Para el Soyem, el ejecutivo de Bariloche quiere «embarrar la cancha»
El secretario gremial del Soyem, Adrián Arroyo, se refirió a las denuncias por violencia de género por parte del ejecutivo respecto del accionar del gremio, difunidas por los medios, y señaló que "quieren embarrar la cancha".
El secretario gremial del Soyem, Adrián Arroyo, se refirió a las denuncias por violencia de género por parte del ejecutivo respecto del accionar del gremio, difunidas por los medios, y señaló que «quieren embarrar la cancha». Además consideró una falta de respeto que se «hable con tanta liviandad de violencia de género».
Siguen encadenados los trabajadores contratados en el primer piso de la municipalidad y tras la jornada de lunes, en que los trabajadores estuvieron en el primer piso de la municpialidad, con bombos y redoblantes, una trabajadora fue asistida por una ambulancia y afirman desde la municipalidad que estuvo relacionado con la actitud de los trabajadores.
Adrián Arroyo, desde el gremio, contó en diálogo con Radio Seis que «me pareció raro que fue llamada a la secretaria de gobierno y a la hora y pico me entero que estaba mal, me acerco, estaba siendo asistida por Defensa Civil y tenía 14-8 de presión».
Manifestó que cuando llegó la ambulancia fue acompañada por el jefe de gabinete. Señaló que a la tarde se enteraron que había una denuncia por violencia de género. «Se habla de violencia de género, como moneda de cambio, no es así, pedimos respeto al ejecutivo por lo que ha pasado en Bariloche», sostuvo.
Dijo que no tienen certeza de que la trabajadora haya manifestado que lo que le sucedió está relacionado con la presencia de los trabajadores reclamando en la municipalidad.
«Están queriendo embarrar la cancha, presionaron a una compañera, se empieza a sentir mal». Destacó que jamás «le vamos a faltar el respeto a un compañero o compañera que esté cumpliendo su función».
Dijo que hasta el momento no fueron notificados de la denuncia, sino que se enteraron por los medios.
Insistió en que quieren desviar la problemática que tienen con los trabajadores y cconsideró una falta de respeto que se hable con tanta liviandad de violencia de género.
Gladys de la Fuente, una de las trabajadoras, señaló en diálogo con el medio radial que «estoy pasando un momento muy difícil, soy madre de cinco hijos, me cuesta vivir esta situación día a día y hablan de violencia de género, qué queda para mí hoy, soy contratada, no me renovaron el contrato, era operadora de las cámaras de seguridad». Afirma que fue contratada mucho antes de las elecciones. «Me gustaría saber qué me queda para mí, para mis compañeros, para él que tiene a su señora con un estado crítico de salud. Es difícil vivir el día a día», insistió.
