Comercios correntinos no resistieron los efectos de la inflación y el bajo consumo

Aseguran que fue un año muy difícil para el sector, por lo que muchos debieron mudarse a lugares más pequeños. En la peatonal Junín, por cuadra hay, al menos uno o dos locales cerrados.

Aseguran que fue un año muy difícil para el sector, por lo que muchos debieron mudarse a lugares más pequeños. En la peatonal Junín, por cuadra hay, al menos uno o dos locales cerrados. Afirman que la reducción de las ventas, sumado al aumento de tasas e impuestos, los perjudicó mucho.

Comerciantes no tuvieron un buen año de ventas y prueba de ello es el hecho de que muchos debieron dejar el rubro o mudarse a lugares más pequeños para poder paliar la situación. Muestra de ello es caminar por la peatonal Junín y advertir que por cuadra hay entre uno o dos locales cerrados, con carteles de alquiler.

En diálogo con EL LIBERTADOR, uno de los referentes económicos, Enrique Collantes manifestó que «a los empresarios les está costando mucho sostenerse».

De acuerdo con lo que señaló, hubo muchos factores que perjudicaron a la estabilidad y en muchos casos, decidieron achicar el comercio o el horario de atención.

«Fue un año de muy baja venta, los precios aumentaron y la gente sólo compra lo básico», indicó.

Agregó que «el poder adquisitivo bajó un 40 por ciento y frente a ello la gente empezó a consumir sólo lo básico y eso fue afectando, sobre todo, a los pequeños y medianos empresarios».

Además explicó que frente a la realidad de menos clientes, se debió enfrentar a incrementos de las tasas y los impuestos.

De esa manera sostuvo que durante todo el año se hizo un esfuerzo muy grande para evitar despidos y mantener la fuente laboral de los trabajadores.

GENERAL

Según expresó, es una situación que se está dando en todo el país y la Provincia no está ajena a ello. Es así que recientemente, desde la Cámara Empresaria de Comercio, advirtieron que: en «ocho meses cerraron unos 6.300 comercios».

Además, desde Fedecámaras ya vienen anticipando que los pequeños negocios, por el volumen de ventas que tienen, se quedan sin márgenes de ganancia, deben afrontar un brutal ajuste de tarifas y al mismo tiempo absorber los aumentos de precios mayoristas, porque es imposible trasladar esos costos al mostrador.

En cuanto a los cierres, la entidad señala que a junio se registraron 2.000 bajas en la región del Noreste; en la provincia de Buenos Aires, 600; 500 en el NOA; 500 en la Capital Federal; 400 en Córdoba; 300 en Santa Fe y 150 en Mendoza. En tanto los otros se distribuyeron en el resto del país.

«El precio del alquiler no tiene incidencia en los cierres»

En la arteria comercial, son muchos los locales cerrados con carteles que «se alquilo», en muchos casos, están vacíos hace mucho tiempo, como el caso del local ubicado en San Juan y Junín. Desde el sector económico, señalan que el valor del alquiler no incide en la decisión de que un empresario pueda abandonar la actividad. «Si bien el precio que se pide por una propiedad ubicada por Junín pueda ser elevada, si el negocio anda bien siempre se supera ese monto. Por eso no es determinante», explicaron. Aseguraron que en general, los empresarios ya tienen en cuenta el presupuesto del negocio a la hora de alquilarlo.

Fuente: El Libertador