Con la basura de Salta Capital se entierran $7 millones por mes

Con una separación domiciliaria básica de residuos secos se recuperarían $250 mil por día. En la capital se recolectan 740 toneladas diarias. Otras 300 se vuelcan en los ríos.

Con una separación domiciliaria básica de residuos secos se recuperarían $250 mil por día. En la capital se recolectan 740 toneladas diarias. Otras 300 se vuelcan en los ríos.

 

La ciudad de Salta desecha cada día 99 toneladas de plásticos, 97 t de papel y cartón, 43 t de vidrio y 15 toneladas de metales ferrosos y no ferrosos. Esa fracción representa casi la cuarta parte de los residuos sólidos urbanos que se tiran en toda la provincia.

Los mencionados materiales descartados son fácilmente recuperables para su aprovechamiento como materias primas de nuevos productos o su reutilización.

Todos ellos tienen altas demandas y precios en alza en los mercados.

Solamente con una separación domiciliaria básica en los hogares de la capital se recuperarían mínimamente $7 millones por mes.Lee también: Separemos juntos, solo cinco toneladas por día

Desde 2005, el volumen de residuos sólidos urbanos producidos en la provincia ha crecido un 1,6 por ciento por año. Una década atrás, se desechaban 890 toneladas por día.

Actualmente, son cerca de 1.047 toneladas, de las que unas 300 siguen siendo confinadas en BASURALES a cielo abierto que ocupan, como práctica generalizada, los lechos de los ríos.

Con las proyecciones actuales, hacia 2020 se generarán en la provincia alrededor de 1.364 toneladas diarias de residuos domiciliarios y en 2030 serán aproximadamente 1.557 toneladas por día.

Estas cifras se desprenden de un estudio que profesionales del Instituto de Ingeniería Sanitaria de la Universidad de Buenos Aires (UBA) elaboraron en 2015 a partir de los relevamientos y caracterizaciones que las consultoras Iatasa e IDOM realizaron para el Plan Provincial de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos.

Gestión deficiente En la inmensa mayoría de los municipios de la provincia reinan los basurales a cielo abierto incontrolados, que provocan daños de magnitud en el ambiente, los ecosistemas y la salud pública.

La ciudad de Salta, que cuenta con el relleno sanitario de finca San Javier, y Metán, que tiene un vertedero controlado, son las jurisdicciones que dan a los residuos una disposición final más aceptable, aunque tampoco escapan a reclamos y denuncias por impactos negativos atribuidos a deficiencias de la ingeniería ambiental aplicada, manejos negligentes y falta de control de los organismos competentes.

La proliferación de microbasurales en los barrios de la ciudad es otra gran preocupación social, al igual que el vuelco de desechos en los canales pluviales.

Especialistas advierten también sobre una cultura inadecuada en el consumo y el desecho masivo de envases y envoltorios.

Impactos negativos La gestión deficiente de residuos sólidos urbanos tiene efectos graves para el MEDIO AMBIENTE y la salud. Uno de ellos es la contaminación de aguas superficiales y subterráneas con los líquidos lixiviados que se desprenden de la des composición de la BASURA.

El suelo también sufre alteraciones por los metales pesados que se filtran desde los vertederos.

A su vez, la quema reiterada de residuos genera humos, olores y partículas en suspensión que afectan la calidad del aire y contaminan la atmósfera con gases que producen el efecto invernadero.Por la inapropiada gestión de la basura proliferan vectores de enfermedades infecciosas. Los animales que se alimentan de basura, a la vez, portan enfermedades a toda la cadena alimentaria.

Los residuos livianos dispersados por el viento en los alrededores de los basurales terminan enmarañados en la vegetación, causan significativas pérdidas de paisaje e incrementan el riesgo de incendios. La acumulación de residuos en lugares inadecuados, en definitiva, afecta las áreas circundantes y a sus pobladores.

Fuente: El Tribuno Salta