Rosario armó su capítulo a favor de la soberanía alimentaria
Fue frente al Hospital Carrasco en el marco del juicio ético a Monsanto, que se realizará en La Haya entre el próximo 14 y el 16 de octubre
Fue frente al Hospital Carrasco en el marco del juicio ético a Monsanto, que se realizará en La Haya entre el próximo 14 y el 16 de octubre
Diferentes organizaciones sociales armaron ayer una serie de actividades públicas a favor de la soberanía alimentaria frente al Hospital Carrasco a modo de capítulo rosarino del juicio ético contra la multinacional agroalimentaria Monsanto, que se realizará entre el 14 y el 16 de octubre en la ciudad holandesa de La Haya.
En la vereda del tradicional hospital, que apoyó la iniciativa y que busca promover desde su dirección formas de vida saludables y sustentables, se montó una feria donde se ofrecían verduras y alimentos orgánicos, libros y materiales acerca de la agroecología, artículos de tocador naturales e información sobre algunas de las problemáticas ambientales de la región.
También participaron de la feria —que nació desde el grupo Huertarteando, que mantiene una huerta dentro del jardín del Carrasco— otros actores sociales como el grupo El Paraná No Se Toca y el taller de Soluciones Tecnológicas Sustentables (STS) con su iniciativa a favor de la bici como forma de transporte y de vida.
«Nos interesaba formar parte desde Rosario de esta movida mundial contra Monsanto, ya que la agroindustria es uno de los sectores que más energía consume y que vuelven a este mundo muy poco sustentable», comentó Fernando Bertoni, de STS.
Martín Cáceres, del movimiento Cajonardi (fabricantes de cervezas artesanales), explicó que la idea de la convocatoria es ayudar a crear conciencia acerca de lo que multinacionales como Monsanto significan para la soberanía alimentaria de los pueblos: «Hay una pequeña conciencia que va creciendo de a poco, pero falta que la política acompañe. Vemos que en materia de fumigaciones retrocedemos en vez de mejorar, todavía queda mucho por hacer», señaló.
Además de la feria, hubo una proyección seguida de un debate del documental «Crecimiento sagrado» y otras actividades artísticas y recreativas tanto en la huerta como en el propio jardín del hospital.
Un hospital «crítico». El director del Hospital Carrasco, Horacio Crespo, contó que desde esa entidad buscan generar una mirada crítica respecto a la producción de alimentos.
«No se trata sólo de Monsanto, hay toda una trama de académicos, el Estado y la propia sociedad que muchas veces consume sin saber qué», dijo, para agregar que lo que intentan desde el hospital es promover todo tipo de iniciativa que ayude a mejorar la salud de las personas y de las comunidades a través de una mirada crítica sobre los actuales modelos productivos.
En el jardín de esa institución funciona una huerta de alimentos gestionada por el grupo Huertarteando, y otro espacio de huerta medicinal donde se cultivan plantas cuyos principios medicinales se utilizan para la propia atención de los enfermos.
«Con estas iniciativas buscamos ir contra la monocultura. Porque así como hay monocultivos, también existe una monocultura que borró muchos saberes ancestrales», agregó el especialista.
