Los Esteros del Iberá dieron un paso más para convertirse en Parques Nacionales
El domingo soleado fue ideal para la presentación en sociedad del primer núcleo de los Esteros del Iberá que fue cedido para transformarse en el segundo Parque Nacional de Corrientes.
El domingo soleado fue ideal para la presentación en sociedad del primer núcleo de los Esteros del Iberá que fue cedido para transformarse en el segundo Parque Nacional de Corrientes. Se trata del “Portal Cambyretá”, con una extensión de 22 mil hectáreas que fueron cedidas por Conservation Land Trust, la organización fundada por Douglas Tompinks, que desembarcó en los Esteros del Iberá y puso en marcha un inédito plan de restauración del medioambiente y reintroducción de especies, con el yaguareté como emblema.
El portal Cambyretá está ubicado en la punta norte de los Esteros del Iberá, a 107 kilómetros de Posadas, apenas pasando Ituzaingó. Las 22.000 hectáreas que constituyen el Parque Cambyretá fueron restauradas por CLT para que la naturaleza vuelva a recuperar todas sus características originales. Se retiró el ganado vacuno para hacer lugar a un mayor número de herbívoros autóctonos, se levantaron los alambrados para facilitar la circulación de la fauna, se realizan quemas en parche para evitar la propagación de grandes incendios, y se está trabajando en la reintroducción de especies de aves extintas en el Iberá, como el guacamayo colorado y el muitú o pava de monte. Junto a los portales San Nicolás, Carambola y Galarza, forma parte de la sección norte de la Ruta Escénica del Iberá, que ahora se transformarán en Parques Nacionales, en una inabarcable extensión de 1.300.000 hectáreas de tierras públicas y privadas.
La toma de posesión de las tierras, en coincidencia con el 113° aniversario de la creación del primer parque nacional –siete mil hectáreas cedidas por Perito Moreno-, fue encabezada por Eduardo Breárd, el correntino presidente de Parques Nacionales y Sofia Heinonen, presidenta de CLT Argentina, además del gobernador de Corrientes, Ricardo Colombi, además de cientos de invitados especiales. También estuvieron presentes guardaparques de diferentes regiones del país y de 12 parques nacionales de Latinoamérica, como Chile, Brasil, Paraguay, México y hasta Japón.
“Este es el primer núcleo, de 23.000 hectáreas, de las 157.000 que es el total de la donación de Douglas. Mi agradecimiento especial no sólo a él, si no a su viuda Kristine McDivitt, a Sofía Heinonen y a toda la gente de CLT”, dijo Bréard.
Heinonen agradeció a Tompkins y a su viuda “por haber confiado en un equipo argentino que estábamos dispuestos a todo por el Iberá, porque el equipo está básicamente integrado por correntinos”, dijo en referencia a los nuevos guardaparques que trabajarán en el nuevo núcleo.
El nuevo Parque Nacional tendrá un administrador que conoce cada ondulación de los Esteros. Se trata de Pascual Pérez, un nativo del Iberá que se formó como guardaparque en San Pedro, Misiones. Desde que Tompinks compró las tierras, asumió el rol de administrador de las reservas gracias a su manejo del guaraní y pacientes recorridas a caballo para hablar con los pobladores y sumarlos al proyecto. “Es un orgullo y una responsabilidad muy grande asumir el cargo de administrador del Parque. Esto recién empieza, estamos viendo crecer a un hijo”, contó a Misiones On Line. Además de él, otros seis integrantes del equipo de CLT se convertirán en guardaparques.
Pérez espera que ahora la zona se “prepare” para recibir al turismo que vendrá atraído por la categoría Parque Nacional.
El gobernador, Ricardo Colombi, le dijo a Misiones On Line que ahora el desafío será potenciar la actividad turística de los Esteros del Iberá y establecer una conectividad aérea con las Cataratas del Iguazú para potenciar el corredor federal. “Lo importante es que hay 150 mil hectáreas, tierras que eran de una empresa extranjera pasen al Estado nacional y se conviertan en el segundo parque nacional”, indicó.
Después de las formalidades del traspaso, llegó la hora del “picnic” en el extenso parquizado del portal Cambyretá, ubicado a unos 30 kilómetros de la ruta nacional 12 y después de pasar por varias estancias que ahora son “reservas”. Antonio Birabent fue el maestro de ceremonias de un show musical que tuvo al misionero Ramón Ayala como figura estelar, que eclipsó en los aplausos a Yacaré Manso, Mauro Bonamino grupo y el visitante Kevin Johansen..
