Chascomús: Con la ayuda de dos concejales sindicalistas, Gastón sostiene el veto al bono de fin de año
El intendente vetó una ordenanza que establecía un bono de fin de año para los trabajadores municipales. La oposición buscará reponerlo y para eso presiona a dos concejales oficialistas que, a pesar de su extracción sindical, apoyan la decisión de Gastón.
El intendente vetó una ordenanza que establecía un bono de fin de año para los trabajadores municipales. La oposición buscará reponerlo y para eso presiona a dos concejales oficialistas que, a pesar de su extracción sindical, apoyan la decisión de Gastón. El papelón de la presidenta del HCD.
La novela en torno al pedido de un bono de fin de año para los empleados de Chascomús sumó dos nuevos capítulos en las últimas semanas. Es que, lo que parecía un simple proyecto de declaración de la oposición, favorable a la iniciativa y que tuvo el apoyo de parte del oficialismo, trastocó en una ordenanza una vez que la comuna que comanda Javier Gastón recibió un millonario ATN con el cual se podría haber afrontado la erogación.
Chascomús recibió de Nación unos 20 millones de pesos, de libre disponibilidad, que, denuncia la oposición, Gastón colocó en un plazo fijo. Según los cálculos, sólo una porción de esos fondos –cerca de 4 millones- serían necesarios para afrontar el pago del bono.
Al intendente no le tembló el pulso para vetar la ordenanza y mantener intacto el aporte de Nación. Al cabo, su postura es coherente con lo que había explicitado previamente: “Tenemos que ser responsables para no caer en populismos baratos que lo único que hacen es dañarnos hacia adentro de la estructura del estado”, declaró en octubre, en franco conflicto con la línea que el Frente Renovador bajaba a nivel nacional respecto de los premios de fin de año.
Claro que, con el veto, puso en un brete a sus propios concejales. Es que la oposición buscará insistir con la ordenanza, para lo cual necesita los votos afirmativos de las dos terceras partes de los integrantes del HCD local. Allí entra en cuestión el rol de dos ediles: Ramiro Cangianelli, de UxCH, y Cecilia Machado, del Frente Renovador, ambos oficialistas y representantes sindicales.
Cangianelli es miembro de UPCN y Machado proviene del SUPA, el sindicato de Facundo Moyano. Ambos gremios vienen cinchando fuertemente para obtener bonos de fin de año y, paradójicamente, por obediencia debida en el plano local, bancarán el veto de Gastón en perjuicio de los trabajadores municipales. También quedará en offside la concejal María Travascio, presidenta del Cuerpo, que acompañó la movida cuando era un simple proyecto de declaración. ¿Cómo explicará ahora su marcha atrás?
Por lo pronto, la oposición echó algo de sal en esas heridas. Desde la UCR exhortaron a los ediles a que “hagan honor a su origen, reviertan su voto y se pongan de lado del trabajador” en lugar de “seguir apoyando a Gastón y darle la espalda a los empleados una vez más”.
