Ya cumplió 26 días una huelga en mina chilena de Atacama

La medida de fuerza en La Escondida se transformó en el mayor paro de la historia. Las negociaciones están en punto muerto y sin solución.

La medida de fuerza en La Escondida se transformó en el mayor paro de la historia. Las negociaciones están en punto muerto y sin solución.

La huelga en la mina chilena Escondida, el mayor yacimiento de cobre del mundo, cumplió ayer 26 días, transformándose en el paro más largo de su historia, sin que hasta ahora haya una solución a la vista.

Responsable de cerca del 5% mundial de la producción de cobre, las operaciones en la Escondida está paralizada desde el 9 de febrero tras fracasar una negociación para renovar el contrato colectivo firmado hace cuatro años.

“Hoy día cumplimos los 26 días (…) pero nosotros tomamos una decisión con los trabajadores de estar el tiempo que tuviera que ser necesario estar en huelga. De hecho, estamos evaluando estar quizás más de 60 días (paralizados)”, dijo el director y vocero del sindicato, Carlos Allendes, tras reunirse en Santiago con autoridades del ministerio de Minería.

Los mineros reclaman a la compañía -controlada por la angloaustraliana BHP Billiton- la mantención de los beneficios negociados en la última negociación colectiva de 2013 y los tiempos de descanso, y rechazan que estos beneficios no sean extensivos para los nuevos contratos, como pretende la empresa.

Piden, además, un bono de fin de conflicto de unos 40.000 dólares y un aumento salarial del 7%.

Tras el desplome en el precio del metal, que en cuatro años pasó de cotizarse por sobre los 4 dólares por libra a una media de dos dólares, la empresa asegura que las condiciones del mercado son muy distintas que hace cuatro años atrás, al igual que la operatividad del yacimiento, por lo que para asegurar una vida útil de la mina por otros 80 años se deben adecuar los contratos.

A 26 días del arranque de la huelga, las negociaciones entre los trabajadores y la minera están completamente cortadas.

“En este momento no hay negociaciones. Estamos en un punto muerto pero estamos tranquilos”, agregó el dirigente a periodistas en Santiago.

La última reunión entre las partes se llevó a cabo hace dos semanas, sin llegar a ningún acuerdo ni fijar una próxima fecha para reunirse.

Instalados en un campamento en las cercanías del yacimiento ubicado en pleno desierto de Atacama, el más árido del mundo, los trabajadores se aprontan a cumplir su primer mes de paralización y aseguran estar preparados para otros 30 días.

Los dirigentes sindicales temen que al cumplirse un mes de la huelga, la empresa empiece a negociar individualmente con los trabajadores, quienes pueden “descolgarse” de la movilización y volver a las faenas.

“Tenemos la economía y la situación bastante tranquila para estar un poquito de tiempo más (en huelga)”, advierte Allendes, sobre una huelga que para Escondida ha significado dejar de producir unas 110.000 toneladas métricas de cobre.

Fuente: Los Andes