corte aunque juzgó que “sin dudas” debería incoporarse más personal técnico. Un tema sobre el que ya se tomaron algunas decisiones como convocar a selecciones internas y la apertura del RUP para cubrir las vacantes en esa dependencia.